Edgar Villanueva
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Cada fin de año, tenemos la tradición de hacer los propósitos para el que viene, usualmente una lista de aquellas cosas que, no logramos hacer o no pudimos cumplir como quisimos en el año recién pasado. Entre estos podemos contar bajar de peso, el sempiterno propósito que usualmente se queda corto y que vuelve a nuestra lista en el año siguiente.
Hoy quisiera hacer una lista de propósitos de Año Nuevo que nos ayuden a contribuir un poco más a nuestro país y que de alguna manera den un valor agregado a la discusión política. Considero que es esencial que, como ciudadanos, estemos conscientes que cada uno de nuestros actos tiene alguna consecuencia en la dirección que ha tomado nuestro país.
El primer propósito es que me informaré sobre la contienda electoral y votaré por el candidato más preparado y con el mejor equipo de trabajo y grupo de diputados. Que si no va a ganar o que estoy desperdiciando el voto, no importa. Tenemos que empezar a ser constantes con la elección de personas que tengan un récord profesional o personal que las califique para manejar el destino del país. Tan importante como la capacidad de esta persona es la de su equipo de Ministros y los diputados que pudieran acceder a un escaño con la votación. Un equipo preparado, capaz y con aptitudes personales para dirigir un Ministerio o el Congreso es tan importante como quien tiene la banda presidencial.
El segundo propósito es que participaré objetivamente de la crítica y aportación a la discusión nacional. Ya sea en redes, en reuniones familiares o en círculos de discusión, tenemos que cuestionar algunas cosas que damos por sentadas y profundizar en los elementos objetivos que tenemos a la vista. Asimismo, tenemos que saber que hay mucha información que no tenemos y que muchas veces nos es proporcionada con sesgo (e incluso manipulación) con el ánimo de influenciar nuestra opinión de una u otra manera. Este tema es especialmente sensible en redes sociales y de comunicación directa (WhatsApp) en donde consumimos información “a nuestra medida” y en donde circulan frecuentemente textos y videos que no tienen información confiable y que nos arrastran a ser parte de la locura (y polarización) colectiva.
Mi tercer propósito es seguir aportando al país dando trabajo a las personas que laboran con mi familia y en nuestro negocio, continuar pagando los impuestos debidos (sin atajos) y cumplir la ley. Con estos tres principios considero estar aportando mi granito de arena para el desarrollo de Guatemala y aportando a la consolidación de las instituciones del Estado para que respondan debidamente a las necesidades de la población.
Es importante visitar estos propósitos de nuevo durante el 2019 e ir revisando que estamos cumpliendo con los mismos. Todos somos responsables de aportar a nuestro país desde las diversas plataformas que se nos proporcionan y, por ende, tenemos que ser serios en estos aportes. La elección nos trae una nueva oportunidad de hacer este aporte.
