Miguel Ángel Asturias
Jorge Antonio Ortega Gaytán
Escritor

El abordar en esta oportunidad a los críticos asturianos, permite a simple vista, profundizar en temas simultáneos y paralelos que en opinión de ellos influyeron y de alguna manera se tornaron determinantes para la realización de la obra del connacional y premio Nobel, Miguel Ángel Asturias.

Las dos ponencias desarrollan aspectos del mismo escritor, pero lo analizan desde diferentes ángulos, con variantes y alternativas, que en conjunto permiten observar ese universo creado por Asturias en los albores del siglo pasado.

El surrealismo que da sustento al texto de Miguel Ángel Asturias se puede definir como “la otra realidad”, la otra Guatemala de la cual venimos, del choque de dos culturas, de la relación asimétrica de poder que surge entre los ibéricos y los americanos, en sí, el fenómeno que produce la dinámica del mestizaje en la nación guatemalteca.

Byron Barahona de la Universidad de Stanford y Fernando Feliu-Moggi de la Universidad de Colorado Springs son los ponentes de esta aproximaci—n que tiene como punto gravitante el surrealismo asturiano y sus diversas manifestaciones en los dos documentos publicados por Asturias.

El trabajo de Barahona inicia por la indefinición del surrealismo o indigenista de parte de Asturias y deriva su ponencia en los supuestos de la influencia de inicio y apogeo de la etnografía, que luego diera paso a la antropología, como hoy por hoy la conocemos. Hace énfasis en la mezcla de valores, costumbres y tradiciones, que se van generando dentro de la conciencia colectiva guatemalteca en forma bipolar, unas se lucen como identidad nacional, otras menos afortunadas se les esconde, pero están presentes.

La situación privilegiada de Asturias en la Ciudad de las Luces le permite según el ponente aproximarse a los movimientos de vanguardia, al surrealismo o al indigenismo; de hecho, conocer esa otra Guatemala que es parte de su niñez y que de alguna forma no había aflorado. El ser alumno de las culturas americanas, con énfasis en Mesoamérica, le permite una aproximación libre de obstáculos al corazón de la cosmografía y filosofía maya, se convierte en parte del equipo que traduce el Popol Vuh del francés al español. Es por ello la afirmación del ponente… “Asturias llega a la cultura maya desde la antropología, pero otorgándole especial importancia a la producción literaria… narración oral… y la representación simbólica de la filosofía maya”.

La traducción, se convierte en un puente de doble vía entre la literatura y la antropología, sin precedentes, un punto de unión que le da esencia al indigenismo americano en el proceso de vanguardia, el cual se consolida en el quehacer literario de los primeros decenios del siglo pasado.

El deslumbramiento de la elite europea a través de la antropología francesa que da vida a múltiples trabajos de conocimiento de otras culturas como la africana, oceánicas y amerindias son sin duda alguna, un referente para el texto asturiano. Independiente de lo anterior, la relación con los exponentes de vanguardia se intuye como un propelente en la génesis de la obra de Asturias.

El análisis de “Leyendas de Guatemala” deja a flor de tierra el espacio híbrido de la mezcla de culturas, el mestizaje de la religión y sobre todo de la conciencia colectiva, que se ve retratada en las costumbres y el diario vivir de los guatemaltecos. El tejedor del telar cultural en el mundo asturiano que le permite ir de una condición social a otra, de un estadio político religioso paternalista a un reducto cultural maya, es sin duda alguna el “Cuco de los Sueños” A este personaje le está permitido violar las reglas.

Esta ponencia evidencia una vez más la influencia multidireccional a que fue expuesto Miguel Ángel Asturias en la producción de su obra y estilo que marcó desde sus raíces como escritor.

El trabajo de Fernando Feliu-Moggi se enfoca directamente en la controversia en torno a la obra de teatro ¨Pastorela Rítmica¨, la cual se monta en Guatemala al retorno de Asturias de Par’s, obra que se presenta en los primeros d’as de enero de 1934 en la capital.

El posicionamiento del crítico radica en las publicaciones del diario El Imparcial y la crítica escrita de esa época (si es que se le puede describir como tal) de la obra. El sustento se hace por aproximaciones y por intermedio de referentes acondicionados a la época, en que las vanguardias están de moda, se hace creer en una ruptura con lo tradicional, lo criollo y lo religioso (lo correcto políticamente debido al momento que se vive en la Nueva Guatemala de la Asunción)

La dinámica de la crítica expuesta tiene su punto de anclaje en la presentación de la Pastorela Rítmica y lo que generó en el ambiente cultural guatemalteco de inicio del siglo pasado, “Una revelación sin precedentes”, la simplicidad y el ensamble utilizado por Asturias en el montaje (poesía, música y pintura) le dan a la obra un marco referencial único en aspectos del teatro en sí.

Tres detalles resaltan en la obra, la primera es que es un retrato de los nacimientos artesanales guatemaltecos, se le suma los hechos bíblicos y lo sorprendente son los dos inditos de trapo (representados por niños).

