Los niños más pequeños pueden necesitar la ayuda de un adulto para reconocer las diferentes cosas que pueden contribuir al dolor de cabeza y lo que puede aliviar.
Con dolores de cabeza recurrentes, es bueno que el niño aprenda a reconocer situaciones que pueden contribuir a los dolores de cabeza. Luego, eventualmente puede aprender a prevenirlo.
Los adolescentes a menudo pueden aprender por sí mismos lo que puede contribuir al dolor de cabeza.
Vivir saludable puede prevenir dolores de cabeza
Una vida regular con comidas regulares, muchas actividades y aire fresco pueden ayudar a prevenir los dolores de cabeza. También es importante dormir lo suficiente, ya que la falta de sueño y la fatiga pueden desencadenar dolores de cabeza por tensión y migrañas.
Anote cuándo vienen los problemas en un diario de dolor de cabeza
Es bueno tomar notas en un llamado diario de dolor de cabeza. Puede proporcionar información importante sobre cuándo y con qué frecuencia ocurre el dolor de cabeza y cómo se siente. Tal diario de dolor de cabeza hace que sea más fácil ver las causas probables del dolor de cabeza. Los niños más pequeños necesitan la ayuda y el apoyo de un adulto, mientras que los adolescentes a menudo pueden llevar un diario de dolor de cabeza por su cuenta.
En el diario es importante que anote: frecuencia de los dolores que los rodea, qué medicamento tomó el niño para el dolor de cabeza, la dosis y el número de tabletas y en qué medida el dolor afectó al niño en la vida diaria. Debe contener información sobre síntomas como náuseas y vómitos, su frecuencia; el grado de dolor de cabeza se registra en una escala, para cada día de la semana durante un cierto período de tiempo. Después de un tiempo, es de esperar que el niño o los familiares del niño hayan adquirido una buena idea de lo que se asocia con el dolor. Entonces el niño puede ayudar a prevenir el dolor reconociendo y evitando situaciones que contribuyen o desencadenan dolores de cabeza.
¿Cuándo y dónde debo buscar atención?
Debería hacerlo si los dolores se producen con frecuencia durante la semana. Pero debe hacerlo si el niño presenta alguno de los siguientes síntomas:
- Dolor de cabeza en combinación con secreción nasal prolongada, tos, dolor en la frente o las mejillas.
- Dolor de cabeza similar a la migraña o dolor de cabeza recurrente prolongado y frecuente que no desaparece en unas pocas semanas. Esto es especialmente cierto si el dolor de cabeza ha cambiado.
Y si el o adolescente presenta alguno de los siguientes síntomas llévelo al médico:
- Fuerte dolor de cabeza, fiebre y fatiga, quiere quedarse quieto y parece tener el cuello rígido.
- Dolor de cabeza intenso y repentino y cansancio, y que no le deja hacer lo acostumbrado.
- Aumento de dolor de cabeza que duró por un tiempo. El niño o adolescente se despierta o tiene dolor de cabeza con vómitos por la mañana.
- Dolor de cabeza que no desaparece después de golpear la cabeza.
- Dolor de cabeza y al mismo tiempo fiebre con hinchazón y enrojecimiento en el rabillo del ojo.
Póngase en contacto con un dentista, si sospecha que el dolor de cabeza puede deberse a que el niño aprieta los dientes.
Investigaciones que se hacen
- ¿Cuándo tuvo dolor de cabeza el niño en las últimas semanas? hora del día y el día de la semana.
- ¿Tiene el niño diferentes tipos de dolores de cabeza, como migrañas y dolores de cabeza tensionales?
- ¿El dolor vino de repente, como una convulsión o vino lentamente?
- ¿Cuánto tiempo dura el dolor y qué tan intenso se sinte?
- ¿En qué parte de la cabeza siente el dolor?
- ¿Ha cambiado el dolor de cabeza?
- ¿El niño usa medicamentos para los dolores de cabeza? ¿Ayuda? ¿Con qué frecuencia suele usar el niño el medicamento?
- ¿Hay otras cosas que alivian o agravan el dolor, como ciertas actividades, situaciones o ciertos alimentos, bebidas, fatiga, estrés o ansiedad?
Es posible que su diario le ayude a contestar las preguntas del médico que suelen ser las siguientes:
Después de la conversación, el médico hace un examen del cuerpo. El niño también puede obtener una remisión para que lo evalúe otro especialista.
