Por DANIELA BERRETTA
BRUSELAS
Agencia (AP)
Probablemente no es una pintura perdida de Miguel Ángel y es casi un hecho que no fue robada por una pandilla sofisticada de ladrones internacionales. Pero la desaparición de una obra que un sacerdote afirmó que parecía del maestro renacentista tiene perplejos a los investigadores belgas.
La pintura montada en madera, “Nuestra señora del silencio” (“Madonna del Silenzio”), fue robada el viernes pasado de la Iglesia de Sint-Ludgeruskerk en el pueblo de Zele, a 50 kilómetros (30 millas) al noroeste de Bruselas. El padre Jan Van Raemdonck cree que podría ser de Miguel Ángel y dice que un experto en arte italiano planeaba ir a autenticarla.
La policía obtuvo un video granulado de seguridad en el que aparece un hombre caminando cerca de la escena del robo antes del amanecer con lo que parece ser la pintura apoyada sobre su cabeza. Una hazaña de por sí, pues según el padre se necesitaron tres hombres para montar la pintura de 1,5 metros por 90 centímetros (5 por 3 pies) en un caballete antes de Navidad.
Además del video la policía quiere hablar con un joven de entre 17 y 20 años que un testigo vio cerca de la iglesia esa mañana, vestido con una sudadera gris y con una mochila oscura.
Mientras descubrir el paradero de la pintura es un reto, establecer de dónde vino es casi un misterio en sí. Se cree que un legislador belga la compró a un amigo o amiga que tenía problemas económicos. El legislador la vendió después a una organización que ayuda a la iglesia.
Hace 13 años la organización se la dio a la iglesia en Zele. Estuvo en una esquina donde no pudo ser vista por 11 años hasta que Van Raemdonck la cambió a un lugar más prominente. Justo antes de Navidad, la exhibió con orgullo en medio de la iglesia para que la gente la apreciara.
Van Raemdonck dice que le contó a pocas personas sobre sus sospechas de que podía tratarse de un Miguel Ángel, pero pese a su entusiasmo por la pintura, los expertos dicen que es extremadamente poco probable que sea una obra maestra del siglo XVI.
Martens dijo que cree que el pintor “solo conocía el modelo de Miguel Ángel por un grabado”, pero dijo que el artista “logró mantener suficientes elementos de Miguel Ángel en su obra”.
Cualquiera que sea el origen de la pintura y el resultado de la investigación, Van Raemdonck tiene mucho material nuevo para su libro.