La seguridad social no es un proceso sumatorio y ya. No depende ni nace de lo que hace o deja de hacer una institución, pues trasciende la operación de su accionar. FOTO LA HORA ARCHIVO

Alfonso Mata

HS: Un concepto de seguridad social
AM: Mejor lo que no debe ser. La seguridad social no es un proceso sumatorio y ya. No depende ni nace de lo que hace o deja de hacer una institución, pues trasciende la operación de su accionar. Es resultado de: la reproducción social de la enfermedad, del comportamiento demográfico, de la organización de zonas urbanas y rurales, de la organización y funcionamiento de la producción y las fuerzas laborales, de la gobernabilidad que se tiene social y ambiental. En resumen de un modo y estilo de vida, que le da vida y forma generando y distribuyendo fuerzas y reproducibilidad de poderes que se dan en diferentes nichos ambientales y socioeconómicos; de capitales que se forman (entendiendo por capitales lo económico, la educación, la salud etcétera) y eso implica no sólo desarrollo de potencial biopsicosocial dentro de la población, sino de recursos protectores o facilitadores para ello. Es la interacción de todo ello lo que define a la larga el contenido y el comportamiento de la seguridad social.

Para el caso de lo que hablaremos, que es la salud; la salud y la enfermedad, la prevalencia de estas, depende de los grados de vulnerabilidad y riesgos (seguridad) que se maneja dentro de los grupos humanos y una primera panorámica estadística nacional de esos aspectos, nos muestra claramente la existencia de niveles de exclusión e inequidad en el comportamiento de ella.

Un buen trabajo político social sobre seguridad social, requiere de conocimiento y análisis de lo dicho en los párrafos de arriba y solo a partir de ese análisis, es que podemos establecer la visión de seguridad social y su proceso administrativo: su táctica y estratégica. Primer error: no tenemos un análisis completo de la seguridad social nacional y todo el hacer al respecto, se haya fragmentado dentro de todas las instancias institucionales del estado sin una visión nacional aceptada y concientizada y lo más triste aún, en manos de neófitos o políticos.

HS: Una evaluación general de faltantes en seguridad social
 Carencia de una idea clara de la instalación de una visión nacional sobre la seguridad social
 No se cuenta con un plan nacional de definición de sus facetas de realización y valoración de posible resultado e inversiones necesarias.
 No se tiene una tipificación del mercado y sus demandas
Y eso debido a varios aspectos:
 Información deficiente, análisis parciales e inexistentes. Por consiguiente, hablando del componente salud, el IGSS lo trabaja bajo condiciones mal previstas y su alcance lo hace en base a potencial de la institución y no demanda real y proyectada lo que limita su actuar y resultados a nivel nacional.
 Su enfoque centrado en el proceso biomédico farmacéutico.
 Los equipos humanos no son los que se necesitan y por consiguiente se dan fallos en el combate a la enfermedad y en el aspecto humano, hay individuos que no están a la altura del mando u obedecen a intencionalidades ajenas.
 Hay uso de la ciencia para asegurar ejecuciones pero funciona dentro de planes y operaciones enteramente malos; luego su nivel de eficacia y eficiencia se reduce y eso es debido en buena parte a que no se ve el conjunto de la entidad como mayor que la suma de las partes.
 No existe política adecuada de medición de capacidad: ni de los esfuerzos y resultados de la institución ni de un estado cambiante de la seguridad social, que permita orientar a la vez que evaluar los resultados que la institución está proporcionando dentro de las necesidades nacionales.
HS: ¿Se puede hablar de un error de estrategia nacional?
AM: ¡Sí! y también del IGSS. La suposición de que los problemas radican donde sus síntomas se advierten.

El problema de la seguridad social en el campo de la salud no son los enfermos, son la producción- desarrollo de enfermedades, pues si me voy sobre el daño, es cuestión de nunca acabar (bendición para el profesional dedicado a la biomedicina farmacológica, maldición para el sistema y la población). Un sistema de salud que trabaja (lo prueba el nuestro en donde coloca los gastos y los recursos humanos e infraestructura) provocado por una visión prácticamente limitada, reduce el mundo del problema a actuar sobre sus resultados y no en solucionarlo o terminar con el. Luego no se establecen mejoras en la seguridad.

