Auguste Renoir (1841-1919)

El Bal du moulin de la Galette es sin duda la obra más importante de Renoir a mediados de la década de 1870. Aunque el pintor decidió representar a algunos de sus amigos, se esforzó ante todo por reflejar la atmósfera alegre de ese establecimiento popular en Montmartre. Por sus cualidades, el cuadro constituye una de las obras maestras de principios del impresionismo.
(Con información del sitio digital del Musèe d´Orsay)

Artículo anteriorLas trampas de la metáfora
Artículo siguienteEl Gucumatz en Persona