_CUL2_1BPor Laura Wellen

He estado pensando en las pérdidas este año, perder a alguien, perder el sueño de un lugar, perder la idea de un hogar. He estado pensando en cómo nos recuperamos de la pérdida o sucumbimos ante ella por completo. En las pérdidas políticas y en las personales, en lo que se pierde entre ambas. “Todos piensan que lo horrible llega por sí solo, pero no es así,” escribe Brian Doyle para The Sun. “Viene de la mano con lo normal. Nadie habla de eso… Lo horrible está dentro de lo normal… Lo sabemos, pero no hablamos de eso.”[1] Yo agregaría que lo horrible también puede llegar en momentos de extrema belleza, de transformación. Pienso mucho en cómo respiramos en medio de esos momentos, aun cuando sentimos nuestros pulmones comprimirse.

En los tres espacios de exposición de Proyecto Poporopo, Cecilia Porras Sáenz utiliza tres materiales para su ambiciosa instalación llamada Región Antes: barro, ripio y carbón. Todo el suelo de la primera sala, menos un pequeño espacio perimetral, está cubierto por una capa espesa de barro húmedo. En medio de la sala, una cama –también cubierta de barro– y sobre una de las paredes, una pequeña nota manuscrita. Las huellas se imprimen sobre el barro suave y denso, el olor a tierra humedece el ambiente.

En el segundo espacio, Porras bajó el techo varios centímetros, instalando un cielo falso que flota incómodamente por encima de la cabeza del visitante. En el suelo, dispuso una gran cantidad de ripio. Mientras atravieso la sala caminando por encima de ese caos de piedras tambaleantes mi pecho se comprime. Pienso en asbesto, en polvo y en pulmones, en la ausencia de normas de seguridad. Después de todo, me digo, la seguridad es un concepto banal desde que morimos todos, todos los días. Pero me gusta respirar, me gusta la sensación de inhalar y de exhalar, y me acuerdo de que esto no es un don sino un regalo. Sobre la pila de ripio, algunas piedras se detienen solas, un pequeño toque escultural en medio de la abstracción de los escombros.

En la tercera sala, una montaña de carbón descansa en una esquina, su negrura profunda se intensifica por la luz tenue de una bombilla colgando en el espacio. Durante la inauguración, una chica está sentada en cuclillas, ensimismada a un costado de la montaña, mirando fijamente la oscuridad. Cerca de ella, una silla de ruedas. Talvez esto sea un poco tosco, pienso. Todo este carbón es tan negro, tan evocador, tan fuerte. Hay tanta gente aquí, pero nadie habla – nunca he oído tal silencio en Poporopo.[2]

Para salir, el visitante debe volver sobre sus pasos, atravesar de nuevo el cuarto del techo caído, navegar otra vez alrededor de la habitación llena de barro. Hay un paso físico que ocurre al entrar y al salir: sumergirse en una serie de acontecimientos, para luego salir en desbandada para sobrevivir a ellos, o talvez para escapar. Qué es la Región Antes, me pregunto. ¿Acaso es ese espacio que ocupás emocionalmente antes de perder a alguien o algo? ¿Acaso es un recuerdo de lo que ha sido la vida antes de la pérdida? ¿Acaso es una época antes del dolor o la enfermedad? O talvez sean simplemente estados corporales.

«La soledad es un puente desde donde podemos retornar, pero el viaje está difuminado y modificado por la mente» dice Porras en una entrevista con GT Cultura[3]. La obra de Porras conecta el teatro con las artes visuales: ella pasó la noche anterior a la inauguración en la instalación: 12 horas de soledad, inmersa en estos espacios materialmente intensos. No existe una reacción física sencilla al hecho de estar en un espacio donde el techo está caído, donde inhalas suciedad y polvo y rastros de las cosas que se fueron, donde confrontas la soledad y la quietud con tu respiración. Es horrible, pero de una manera sublime, de esa manera en la que encuentras algo sobre ti y decides enfrentarlo y, tal vez, superarlo.

[1] Brian Doyle, «Everyone Thinks that Awful Comes By Itself, But It Doesn’t.» The Sun Magazine, Issue 494 (February 2017).
http://thesunmagazine.org/issues/494/everyone-thinks-that-awful-comes-by-itself-but-it-doesnt

[2] Proyecto Poporopo es un bar y un espacio alternativo de arte, ubicado en la zona 1 de Ciudad de Guatemala is a cafe and alternative https://www.facebook.com/proyecto.poporopo/

[3] GT Cultura, «Región Antes, la nueva instalación-performance de Cecilia Porras Sáenz.» 26 de enero, 2017. http://www.gtcultura.com/region-antes-la-nueva-instalacion-performance-de-cecilia-porras-saenz/

Artículo anteriorSentimientos de un cucurucho
Artículo siguienteLas voces de los enterrados