Factor Méndez Doninelli.
Para no olvidar. Este año se cumple el 59 aniversario de ese crimen. El rescate de la memoria histórica es importante para enterarse de los hechos del pasado que hacen historia, para que los jóvenes de ahora sepan lo ocurrido y conozcan a los responsables. Aquí el relato de la masacre de estudiantes universitarios de la Facultad de Derecho de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC), ametrallados indiscriminadamente en la mañana del 12 de abril de 1962 por una patrulla militar al mando del teniente Erick Mendizábal. El crimen ocurrió frente a la citada Facultad durante las jornadas de marzo y abril 1962, que fueron de lucha heroica y resistencia popular contra la dictadura de entonces, encabezada por el general Miguel Ydígoras Fuentes. Horas después de esta masacre, una unidad de la antigua y temida policía judicial disparó contra un grupo de estudiantes de educación media de la Escuela de Comercio, con saldo de otro estudiante fallecido y varios heridos. Los jóvenes mártires de Derecho fueron: JORGE GÁLVEZ GALINDO, CÉSAR ARMANDO FUNES y NOEL ARTURO LÓPEZ TOLEDO. El estudiante herido fue PEDRO RECINOS. Los jóvenes estudiantes de comercio fueron: El mártir FELIPE GUTIERREZ LACÁN y heridos BALTASAR ARÉVALO, HÉCTOR RAMIRO URRUTIA Y ROLANDO CHÁVEZ. Estos hechos son historia escrita y publicada por medios de comunicación de la época, cualquier persona puede consultar las fuentes disponibles en la Hemeroteca Nacional.
¿Qué fueron las jornadas de marzo y abril 1962? Según Manuel Colom Argueta, ex Alcalde de Guatemala y dirigente revolucionario ejecutado por el ejército el 22 de marzo 1979, expone: “¿Qué es marzo y abril en el proceso histórico que vivimos? Considero que deberíamos pensar que fueron gestas populares, hechos populares, en las que el nivel de organización logró una resistencia contra un sistema antidemocrático y represivo. Pero marzo y abril no es un hecho aislado, forma parte de un proceso histórico social que no ha terminado aún, frente a un sistema de dominación de una minoría económica oligárquica, subordinada al capital extranjero (que es el que se ha apropiado de Guatemala) que aprendió a usar técnicamente formas fascistoides de represión para coartar el desarrollo de la organización popular por la liberación de los pueblos.” Y continúa afirmando: “Ese hecho histórico de rebelión popular genera en las fuerzas de derecha la preparación para usar lo que en el fascismo se llama la “punición preventiva”; la represión como forma de impedir el desarrollo de la organización popular, y cada cierto período de tiempo, por una razón externa o interna, se intensifica para desarticular la organización popular, por temor a que esa fuerza organizada revierta el sistema.”
Otro protagonista y combatiente revolucionario Elías Barahona, sostiene: “La estrategia militar y política impulsada por los estudiantes de secundaria de los institutos públicos durante esas jornadas básicamente consistió en luchar contra el ejército y la policía manifestando en las calles, levantando barricadas y poniendo trincheras en cada uno de los barrios de la capital, a la par, aislando a la capital del resto del país cortando las comunicaciones telefónicas, telegráficas y terrestres mediante la voladura de puentes al mismo tiempo que se saboteaba el sistema de transporte urbano de pasajeros, y toda actividad comercial y pública con fines de llegar a la huelga general que paralizara al país y diera al traste con el gobierno del payaso Ydígoras Fuentes.”
(Fuente: Libro “50 años jornadas patrióticas de marzo y abril 1962”.)