Tratamiento con drogas
Una vez dos veces por su cuenta esta bien, pero lo mejor es que consulte con el médico cual medicamento usar. Los analgésicos de venta libre pueden aliviar los dolores de cabeza por infecciones, dolores de cabeza por tensión y migrañas. Medicamentos que contienen ácido acetilsalicílico aspirinas, no debe administrarse a niños menores de siete años y nunca a niños que tengan fiebre. Es importante seguir las instrucciones de cantidad y dosificación que le señale el médico.
Los medicamentos pueden empeorar los dolores de cabeza si se usan con demasiada frecuencia
La mayoría de medicamentos solo brindan ayuda temporal. Por lo tanto, solo deben usarse durante un tiempo limitado y un máximo que le señale el médico. También existe el riesgo de que los medicamentos provoquen más dolores de cabeza, si el niño los toma con demasiada frecuencia o en exceso. Es importante anotar qué tipo de medicamento está tomando el niño y cuánto o qué dosis. Los adolescentes a menudo pueden escribir esto por sí mismos, pero los niños más pequeños necesitan la ayuda de un adulto.
Es importante tomar el medicamento temprano.
Sí, incluso cuando el dolor de cabeza está en camino. Esto se aplica tanto a las migrañas como a los dolores de cabeza por tensión. Es común esperar demasiado, hasta que el dolor de cabeza se vuelve demasiado intenso. Entonces el efecto de la droga disminuye.
Los medicamentos preventivos están disponibles para las migrañas que vienen con frecuencia.
Algunos niños que han tenido migrañas durante mucho tiempo pueden recibir medicamentos recetados preventivos. Esto es especialmente cierto para los niños que tienen casos de migraña frecuentes, al menos una vez a la semana.
Tratamiento con fisioterapia
A veces, ni los medicamentos temporales ni los preventivos brindan suficiente ayuda. Entonces el niño puede necesitar probar otro tratamiento. Puede ser, por ejemplo, tratamiento con fisioterapia que puede ser especialmente bueno para los niños que suelen tener dolor de cabeza prolongado que aparece con frecuencia, es decir, varias veces a la semana. El tratamiento con fisioterapia puede ser bueno si el dolor de cabeza es causado por la tensión de los músculos de la cabeza y el cuello, por ejemplo, debido a la forma en que el niño o adolescente se sienta o sostiene la cabeza. El tratamiento apunta entonces a una mejor conciencia corporal, a menudo combinada con ejercicio físico.
Tratamiento con métodos psicológicos.
Pero…un examen médico antes del tratamiento. Para descartar que una enfermedad física esté causando el dolor de cabeza. Los métodos psicológicos brindan una buena ayuda. Hay varios métodos psicológicos que pueden ayudar con los dolores de cabeza.
El entrenamiento de relajación a menudo proporciona una buena ayuda para aliviar el dolor de las migrañas y los dolores de cabeza por tensión. El propósito del entrenamiento de relajación es enseñar a los niños y adolescentes a reducir la experiencia del estrés y los dolores de cabeza. Esto se hace practicando y usando un método que proporciona una relajación rápida cuando el dolor de cabeza comienza a sentirse. Esto puede reducir la intensidad del dolor y la frecuencia con que ocurre el dolor de cabeza. También se ha demostrado que la mejoría persiste tras finalizar el tratamiento.
La terapia conductual cognitiva, CBT , para los dolores de cabeza puede ayudar a los niños y adolescentes a reducir los patrones de pensamiento negativos para los dolores de cabeza. Esto puede aplicarse, por ejemplo, a los llamados pensamientos como «ahora vuelve el dolor de cabeza y no puedo hacer nada al respecto». Otro propósito de la TCC es ayudar al niño a que pueda mantener sus actividades normales en la vida cotidiana tanto como sea posible.
Los niños deben tener la oportunidad de participar.
No hay límite de edad para cuando un niño puede tener influencia sobre su cuidado. La capacidad del niño para participar está relacionada con la madurez del niño pero también con la responsabilidad para aprender de su cuerpo. Cuanto mayor es el niño, más importante es para él participar en su cuidado. Para participar activamente en el cuidado y tomar decisiones, es importante que usted, como adulto y el niño, entiendan la información que reciben del personal de cuidado.
