Esta semana el parque acuático Xocomil abrió sus puertas al público, después de permanecer cerrado desde el 13 de marzo del año pasado, informó Jorge Mario Chajón, asesor de gerencia general del Irtra.
El Ministerio de Salud Pública autorizó que el aforo máximo será de mil visitantes. Esta asistencia se podrá controlar por medio del ingreso de molinetes con que ya cuenta este parque recreativo. Sin embargo, Chajón aclaró que el parque tiene capacidad de concurrencia de hasta 8,500 personas.
Parte de las recomendaciones es que dentro de las piscinas las personas no pueden usar mascarilla, aunque estos espacios están libres de contagio, según el Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
“Los métodos de tratamiento de agua que utilizan filtración y desinfección, como la mayoría de los sistemas de agua potable, eliminan o inactivan el virus que causa COVID-19. En el caso de las piscinas, su mantenimiento adecuado y desinfección con cloro o bromo debería ser suficiente para inactivar el virus”, explican.
INSTALACIONES SEGURAS
Desde su inauguración, en noviembre de 1997, el parque no había dejado de operar, por lo que durante este periodo se aprovechó para dar un mantenimiento profundo a las piscinas.
Parte de los cuidados preventivos contra el Covid-19 es sugerir que las familias se mantengan unidas entre sí, pero distanciadas unas de otras. El área de restaurantes también estará operando con menos capacidad. Se cuenta con clínica médica y parqueo para 1,300 vehículos.
“Creemos que será un éxito esta apertura, hay un vínculo muy fuerte entre agua y diversión. Esta es una oportunidad de recreación sana en un ambiente externo, controlado y seguro”, expresó Chajón.
Según datos de la institución, en el 2019 el parque Xocomil recibió casi 900 mil personas durante el año, por lo que lo convierte en el más visitado de Retalhuleu.
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