HS: Un panorama general del IGSS
AM: para hablar de esto hay algo que debemos aclarar: la solución del problema de la seguridad social, se encuentra fuera de los límites del IGSS, el área del problema se extiende más allá de sus límites; pero eso no lo exime de un análisis institucional.

Ineficiencia, conveniencia guiada a intereses ajenos; debilidad organizativa y práctica en lo que se dedica. Todo ello, producto de una acción política que medra y burocratiza sobre la institución y vuelve los servicios de presentación del IGSS insuficientes, ineficientes y a veces peligrosos.

Cuánto mucho o poco de lo anterior se da, es difícil de cuantificar, aunque no de calificar, ya que no existe forma de hacer diagnóstico completo ni exacto sobre la salud colectiva nacional (ni siquiera de lo que ocurre con la COVID-19) , de su evolución, riesgo y necesidad en su atención. Ni tan siquiera de necesidades satisfechas e insatisfechas de los derechohabientes de la institución ya que la institución se organiza y funciona por demanda y sus datos son sobre ello no se recopilan ni se plantean tales estudios o si se hace es con otros fines y no se difunden a la opinión pública como debiera de ser.

De tal manera que en su planificación administrativa, no parte de preguntas básicas como: ¿Por qué surgen los problemas de salud? ¿Cuáles son? y ¿cómo se distribuyen en la sociedad? Cuál es la calidad de vida del anciano? ¿Cuál debería tener? Visiones parciales y limitadas, fundamentan su apertura programática, igual a cómo sucede en el MSPAS.

HS: ¿Negligencia o visión con otros fines?
AM: creo que ambas se conjugan y potencializan para una toma de decisión y control de la institución, con lo que abarca como fin primario «la seguridad y la salud como un negocio» y deje en segundo plano «la salud como un derecho» y eso en todos los campos de su hacer: adquisición de recursos, distribución de servicios, contratación, prestación de servicios, terminando en formular una organización burocrática en todos sus aspectos y toda una maquinaria administrativa y entrega de servicios sin base en una determinación social. Véase por donde se vea: desde un panorámica general o por servicios, el IGSS carece de una sistematización para planificar y operar pues le falta una sistematización de: estudiar, demostrar y generar productos que se fundamenten en una relación entre lo social y los modos de vida de los grupos humanos que atiende y sus relaciones.

HS: Habla de un error en el establecimiento administrativo
AM: ¡Definitivamente! orientado a una respuesta política como prioridad y en un plano de menor importancia búsqueda y atención a la salud y esa deficiencia nace del sistema nacional de salud, que se derrama sobre sus instituciones constitutivas como el IGSS. De tal manera que el sistema nacional de salud, interpreta atender la demanda de enfermos como objetivo, cuando eso es lo subjetivo del problema, pues el objetivo de la salud es atender las causas, identificar vulnerabilidad y detectar poblaciones de riesgo. Pero lo que tenemos es una pobreza de interacción social-ambiental gobernada y conducida por una red política-social ciega a ello que provoca una falsa imagen e incompleta sobre la salud y el bienestar de la población y que al llegar a las instituciones conforma en sus miembros una desintegración del conocimiento de la vida real de los ciudadanos y de sus necesidades y por consiguiente, se produce también una falta de integralidad entre conocimiento del problema y acción institucional parcial a su solución: todo un género de argumentaciones programáticas fundamentadas en supuestos considerados evidentes pero insuficientes sin demostración cualitativa y cuantitativa sólida de los resultados que se van a obtener.

Alfonso Mata
Médico y cirujano, con estudios de maestría en salud publica en Harvard University y de Nutrición y metabolismo en Instituto Nacional de la Nutrición “Salvador Zubirán” México. Docente en universidad: Mesoamericana, Rafael Landívar y profesor invitado en México y Costa Rica. Asesoría en Salud y Nutrición en: Guatemala, México, El Salvador, Nicaragua, Honduras, Costa Rica. Investigador asociado en INCAP, Instituto Nacional de la Nutrición Salvador Zubiran y CONRED. Autor de varios artículos y publicaciones relacionadas con el tema de salud y nutrición.
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