Por Almudena de Cabo
Berlín
Agencia (dpa)
El festival wagneriano de Bayreuth, uno de los principales de la temporada operística, iniciará hoy una nueva edición con la obra «Lohengrin», para la que tuvieron que buscar un reemplazo para el papel principal en último momento después de que el tenor francés Roberto Alagna cancelara su participación.
Uno de los platos fuertes será la ópera «La valquiria», dirigida por el famoso tenor español Plácido Domingo, que se convertirá así en el primer español en empuñar la batuta desde el foso del emblemático teatro de la ciudad bávara de Bayreuth, en el sur de Alemania.
Domingo vuelve al festival, donde debutó en 1992 en el papel de Parsifal, después de interpretar la parte de Siegmund de «La valquiria» en el año 2000. Pero en esta ocasión no ocupará un puesto en el escenario, sino que será el encargado de dirigir la obra a lo largo de tres funciones que tendrán lugar el 31 de julio, el 18 y 29 de agosto.
«Es muy emocionante, un momento muy emotivo. La vida pasa tan rápido. Me siento como si hubiera estado aquí ayer por última vez», explicó el tenor de 77 años en una reciente entrevista con el diario berlinés «Berliner Zeitung».
Sin embargo, para él no supone una novedad tomar la batuta. «Yo diría que corresponde a mi carrera profesional: soy cantante y director de orquesta. Estos son los dos lados de mi carrera. Pero es una extraña coincidencia que dejara Bayreuth con ‘La valquiria’ como cantante y ahora vuelva como director de orquesta con esta misma ópera», reconoció.
Para Domingo es todo un honor acudir a la gran cita anual de la música del compositor alemán Richard Wagner (1813-1883). «Bayreuth es un templo. No hay otro lugar como éste. Un compositor tuvo la fortuna de encontrar a alguien que construyera un teatro musical sólo para él y para sus obras», indicó sobre algo que no volvió a darse «de nuevo en el mundo entero».
Como ya va siendo la tónica del festival, en esta edición los organizadores también tuvieron que hacer frente al desafío de tener que sustituir «in extremis» al protagonista de la ópera inaugural de este año.
Alagna, especializado en el ámbito francés e italiano, reconoció a través de su agencia tener problemas para llevar a cabo la ópera de Richard Wagner al no haber podido estudiar adecuadamente el papel de Lohengrin debido a una sobrecarga de trabajo.
Los expertos criticaron duramente al tenor francés por no haberse dado cuenta de ello hasta finales de junio, a penas un mes antes de la inauguración del festival.
El peso de la ópera recaerá ahora sobre el tenor polaco Piotr Beczala, que ya la ha interpretado en el pasado. El director israelo-estadounidense Yuval Sharon ha sido el encargado de la puesta en escena y Christian Thielemann de la dirección musical de Lohengrin, que abre el cartel del festival de este año.
Para Thielemann, gran experto en dirigir las obras de Wagner, las tres óperas más complicadas del compositor alemán son «El holandés errante», «Los maestros cantores de Núremberg» y «Lohengrin», según indicó en entrevista con dpa.
Está previsto que la ópera del compositor alemán se vuelva a interpretar los días 29 de julio, 2, 6 y 10 de agosto en la nueva edición del festival, que se extenderá hasta el 29 de agosto y que contará en cartel también con «Parsifal», «Tristán e Isolda», «Los maestros cantores de Núremberg» y «El holandés errante».
Entre un público con numerosas personalidades destacadas volverá a figurar la canciller alemana, Angela Merkel, que asiste todos los años a la inauguración en la célebre «colina verde» de la ciudad bávara. Junto a ella, estará también el primer ministro checo, Andrej Babis, y su homólogo holandés, Mark Rutte.
La primera edición del festival de Bayreuth tuvo lugar en 1876. Tras la muerte de Wagner, su viuda Cosima (1837-1930) continuó con la organización del certamen. En los tiempos del nacionalsocialismo la cita musical vivió su capítulo más oscuro ya que el dictador nazi Adolf Hitler acudía con regularidad a Bayreuth.
Tras la Segunda Guerra Mundial, el festival vivió un nuevo comienzo en la década de los 50 de la mano de los nietos de Wagner Wieland y Wolfgang Wagner. Tras la muerte de Wieland en 1966, Wolfgang Wagner (1919-2010) dirigió solo el festival hasta 2008. Después continuaron sus dos hijas Eva Wagner-Pasquier y Katharina Wagner. Posteriormente Wagner-Pasquier dejó su puesto.
