Gladys Monterroso
licgla@yahoo.es
“Ciudad capital; caos controlado que beneficia al Status Quo”. Eduardo Prado.
Tuvimos una casi eterna alcaldía, que no satisfizo las necesidades del municipio, por lo que llegó el momento idóneo de ver las opciones que los vecinos de la capital tenemos, después de veinticinco años de un mismo proyecto personal, por fin podemos generar un cambio de fondo, debemos dar pues el gran paso.
Durante los nueve años que el licenciado Oscar Clemente Marroquín me ha dado la oportunidad de expresarme por este medio, no me he decantado por nadie públicamente, pero hoy, me veo en la obligación moral de trasladar mi sentir hacia un candidato a alcalde, que a mi parecer reúne los requisitos en todos los aspectos de ser un buen gestor de la Municipalidad de Guatemala.
Lo conozco como un ser sensible, respetuoso de los principios y derechos suyos, y de los demás, padre y abuelo cariñoso y comprensivo, pero ante todo ciudadano comprometido con el país, lo ha demostrado desde su actividad médica, ayudando al desvalido y enfermo, ante todo honesto y coherente, me refiero al Doctor en Psicología Clínica Eduardo Prado.
Él identifica a la ciudad como una urbe enferma, pero tiene cura a corto, mediano y largo plazo, para ello se necesitan soluciones estratégicas, que reconoce debe llegar a negociar, porque el alcalde ejecuta, el Concejo decide, para él y su equipo a la ciudad se le debe realizar un diagnóstico para comprobar entre muchos, varios de sus grandes problemas y sus soluciones, como: viabilizar la ciudad poniendo en práctica el proyecto que fue priorizado por el Consejo Nacional de Alianzas para el estudio de prefactibilidad del metro subterráneo en el marco del proyecto de alianzas para el desarrollo de infraestructura económica, para que este no se quede en papel mojado solamente, en el mismo contexto, se propone estudiar la posibilidad real de la implementación del aerómetro, que nos vendieron hace cuatro años como la ciudad del futuro, y que nos quedaron debiendo.
Otra de las deudas para con la sociedad, se encuentra la de transparentar los Fideicomisos, que han sido utilizados como una argucia legal para el manejo de los Fondos Públicos; la Municipalidad dentro de sus funciones tiene la facultad de reglamentar lo que no se encuentra en ley, y es su posición hacerlo.
El doctor Prado, por su formación, dentro de su plan municipal, prioriza el problema de la basura, dentro de otros, en dos grandes rutas: a) Llegar a acuerdos con las demás municipalidades para crear rellenos sanitarios en varios espacios físicos, y b) Convertir el tratamiento de la basura en una verdadera industria reinvirtiendo los ingresos que la misma produzca en educación, considera que se necesita un plazo máximo de 10 años para cambiar el modelo actual, sin que nadie pierda incluyendo los actuales recogedores de basura, y la ciudad ganará.
Se propone crear polos municipales de desarrollo en las aéreas más necesitadas como las zonas 21 y 18 para iniciar.
Crear un reglamento municipal de aguas, debido a que el Congreso se encuentra en deuda con la población al no crear una Ley de Aguas, las soluciones municipales o locales pueden generar un cambio estructural.
El doctor Prado derivado que su especialidad sea Psicología Clínica, y como buen médico sabe que la salud es un derecho fundamental, y que el gobierno municipal puede prevenir los grandes problemas, le apuesta a la creación y modernización de dispensarios municipales, así como brindarle a los bomberos sin importar su denominación los insumos para brindar los primeros auxilios.
Su proyecto se propone promover acuerdos y negociaciones para el bienestar de la capital, uno de ellos con Pronacom, para abrir la ciudad a un transporte terrestre de pasajeros ágil, moderno y seguro.
Estas son en grandes algunos rasgos los ejes de gobierno municipal que propone el doctor Prado, necesarios para el desarrollo de una ciudad que ha crecido desordenadamente, y que él con su hoja de vida que no logré trasladar, puede ser el alcalde que necesitamos.