Por Sócrates Tejaxún
Los barriletes tienen una tradición oral y aunque hay algunos trabajos escritos es muy difícil concretar su origen. Aún hay una discusión entre quien empezó primero, si Santiago o Sumpango Sacatepéquez. Santiago aduce que tiene 116 años mientras el festival de Sumpango se hace desde hace 37 años. Sin embargo la existencia de estos barriletes es larga y hay anécdotas que datan de 1900.
Antes de los festivales antes mencionados se competía entre compañeros de la escuela o entre familia; entre primos en los años de 1939 ya se hacían barriletes de aproximadamente 1.50 a 2 metros, se competía por pura diversión. Hoy por hoy se conoce según la tradición que con el vuelo de barriletes se buscaba saludar o mantener una comunicación con los difuntos, otro de los significados que se le da es para ahuyentar los espíritus que quisieran hacernos algún daño, ya que estos le temen al sonido que se genera al contactar el viento con el papel de china.
El festival que ahora conocemos surgió y tomó auge a raíz del terremoto de 1976, esto debido a que varias personas vieron cómo a través del barrilete se podía motivar a las personas. Es así como el grupo Konojel Junam (Todos juntos o todos iguales) organiza el festival de ese fatídico año para que las personas puedan concursar y así pudieran salir del mal sabor que dejó el terremoto, dicho grupo estaba integrado por personas de ascendencia maya como también mestizos. El nombre de ese colectivo fue sustituido debido a que en aquel tiempo (el del conflicto armado) hubo otro grupo con nombre similar pero que se aducía que era un grupo subversivo, de tal manera se opta por cambiar al nombre de Tikal, que posteriormente también tuvo cambios. Hay que destacar que en ese entonces el racismo era un tema muy marcado y por eso el nombre de dicho grupo con el objetivo de unificar.
Los barriletes se han caracterizado por llevar plasmada la cultura milenaria de los mayas y los problemas que aquejan a los guatemaltecos en la vida diaria. Es parte de los reglamentos que se tienen para participar en dicho festival. Los temas son libres y a juicio de cada grupo barriletero la elaboración de ellos se empieza aproximadamente entre Mayo y Junio para estar listos para el 1 de noviembre de cada año.
Las categorías para participar en el festival de Sumpango son tres. La categoría A permite barriletes de 10 metros 16 metros como máximo (se limitó a 16 por seguridad de la población y así evitar accidentes graves si hubiese el desplome de algún barrilete, participan en esta categoría 13 grupos. En la categoría B hay 47 grupos que participan y podemos encontrar barriletes de 4 a 6 metros. La tercera categoría es la infantil con barriletes de 1 a 3 metros, para participar aquí se debe inscribir el 1 de noviembre a primera hora (8 a.m.), este año participaron 21 niños en la categoría infantil. Hay condiciones muy generales para la elaboración de los barriletes y una de las principales es que sean totalmente de papel de china, otra es que los temas tengan relación con Guatemala. Son dos premisas que todos deben de cumplir.
Las actividades de los grupos de barrileteros se intensifican el 31 de octubre, una noche que se conoce como Lunada del barrilete en donde desde las 18:00 hasta las seis de la mañana del 1 de noviembre en donde se concluyen los detalles de cada barrilete. La Lunada se organiza desde 1989 y durante ella se llevan los lazos, palos, bambús y demás instrumentos para evitar complicaciones por la concurrencia de personas el día siguiente..
En la actualidad el festival que en un principio se le llamo Concurso y después Feria, es para alegría de propios y extranjeros una alegría que permite apreciar arte en papel de china. No debe dejar de mencionarse que la participación de los grupos barrileteros es de manera voluntaria y más allá de concursar o ganar un primer lugar, la gente busca la satisfacción de presentar un trabajo con un mensaje.
Ha existido una discusión muy grande en cuanto a quienes deben integrar el jurado que calificará a los barriletes. No hay consenso sobre qué criterios debieran ser tomados en cuenta para las personas que integren dicho jurado. Han existido experiencias de todo tipo con tal de encontrar la imparcialidad pero es casi imposible. Cuando se trata de nombrar a los ex barrileteros como jurados, es difícil no porque no puedan dar su punto de vista sino porque Sumpango es un municipio pequeño y de los 80 grupos aproximadamente que participan siempre se encontrará a amigos o familiares en cualquier grupo y de alguna forma se vería una parcialidad. Este año, 7 personas fueron quienes integraron el jurado, algunos con conocimiento más amplio y otros con menos. Los grupos de barrileteros difícilmente estarán de acuerdo con los criterios de algunos miembros del jurado porque algunos desconocen mucho de la cultura en general y alguien que desconoce de historia y de cultura como tal pueden esperarse criterios ambiguos o de desconocimiento de identidad, de diseño, colorido etc.
Aún falta mucho por avanzar. Las nuevas generaciones somos responsables de dar nuestros aportes para que dicha actividad vaya cambiando en pro de quienes hacen de su vida el arte de plasmar sus ideas, su identidad y la historia en los barriletes.
Las administraciones municipales de turno deben buscar cómo hacer que el arte sumpaguero plasmado en barriletes sea dado a conocer en diferentes partes del país así como a nivel internacional porque a través del barrilete se plasma historia, como también deben de contribuir a que los alrededores de los campos de futbol estén en las mejores condiciones para exponer los barriletes. De igual manera velar por la ampliación del espacio para una mejor atención y una mejor muestra del arte en papel de china. También deben velar por el buen estado de las calles y avenidas de nuestro municipio para que estén en su mejor condición y sean del agrado de quienes nos visitan y puedan llevarse una buena impresión.