Un enredo de las comunicaciones transmitidas por la División de Policía Internacional (Interpol) de la Subdirección de Investigaciones de la PNC de Guatemala a la Fiscalía Internacional Contra la Impunidad en relación al señor Mario Leal Castillo, provocó la airada reacción de la UNE que se apresuró a solicitar a la Fiscal General Consuelo Porras la inmediata destitución del Fiscal de la FECI, Juan Francisco Sandoval, evidenciando una vez más la tirria que le tiene la candidata presidencial de ese partido político, Sandra Torres.

La FECI simplemente se limitó a informar, como correspondía, de la captura de Leal Castillo, exvicepresidenciable de la UNE y sindicado por el delito de financiamiento electoral ilícito, cuando así lo notificó la agencia de Interpol en Guatemala y luego, también en la forma correspondiente, de la rectificación que hizo esa misma oficina, y que consta en sendos oficios enviados a la FECI, en el sentido de que no hubo captura sino simplemente la ubicación de Leal en la ciudad de Washington.

Al margen de la situación del sindicado y del enredo en las comunicaciones que puede tener origen en Estados Unidos o en la PNC, pero no en la FECI, lo importante es destacar la obsesión que tiene la señora Torres con el fiscal Juan Francisco Sandoval a quien ya intentó frenar en sus funciones recurriendo a la Ley de Femicidio que se presta para todo, por lo visto, si se trata de proteger a mujeres que alegan su condición femenina para escudarse no sólo de agresiones, sino hasta de la misma ley porque no hay forma en que un Fiscal no pueda investigar delitos cometidos por una mujer.

Gravísima situación se viviría en cualquier país si por virtud del espíritu de legislación orientada a proteger a las mujeres indefensas de agresiones machistas, se creara un marco de impunidad mediante la disposición de que los fiscales no pueden actuar contra alguna de ellas. Es como pretender que si un policía detiene a una mujer que conduce su automóvil a excesiva velocidad se oponga a la multa alegando que se trata de una agresión en su contra por su condición de sexo.

Y ayer, atribuyendo a la FECI el error que cometió la PNC, ordenó que se emitiera una comunicación exigiendo la destitución de Sandoval, posiblemente confiada en que la Fiscal General está esperando cualquier motivo para acabar con la Fiscalía Especial Contra la Impunidad, en lo que constituye otra alerta porque si así son las vísperas, imaginemos lo que espera al Estado de Derecho si Torres llega al poder.

Redacción La Hora

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