Por Miguel Ángel Ceballos
Ciudad de México
Agencia (dpa)
Los característicos overoles, camisas de franela, chaquetas de mezclilla, así como los atuendos más formales que vestía el pintor mexicano Diego Rivera, serán exhibidos por primera vez en una exposición en el Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo, en la Ciudad de México.
Se trata de la exhibición «Diego Rivera, genio, figura y silueta», que abrirá el 27 de junio en el museo que funciona en las que eran las dos casas de la famosa pareja de artistas y que el pintor guanajuatense habitó hasta su muerte en 1957. La muestra también incluye un documento histórico de Rivera.
Apoyado en la certeza de que la ropa es memoria, identidad y afecto, el investigador Renato Camarillo Duque plantea una muestra en la que se exhiben alrededor de 230 piezas, entre textiles, calzado, accesorios como sombreros, fotografías poco conocidas, óleos y gráfica.
El propósito, dice el curador, es que los visitantes aprecien estos objetos como piezas con información, simbolismos y huellas que no se pueden encontrar en otro lugar, piezas únicas.
«Por ejemplo, verán cómo la silueta de Diego fue evolucionando a través del tiempo, la calidad de sus trajes, el origen de las telas, de sus zapatos, que eran americanos o rusos», explicó Camarillo, restaurador especializado del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
«Son trajes que pertenecieron a su último periodo de vida, cuando estaba mermado de salud, pero que al integrarlos al espacio arquitectónico de este museo hacen que tengan un diálogo que va a impactar a las personas que lo visiten», manifestó.
Luis Rius Caso, director del Museo, indicó que la colección textil se exhibe por primera ocasión luego de permanecer 30 años en las bodegas del INBA. Tras un proceso de restauración que duró aproximadamente nueve meses, las prendas serán exhibidas en maniquíes que habitarán los espacios del artista.
Se mostrará también una selección de fotografías muy poco conocidas en las que aparece Rivera, así como un conjunto de caricaturas de creadores como José Luis Cuevas, Ernesto “el Chango” García Cabral, Rafael Freyre y Miguel Covarrubias, con quienes Rivera polemizó en algún momento de su vida.
«La idea es mostrar a un personaje genial que no sólo trascendió por su actividad plástica sino por todo lo que generó. Es un Diego Rivera menos convencional, menos estatuario y más de carne y hueso al que retrataron sus contemporáneos, a veces de manera crítica, caricaturizada o ironizada», indicó Rius.
Camarillo reveló que uno de los textos que le sirvió para entender la importancia de mostrar esta faceta del muralista fue “El Retrato de Diego”, escrito por Frida Kahlo y publicado en el catálogo de la exposición “Homenaje Nacional por 50 años de labor artística”, que editó el INBA en 1951, donde hace una descripción del aspecto físico, emocional y tan cercano que tuvo con Diego Rivera.
«Los visitantes verán que curiosamente Diego era un hombre que estaba muy desproporcionado: tenía manos muy pequeñas, pies muy grandes, piernas largas, un vientre amplio y hombros caídos. Era un hombre con mucha desproporción», precisó.
La exposición «Diego Rivera, genio, figura y silueta» permanecerá en exhibición hasta el 23 de septiembre en Museo Casa Estudio Diego Rivera y Frida Kahlo.
Por ejemplo, verán cómo la silueta de Diego fue evolucionando a través del tiempo, la calidad de sus trajes, el origen de las telas, de sus zapatos, que eran americanos o rusos.
Camarillo, restaurador