Arlena Cifuentes
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Érase que se era, una lejana isla llamada Fourni Korseon en Grecia. Para llegar al lugar, de tan solo ochocientos habitantes, es necesario viajar diez horas en barco desde Atenas, frente a las Costas de Turquía. Fue ahí, en donde Manos Mitikas y Denéa Buckingham se conocieron. Él trabajaba como ingeniero civil en la Isla. Dos años antes, Manos inicia el proyecto que lleva por nombre “Expedición arqueológica submarina”. Entre los deleites de Denéa, de Australia, estaba el buceo y decide unirse a la expedición como voluntaria. Estos dos personajes se enamoran y deciden emprender una aventura. Transcurren dos años durante los cuales le dan forma al proyecto que denominan “Humanity”.
Durante los últimos días de febrero y los primeros diez de marzo disfrutamos la visita de nuestros amigos de Italia, en ese mismo período de tiempo conocí a Denéa y Manos. Ella, una niña preciosa, dulce e inteligente, él un griego apuesto y cariñoso a quien adopté como hijo; con un brillo en sus ojos que los hace genuinos y transparentes. Siempre he sentido una atracción especial por los países alrededor de la cuenca del Mediterráneo; es un enigma, porque tengo una deficiencia sanguínea que sólo se da precisamente ahí.
El Proyecto arranca el 10 de diciembre de 2018, con dos mochilas al hombro y dos maletas portátiles; el equipo para filmar no podía faltar, también utilizan un drone. Intentaré trasladar el espíritu de lo que significa Humanity para sus creadores:
“Lancemos una profunda mirada alrededor del mundo, el cual pareciera hoy, más conectado que antes; sobre todo por los grandes avances tecnológicos. Si pudiésemos hacer a un lado las fronteras, el género (genus), el color de la piel, la religión, la raza y los prejuicios, nos encontraríamos con una única verdad: Todos somos SERES HUMANOS, somos parte de una misma especie compartiendo un mismo planeta. Nuestras diferencias nos separan e impiden escucharnos unos a otros, pero nuestra humanidad prevalece. Creemos que el mundo entero posee una sabiduría innata que debe ser compartida con el resto de la humanidad.
Si queremos que el mundo se conozca entre sí, debemos recorrerlo, iremos a cada lugar para cumplir nuestro objetivo. Visitaremos 199 países, 28 territorios, y al menos otras 19 subculturas. Al final lograremos compartir el mensaje y hacerlo llegar a todos los rincones del mundo. Crearemos un contacto global entre los seres humanos a través de mensajes y videos. Los grandes proyectos empezaron un día como una pequeña idea. Les invitamos a unirse a este sueño, viendo y conociendo la vida de otros, tratando de entender su forma de pensar, rompiendo los prejuicios y la discriminación. Explorando las diferentes culturas: descubramos juntos a la Humanidad.”
Se financian ellos mismos con sus ahorros; así también, con el apoyo de amigos que se identifican con el proyecto; en los países que visitan buscan traductores y guías voluntarios, personas locales que conozcan y orienten su recorrido. En el caso de Guatemala una de mis hijas les brindó alojamiento y colaboró en definir la ruta a seguir, en 13 días intentaron recorrer el país.
Humanity tendrá una duración de seis años. Hasta ahora han visitado seis países: Haití, República Dominicana, Puerto Rico, Cuba, México y Guatemala, de donde se trasladaron a Los Ángeles para realizar una presentación del proyecto con apoyo de “Sigma Lensses”, con cuyos lentes realizan sus cortometrajes. Humanity fue concebido como un Proyecto libre de ataduras de patrocinadores, con lo cual pretenden preservar el espíritu del mismo. El objetivo es que pueda ser accesible al mundo entero, que todos puedan conocerse y escucharse.
Humanity será traducido a la mayor cantidad posible de idiomas en el mundo. “La bondad de la gente disipa el cansancio”, afirma Denéa. Mi sueño es visitar Fourni, en donde me espera una acogedora casa a la orilla del mar. “Théos na se evlogeí”.
