Por JAKE COYLE
NUEVA YORK
Agencia/AP

Tras haber pasado la noche filmando la escena más devastadora de «Manchester by the Sea» — en la que su personaje, cargando bolsas del mercado, se enfrenta a una tragedia que lo acecha a lo largo del filme—, Casey Affleck se tropezó y sintió una punzada recorrerle la espalda.

El guionista y director Kenneth Lonergan, un veterano lanzador, le gritó rápidamente que se moviera para evitar que los músculos se le congelaran. «Me dijo, ‘¡Párate! ¡Haz como si me estuvieras tirando una pelota!»’, recordó Affleck.

Así que ahí, bajo la luz de una madrugada de invierno, en un estacionamiento vacío, Affleck y Lonergan corrieron atolondradamente, jugando un juego imaginario de pelota. Fue un raro momento de alegría para este par de autoproclamados gruñones, y una breve pausa a la dolorosa «Manchester».

Pero ambos, y en particular Affleck, han tenido muchas razones para celebrar últimamente. La actuación naturalmente agobiante de Affleck en «Manchester by the Sea» ha sido quizás la más aclamada del año. Ya ganó los premios al mejor actor en los Gotham del cine independiente, el de la Junta Nacional de Reseñistas y el del Círculo de Críticos de Nueva York, y es ampliamente visto como un favorito para el Oscar.

Es sin duda un punto álgido en la carrera de Affleck, quien lejos de hacer piruetas se lamenta de cómo películas como «Manchester by the Sea» son tan raras de encontrar.

«De eso se trata. Es terrible lo poco que pasa», dijo Affleck. «Tiendo a enfocarme en lo negativo, lo confieso. Pero sigo pensando: ¿Debo aceptarlo y ya? ¿Realmente es cada 10 años que uno logra trabajar en una gran película? No puede ser».

Este tipo de comentarios no suelen escucharse de actores de Hollywood encaminados al Oscar. Affleck fue postulado a un Oscar por su actuación en «The Assassination of Jesse James by the Coward Robert Ford» de 2007. Es una de sus películas que estima, y el romance lírico de 2013 «Ain’t Them Bodies Saints». Pero hasta ahí.

El actor de 41 años es conocido por ese tipo de ansiedad. Matt Damon, un viejo amigo y coprotagonista de «Goodwill Hunting», recuerda haber tenido conversaciones telefónicas de horas con Affleck, discutiendo qué trabajo tomar. «Literalmente es como hablar con Hamlet», dijo Damon.

Damon consideró en algún momento dirigir o protagonizar «Manchester by the Sea», pero su compromiso para «The Martian» lo obligó a darle el papel a Affleck, quien había actuado en una producción teatral en Londres de «This is Our Youth» de Lonergan. «Nunca le hubiera dado el papel a nadie más», dijo Damon, quien pasó a ser productor de la cinta.

«Ben (Affleck) y yo estuvimos convencidos los últimos 18 años de que el próximo año sería el año de Casey», dijo Damon. «Pero no había nada que él hubiera rechazado que uno pudiera señalar y decir, ‘de verdad debiste haber hecho eso’. Él simplemente tiene estándares muy altos. Es muy puro creativamente hasta que se queda sin dinero, como cualquiera de nosotros, y tiene que hacer lo que sea porque tiene hijos».

La paternidad tiene un papel prominente en «Manchester by the Sea», en la que Affleck, un conserje en Boston, recibe la tutela del hijo adolescente de su difunto hermano (interpretado por Lucas Hedges). El propio Affleck tiene dos hijos que lo visitaron una vez durante la filmación en Massachusetts.

«Eso lo hizo más fácil porque uno extraña a su familia. Uno se despierta deprimido y triste y escucha cómo estuvo su día por teléfono», dijo Affleck. «Obviamente esa ni siquiera es la punta del iceberg en términos de lo que está pasando el personaje, pero es una de las cosas que puedo hacer como actor, deprimirme. Cuando pienso en la película, se siente como un recuerdo de una de esas veces en las que estuve realmente deprimido en mi vida».

En marzo, Affleck y su esposa, Summer Phoenix, anunciaron su separación.

Affleck ha rehuido del tipo de fama de la que su hermano ha disfrutado. No hizo ninguna película en dos años tras el éxito de «Jesse James» y «Gone Baby Gone». En vez, dirigió una parodia de documental que se burlaba de las celebridades, «I’m Still Here», con su amigo y cuñado Joaquin Phoenix. Espectadores que no sabían al respecto, al ver la actuación de Phoenix en el programa de David Letterman y otros, se sintieron embaucados. El estreno del filme estuvo acompañado de disculpas públicas y demandas.

Affleck fue demandado por acoso sexual por una directora de cinematografía del filme, Magdelana Gorka, y una productora, Amanda White. White alegó que el actor tuvo un comportamiento sexual inoportuno con ella. Gorka dijo que Affleck se le metió en la cama sin invitación. Los elogios por «Manchester» han generado una atención renovada en estos casos, aunque Affleck siempre los ha negado. Ambos casos se resolvieron fuera de la corte.

Mientras Affleck tiene un número de papeles por interpretar, se está preparando para dirigir de nuevo, esta vez un relato de supervivencia de padre e hija titulado «Light of My Life». Dice con típica preocupación que eso lo alejará de la actuación por un año. Pero la ansiedad, acota, es inevitable.

«Si tu trabajo es salir a trabajar todos los días y estar realmente deprimido, uno pasa por cosas», dijo. «No es sorprender que no encuentre una felicidad estable en la vida».

Normalmente, ni siquiera puede soportar verse en la pantalla.

«Pero vi esta», dijo de «Manchester», «y me gusto».

Tiendo a enfocarme en lo negativo, lo confieso. Pero sigo pensando: ¿Debo aceptarlo y ya? ¿Realmente es cada 10 años que uno logra trabajar en una gran película? No puede ser.
Casey Affleck, actor de 41 años protagonista de Manchester by the sea.

Artículo anteriorJuez rechaza pedido de Pitt de sellar documentos de custodia
Artículo siguientePerros y bebés inspiran a Helen Mirren como actriz