Alfonso Mata
HS: Qué debemos entender en inequidad
AM: Cuál es su origen: Las inequidades en salud por raza, etnia, estatus socioeconómico, geografía y otras características importantes sumadas a las políticas y ambientales han persistido en Guatemala a pesar de la creciente evidencia sobre sus contribuciones a la mala salud.
En segundo lugar, aceptar y concientizar que las investigaciones muestran que las exposiciones a factores que dan forma a las trayectorias de la salud, pueden comenzar temprano y son multigeneracionales; por lo tanto, los períodos de preconcepción, prenatal y primera infancia son fundamentales para establecer las probabilidades de una salud de por vida.
Finalmente es importante destacar que se conoce con fidelidad y certeza el impacto, de acciones en la política y la práctica institucional y social para promover la equidad en salud y reducir las disparidades en salud.
Entendamos que la equidad en salud es el estado en el que todos tienen la oportunidad de alcanzar el potencial de salud completo y nadie está en desventaja para lograr este potencial debido a su posición social o cualquier otra circunstancia socialmente definida.
HS: qué trastornos en la niñez ocasiona la inequidad
AM: Desde hace décadas sabemos por investigaciones neurobiológicas y socioconductuales nacionales e internacionales que las experiencias de la vida temprana dan forma al desarrollo prenatal y de la primera infancia, y estas experiencias tienen un impacto poderoso en el desarrollo del cerebro y los sistemas y todos los órganos, que afectan los resultados de salud a lo largo de la vida.
Cuando diferentes grupos varían en su exposición a experiencias clave (tanto positivas como negativas socio ambientales y de salud enfermedad), sus probabilidades de una salud positiva divergen sistemáticamente con el tiempo, lo que produce disparidades en los resultados de salud a lo largo de la vida y entre generaciones. Estas exposiciones se acumulan durante el curso de la vida para ejercer un efecto acumulativo sobre la salud. Las exposiciones, experiencias, resiliencia y elecciones individuales ayudan a establecerlas y ajustarlas con el tiempo.
Los distintos contextos de las personas también dan forma a sus elecciones y oportunidades y, por lo tanto, tienen diferentes probabilidades de experimentar resultados de salud positivos o negativos a lo largo del tiempo. Porque las probabilidades de estas exposiciones se ven afectadas por políticas y sistemas.
HS: Las políticas para la equidad son claras
AM: Creo que sí, lo que falla es que no se promueve la equidad en salud y eso requiere más que intervenciones a nivel individual todo un cambio social de conciencia al respecto y político en su acción. Requiere cambios a nivel de sistemas, incluidos cambios en las leyes y políticas y la inversión de recursos, para mejorar las probabilidades de experiencias positivas y reducir las probabilidades de exposiciones adversas para todas las poblaciones, especialmente aquellas que experimentan la mayor adversidad. Por ejemplo, la salud de hombres y mujeres antes de tener hijos es importante, no solo para los resultados del embarazo, sino también para la salud de sus hijos durante toda la vida.
El estado de salud y los resultados de una persona reflejan la acumulación de experiencias a lo largo de la vida y no es resultado de lo que le está pasando en un momento. Este enfoque debe tomar en cuenta el contexto social, económico y cultural más amplio de un ya que la trayectoria de la vida puede cambiar negativa o positivamente, a través de interacciones entre el cerebro, el cuerpo y el medio ambiente. Los factores de protección (como las relaciones estables y de alta calidad con los cuidadores y la seguridad económica) apoyan trayectorias positivas o florecientes; Los factores de riesgo (como la exposición al abuso, la negligencia o el racismo) exacerban la probabilidad de trayectorias deficientes.
HS: Pero la gente cree que estamos mejor
AM: Claro que sí. Las abuelas incluso la generación entre 40-60 años, es posible que perciban que los niños son más saludables ahora que en el pasado porque es mucho menos probable que se enfrenten a las principales infecciones y enfermedades debilitantes de generaciones pasadas y, por lo general, pueden recuperarse por completo de enfermedades infantiles «agudas».
Sin embargo, las dolencias del pasado han sido suplantadas por condiciones físicas crónicas (p. Ej., Diabetes, asma, obesidad) y socioemocionales (p. Ej., Depresión, ansiedad), con grandes subgrupos de niños y de adultos jóvenes que enfrentan barreras para lograr una salud física y mental positiva y bienestar como resultado de la pobreza: inseguridad alimentaria, viviendas inseguras o inestables, segregación de vecindarios, violencia social e intrafamiliar y otras adversidades sustanciales (como experiencias adversas en la niñez) en los primeros años de vida. Esas futuras abuelas y abuelos ya sufren de un desgaste físico-emocional grande.
No vamos a repetir lo que es sabido pero los niños que nacen y crecen en la pobreza, tienen un riesgo particularmente alto de resultados no solo de salud deficientes, sino de oportunidades futuras en lo social conductual etc.. Las experiencias adversas tempranas, pueden tener efectos intermedios en la preparación para la escuela, el peso y el bienestar físico y / o mental y contribuir a la enfermedad crónica y al mal funcionamiento en la edad adulta.
De hecho, estos impactos son acumulativos y los adultos que experimentan adversidades en la niñez tienen tasas sustancialmente más altas de enfermedades cardíacas, pulmonares, síndrome metabólico y otras costosas condiciones de salud.
HS: Qué pasa con las intervenciones
AM: Hay varios problemas con ellas. Entiendo que debería formularse un modelo claro y preciso sobre el cual planificar y desarrollar intervenciones y ese modelo debe tener un centro como es el individuo pero sin olvidar las periferias Es importante señalar que los factores de riesgo y de protección, se pueden transferir de una generación a otra, lo que convierte a los padres, la familia y otros cuidadores primarios y la comunidad en un foco central de las intervenciones para mejorar la salud infantil. Dentro del contexto del curso de vida, nos movemos dentro de círculos, entorno sociocultural que da forma al desarrollo a nivel individual y las oportunidades de intervenciones para mejorar la salud individual y los resultados del desarrollo, así como la salud, el bienestar y la equidad en la salud de la población.
HS: Qué explicación tienen esos niveles de equidad
AM: podemos decir que la cultura y los mecanismos sociales y biológicos individuales operan e interactúan dentro y a través de tres niveles. El más externo, en el encontramos las inequidades estructurales, los «impulsores socioeconómicos y políticos». Las desigualdades estructurales están profundamente arraigadas en las políticas, leyes, gobernanza y cultura; organizan la distribución del poder y los recursos de manera diferente según las características individuales y grupales (es decir, raza, etnia, sexo, identidad de género, clase, orientación sexual, expresión de género y otras). El siguiente nivel, afectado por el ya mencionado pero no independiente del que le sigue, lo representan los estados sociales, económicos, culturales y ambientales (es decir, los determinantes sociales de la salud). En este nivel podemos ver agrupados tres elementos: condiciones de vida saludables, atención médica y educación y participación en salud y son importantes para focalizar las intervenciones
El siguiente nivel representa los factores que dan forma más directa y próximamente a las experiencias diarias y los patrones de rutina de las personas: la cohesión familiar y las conexiones sociales, que también afectan el acceso a recursos críticos para la salud, el bienestar y el desarrollo en la vida temprana y futuro. El círculo más interno y las flechas transversales —desarrollo biológico, psicológico y socio-conductual— son el foco de intervenciones personales.
Condiciones de vida y salud: Sistema de salud, educación de cuidados de la salud
Cuidados familiares: conexiones sociales, cohesión social, soporte desarrollo y salud
Desarrollo individual: biológico, psicologico, Sociológico- conductual