SAN SEBASTIÁN, España
AP
El Festival de Cine de San Sebastián concluye hoy su 67ª edición, una cita marcada por el protagonismo del cine español, tanto por la cálida acogida a sus películas a concurso en la sección oficial como por el Premio Donostia en reconocimiento a su carrera entregado a la actriz Penélope Cruz.
La intérprete española, visiblemente emocionada, recogió el galardón anoche de manos de su amigo Bono, cantante de la banda de rock U2. El Festival entrega esta noche sus premios, punto final a un evento por el que han pasado, entre otros muchos, el actor Donald Sutherland y el director Costa Gavras, los otros dos Premios Donostia de esta edición.
Tres películas españolas han concentrado la mayor atención de crítica y público en la sección oficial. “Mientras dure la guerra”, “La trinchera infinita” y “La hija de un ladrón”, las dos primeras con la Guerra Civil y sus devastadores efectos como escenario y la restante como la crónica del reencuentro entre un padre y una hija.
En “Mientras dure la guerra”, el director Alejandro Amenábar reconstruye los acontecimientos que dieron lugar al conflicto a través de la mirada del filósofo Miguel de Unamuno, mientras que “La trinchera infinita”, protagonizada por Antonio de la Torre y Belén Cuesta, narra la historia de un hombre que decide permanecer encerrado en su casa durante 33 años tras declararse la guerra. Ambas películas han sido recibidas con elogios por la crítica. Por su parte, las emotivas interpretaciones de Eduard Fernández y su hija Greta marcan “La hija de un ladrón”, primer largometraje de Belén Funes.
En la sección oficial también han sido recibidas con agrado la mexicana “Mano de obra” y la argentina “La odisea de los giles”. La primera, debut de David Zonana en la dirección, aborda un caso de abusos laborales, mientras que en la cinta de Sebastián Boresztein, Ricardo y Chino Darín encabezan el reparto de una trama ambientada en la Argentina del corralito, en 2001, y en la que un grupo de víctimas de una estafa deciden tomarse la justicia por su cuenta.
Penélope Cruz, que presentó la película “La red avispa”, del director francés Olivier Assayas, recogió este viernes el Premio Donostia en una ceremonia marcada por la presencia, no anunciada, de Bono, y por el discurso de la actriz, que recordó a las más de 1 mil mujeres asesinadas por violencia de género en España desde 2003. Ante un auditorio repleto, y en presencia de su pareja, Javier Bardem, Cruz agradeció al Festival el galardón y, especialmente, a los directores Pedro Almodóvar, Bigas Luna y Fernando Trueba.
Además de la intérprete española, también recogieron sus Premios Donostia en homenaje a su carrera el actor canadiense Donald Sutherland y el realizador franco-heleno Costa Gavras. Por la alfombra roja del Festival han pasado también Gael García Bernal, Edgar Ramírez, Kristen Stewart, Sam Neill, Eva Green, Laetitia Casta, Ricardo y Chino Darín, Juliette Binoche y Ken Loach, entre otros.