RAMALA, Cisjordania
Agencia/AP
Una organización cinematográfica palestina creó un nuevo premio de cine en un intento de estimular a la industria local y promover la cultura del cine en los territorios palestinos.
Filmlab, una organización local sin fines de lucro que es apoyada por socios europeos, espera que el «Premio Sunbird» crecerá para convertirse en la versión palestina del premio Oscar. Un jurado conformado por cuatro expertos cinematográficos palestinos y dos europeos seleccionó a los ganadores la noche del jueves.
El jurado otorgó los galardones -que llevan el nombre de un pájaro local- a un largometraje y un cortometraje entre 80 nominados. Varias personalidades locales asistieron al evento, incluido el ministro palestino de Cultura.
Reflejando las preocupaciones palestinas inmediatas, amas cintas ganadoras el jueves trataron el tema del conflicto con Israel.
El cortometraje, titulado «Izriqaq», narra la historia de un hombre que mata a su padre, luego deja el cadáver junto a un punto de inspección israelí. Aldeanos locales, creyendo que el hombre fue asesinado por soldados israelíes, lo veneran como mártir y su hijo sale impune del crimen.
«Hemos estado viviendo en un círculo e violencia. La ocupación israelí creó este círculo de violencia, y una nueva generación nació violenta debido a eso», dijo May Odeh, productora de la película.
Las salas de cine fueron populares en los territorios palestinos de la década de 1960 a la de 1980, pero cerraron después del estallido del primer levantamiento contra la dominación israelí en 1987. Pocas reabrieron al finalizar la insurrección, y la mayoría de éstas quebraron.