Asturias, tenía una visión muy clara con respecto a la clase de teatro para América, lo cual resalta en la puesta en escena de la Pastorela Rítmica. La simplicidad estilística del montaje, hacer grande el entorno y pequeño al protagonista, líneas y luces para lograr la atmosfera básica para transportar al mundo del ensueño, a la otra Guatemala, al surrealismo que daba en ese momento sus primeros pasos en el suelo guatemalteco. El choque que produce dicha obra teatral va a desencadenar un sinfín de críticas, unas a favor y otras infectadas de costumbrismo, radicalizadas y hasta cierta forma aderezadas de racismo por el uso de elementos indígenas. El tono vario de intensidad tanto en la defensa como en la ofensiva de las críticas, pero esto desarrolla un marco de referencia para asegurar hoy que la obra no pasó desapercibida para los entendidos como para los ingenuos críticos de la época en mención en que se radicaliza la cultura de la descalificación.

A manera de conclusión, el visualizar las dos ponencias que analizan el texto asturiano, permite comprender la magnitud de la obra en la perspectiva americana del momento en que se rompe con el costumbrismo y todo aquello con sello de criollo. Las visiones e interpretaciones que los dos ponentes hacen de la obra de Asturias suponen el conocimiento profundo del discurso de su texto, se evidencia el manejo de las herramientas de crítica literaria tradicional y de fuentes históricas literarias, como la crítica en los periódicos de la época o ensayos realizados en la génesis del surrealismo.

La desconstrucción del texto y todo lo periférico de la obra asturiana, como el ambiente en que se desenvuelve el escritor quedan al margen del análisis, lo cual está muy marcado en su trabajo, máximo cuando se describe que el Señor Presidente que estaba finalizado a su retorno de París, así como el esbozo de Hombres de Maíz.

El contraste entre vivir en la Ciudad de las Luces (epicentro de la actividad literaria mundial) y el Barrio de Candelaria de la Ciudad Guatemala (es como despertar de un agradable sueño a través de un balde de agua fría) ¿La realidad guatemalteca germen de la inspiración asturiana? ¿Los contrastes chapines más que el mestizaje? El universo de la obra de nuestro premio Nobel da para estudios de mayor profundidad y por muchos años más utilizando los nuevos procedimientos de análisis.

Los textos vistos desde el género permiten una comparación como tal, debido a su posicionamiento espacial y temático, “Leyendas de Guatemala” y “Pastorela Rítmica” evocan en su voz la otra cultura, la otra Guatemala, esa que está construida sobre ciudades y culturas, donde el guía se convierte en el “Cuco de los Sueños” y que los niños que representan a los inditos de trapo, que aún se venden en los mercados de artesanías en Guatemala en las “Cajas de Atrapasueños”. ¿Casualidad?

Los dos mundos encajados en la lectura de Asturias y el surrealismo permiten viajar al subconsciente guatemalteco, la conciencia colectiva de los chapines sin trauma, ni prejuicios debido a que ya pasó por la crítica mundial ¡así somos! no hay vuelta de hoja, una mezcla de sincretismo y formalismo que el surrealismo reveló al mundo por medio de la literatura y la pluma magistral de Miguel Ángel Asturias.

PRESENTACIÓN

           Al ser Miguel Ángel Asturias un coloso de la literatura universal no es raro que muchos estudiosos consagren su vida (o parte de ella) a la revisión crítica de su producción literaria.  Tal es el caso de Fernando Feliu-Moggi y Byron Barahona que, si nos atenemos al trabajo que nos presenta Jorge Antonio Ortega Gaytán, constituyen dos de los más relevantes estudiosos de la obra de nuestro Nobel.

El trabajo presentado por Ortega Gaytán es breve, dada la naturaleza de nuestra edición, pero estimulante en virtud de las claves de lectura que ofrece.  Así, los lectores pueden encontrar el pretexto perfecto para acercarse a la obra asturiana o el ánimo, para los más especializados, de profundizar en su hermenéutica.

Superando lo literario, sin querer ser “más papistas que el Papa”, dada las fechas de cuño cristiano, presentamos una “Carta del Papa Francisco al pueblo de Dios”.  En esta se abordan algunos temas que son actuales en la Iglesia Católica, dos de ellos, el abuso sexual y la exigencia de renovación interna de la jerarquía eclesiástica.  Creemos que son tópicos importantes de las que, independiente de nuestras propias convicciones de fe, no podemos ignorar.

Nos sentimos muy ligados a usted porque nos unen intereses intelectuales.  Y sí, aunque quizá pensemos diferente, sin duda aspiramos a un mejor país.  Nuestro deseo desde La Hora es ser un medio eficaz de reflexión en el proceso de madurez de vida y la tarea de construir una mejor sociedad.  Sigamos coincidiendo y no perdamos la esperanza.  Feliz y venturoso Año Nuevo para usted.  Muchas bendiciones.

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