Walter Juárez Estrada
El Ministerio Publico es una institución auxiliar de la administración pública y de los tribunales con funciones autónomas … dice la Constitución, pero para sus autoridades es letra muerta, dicen litigantes y usuarios, pues deliberadamente atrasa los expedientes y no cumple lo que regula la carta magna y creen que la fiscal general María Consuelo Porras Argueta, aparentemente ignora lo que hacen sus subalternos y le da importancia a casos mediáticos, por lo que exigen a la funcionaria que investigue si los fiscales y auxiliares, cumplen a cabalidad con hacer su trabajo porque ahora con la pandemia, las oficinas centrales y las del interior, trabajan a paso lento y no aceleran las investigaciones y los expedientes duermen el sueño de los justos.
Hay casos concretos que se han denunciado. La fiscalía de Mixco, por años y meses, tiene engavetado varios expedientes y cuando los litigantes e interesados se presentan para conocer el avance de sus quejas y denuncias les dicen que el fiscal llega por horas por temor a ser contaminado por la pandemia que se considera irresponsabilidad y seriedad.
El fiscal auxiliar Héctor Carranza, no está enterado de cómo avanzan las denuncias. A los profesionales del derecho y sus patrocinados el agente de seguridad del MP de la fiscalía, les cierra el paso y como respuesta les dice que no hay personal porque teme ser contaminado con el virus, que se considera irrisorio porque la justicia no tiene horario especial.
Los afectados demandan de la fiscal General Porras Argueta, que su personal de las oficinas de Gerona y de la Republica, cumplan efectivamente con su trabajo, porque para ello reciben un salario y deben acelerar las investigaciones para no afectar a litigantes y usuarios.
En las audiencias en los tribunales la mayoría de fiscales no están familiarizados con los procesos. Su oratoria jurídica es cuestionable y demuestra poca capacidad y de esa cuenta varios de los procesos que se ventilan en materia penal, van al fracaso por la incapacidad de los fiscales noveles y nunca se ha visto a la fiscal Porras, asistir a una audiencia y comprobar el trabajo de sus fiscales y auxiliares.
La justicia en Guatemala, como se dice en buen chapín por años ha estado “en trapos de cucaracha”, por la falta de capacidad de los administradores de justicia y de los auxiliares. En términos generales el Ministerio Público, se ha convertido en fantoche y corrupto como es en todas las instituciones del estado y para muestra un botón, la irresponsabilidad de la fiscalía de Mixco, dicen los litigantes y usuarios, quienes piden acciones claras y no pírricas de Porras.
En la gestión de la ex fiscal Aldana, porque gestiones suyas y del ex comisionado de la ex CICIG. Iván Velásquez desapareció el Consejo del MP, quien tenía por ley determinar la labor de su personal, quien no cumplía se tomaban medidas disciplinarias o bien su remoción para sentar precedentes, pero ahora con la fiscal Porras, las investigaciones y los expedientes se retrasan deliberadamente lo que se considera absurdo y hasta ilegal.