Por redacción Cultura

Aún no nos creemos capaces de escribir la historia. Pero estamos seguros que conocerla nos da el poder de decisión y apreciación del presente para concebir un mejor futuro.
Proyecto 44

Proyecto 44 surge en el 2010 con una intención didáctica. En ese entonces el gobierno de Álvaro Colom había traído a Guatemala la obra del pintor Diego Rivera titulada “La Gloriosa Victoria”; esta obra adornaría el salón principal del Palacio Nacional en aquel octubre.

Esto marcó un precedente, la obra contaba la historia explícita de la contrarrevolución en Guatemala, en esta se mostraba personajes emblemáticos del 54 como los hermanos Dulls, Castillo Armas, el presidente Eisenhower representado con una bomba, entre otros.

Un grupo de estudiantes de historia y catedráticos de nivel medio se percatan que los libros de ciencias sociales de sus estudiantes carecen de esta información. Y si bien algunos la tienen, es mínima y no indagan en la intervención estadounidense. Lo que los hace pensar en una de las frases que se le atribuyen a Winston Churchill, “La historia la escriben los ganadores”.

Esta particular experiencia junto al libro “La CIA en Guatemala Operación PBSuccess” de Nicholas Cullather un exagente de la CIA que indaga los recientes archivos desclasificados de la CIA con respecto a la contra revolución, provoca que este grupo de estudiantes de historia y arte entre ellos también algunos fotógrafos se involucren en rescatar esta historia.

Así se realiza la primera edición de Proyecto 44, donde se presentaban 7 personas con su reflexión de La Revolución, entre ellas una instalación, 3 acuarelas, 6 fotografías, 2 textos y 2 discursos intervenidos por los dj´s Sias y Ronald Díaz, en donde figuraban Bauer Paiz y a Jacobo Á rbenz. Desde ese pequeño evento un 20 de octubre en las instalaciones del Gran Hotel zona 1 se han suscitado muchas cosas.

Muchos de los estudiantes se convirtieron en profesionales en sus ramas, algunos otros vieron el proyecto como una etapa, muy pocos han permanecido y se han sumado muchos más por el simple interés de enamorarse de la idea. Se han elaborado 3 exposiciones más, se ha escrito una canción de rap y una canción acústica que narran la Revolución del 44, además de eso se han presentado más de 40 piezas que emulan la revolución y contrarrevolución. Se han desarrollado eventos como bici tours, cine foros, conferencias. Todos dentro del margen del estudio de la historia, dentro de esta misma base se han establecido diálogos cercanos con la Familia Árbenz, escuelas de historia y el archivo de la policía. También se han adquirido documentos históricos entre los más importantes destacan “Meditaciones de un Católico ante la Reforma Agraria” y “Las Memorias del Cuque Rivera” que se colocan a la vista en las exposiciones cada 20 de octubre.

En el 2015 la coyuntura actual del país hizo que Proyecto 44 reestructurara su proceder, la madurez de los caracteres o la formación de la retórica entorno a la investigación histórica hizo comprender que este Proyecto no era únicamente artístico. Más bien se ha ido convirtiendo en un movimiento de creación de pensamiento. Considerar la Revolución del 44 como una acción histórica que modificaría semblantes sociales, políticos, económicos y culturales en el país, era asumir el poder civil sobre un gobierno autoritario y militar, además reconocer la contrarrevolución significaría el reconocimiento de la intervención extranjera y enfrentar esta realidad. Así fue como proyecto inicia en el marco de las manifestaciones a elaborar intervenciones, las cuales buscan abrir un dialogo con el pasado, para intentar reestructurar el presente.

Un pueblo que conoce su historia toma mejores decisiones. Es por eso que el 12 junio se extrajeron unos bananos de un camión de Chiquita Banana para después colocarlos en las puertas del Palacio Nacional como un recordatorio de la memoria del pueblo. Así también el 6 de septiembre en el marco de los sufragios se colocaron mil espejos en distintos centros de votación, como un recordatorio de la historia y sus representantes.

Dentro de estas últimas manifestaciones se presenta también una intervención en el Parque Morazán con niños que se dedicaron a dibujar la historia de su país en toda la banqueta idea original del artista Chinozqui. También se hizo el Scrabble 44 que se colocó frente a la Catedral Metropolitana sin tener la más mínima conciencia que justo ese día desfilarían en una procesión católica cientos de militares portando el uniforme mientras iban observando las frases escritas en los bananos intervenidos. Esta acción corresponde a una iniciativa de Allan F. Raimundo.

Con estas acciones los integrantes del proyecto comprendieron que era necesario hablar de revolución. Sus investigaciones los han llevado a la conciencia de resignificar el lenguaje de la Revolución del 44, o por lo menos llevarlo a la mesa como un símbolo de conciencia de pensamiento. Pensar en el significado y su resignificación se considera como un ejercicio dialéctico que busca la retórica del pensamiento en la acción social.

Conversatorio

Hablemos de revolución

El lunes 19 de octubre a las 19:00 horas se llevará a cabo en Casa Cervantes (5ta calle 5-18, zona 1 ciudad de Guatemala) una mesa de diálogo en donde participarán como invitados personajes como Mario Roberto Morales, Ana Cofiño, Andrea Ixchíu y Miriam de Bauer. El tema central del conversatorio busca establecer un diálogo alrededor de las palabras utilizadas durante la Revolución del 44 y su resignificación. No se presenta ninguna idea preestablecida más bien, la propuesta es pensar a través de la historia de la Revolución. En esta actividad también se presentaran las diferentes acciones en piezas concebidas de las cuales cualquier espectador que llegue al evento puede llevarse una sin costo alguno. La entrada al evento es gratuita.

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