Pedro Pablo Marroquín Pérez
pmarroquin@lahora.com.gt
@ppmp82
Ayer el hermano del presidente Jimmy Morales, Sammy, escribió un post haciendo referencia a un tuit que publiqué por una columna de que sin acuerdos no hay futuro, y el hermano de Morales me reta a que nos pongamos de acuerdo en algo y su propuesta es que mi hermano enfrente la justicia “por la plaza fantasma de más de Q1 millón”, dice.
El león juzga por su condición y como él estaba o está en el negocio de emitir facturas fantasma por canastas y/o desayunos que nunca existieron, asume que mi hermano fue contratado por servicios que nunca se prestaron. Sin duda alguna no ha leído la denuncia que presentó la Contraloría General de Cuentas (CGC) porque en ella se establece que el producto se entregó y dicen que no ha sido socializado dentro del MP (su contrato venció en mayo).
Si mi hermano hubiera cobrado algo que no hizo (además de ser ilegal), sería motivo de extrema vergüenza como sentiría cualquier persona de ser acusada por aliarse con varias personas para emitir una factura y de ajuste enseñarle al sobrino cómo funciona ese negocio de emitir documentos para querer justificar algo que nunca se dio.
Como Sammy no es abogado, es comprensible que no entienda que las denuncias tienen etapas y sin duda, cuando sea requerido, los tres denunciados por la Contraloría (Thelma Aldana, Rottman Pérez y José Carlos) responderán lo que sea necesario porque así debe de ser. En mi familia hemos aprendido a dar la cara y hacerlo, hasta nos ha costado relaciones familiares aunque ello no ha impedido que sigamos apoyando a varias familias en su causa por vencer la impunidad.
Mientras el momento procesal llega, La Hora, que dirijo junto a mi padre se ha dado a la tarea de publicar la denuncia de la CGC y publicar las declaraciones del diputado Felipe Alejos y es más, la noticia fue parte de la portada de la edición del miércoles de la semana pasada y todo porque nosotros nos exigimos puertas para adentro lo que exigimos puertas para afuera.
Como entre mañosos se hacen upas, Estuardo Galdámez escribió otro tuit haciendo referencia al de Sammy, pero seguro el diputado estaba a medio convivio y por eso no es bueno expresarse cuando uno está de fiesta porque según él yo soy quien fui contratado por el MP. Con eso le dije todo.
Dice Morales que ellos dieron la cara, pero no dice que lo que hicieron fue enfrentar la acusación (dar la cara habría sido llegar a sincerarse con los investigadores y siempre negaron los evidentes hechos diciendo que era un tema administrativo) al tiempo que acordaron con el Presidente poner todo el aparato estatal para empezar una batalla por salvarse mediante impunidad y así hay que entender las ofensivas de Morales contra el Estado de Derecho.
Luego vino la acusación del mismo Presidente y Morales encontró más motivos para ser el títere de los corruptos y el resto es historia, pero si los Morales quieren de verdad alcanzar acuerdos como dijo Sammy, por qué no lo hacemos de manera pública, cara a cara y debe ser con el Presidente Morales porque a pesar que solo tengo 36 años, no me gusta perder el tiempo con quien no decide.
Sería bueno que den la cara y así podemos abordar los temas como debe de ser. Hay que hablar del tema de su periplo por la impunidad y cómo eso se conjuga con la niñez a la que él le dio la espalda, a los migrantes a los que les sacó dinero para olvidarlos como han hecho todos, a la justicia que desea mantener cooptada, su destrucción al Estado de Derecho que materializa al desobedecer a la Corte de Constitucionalidad (CC) y un largo etcétera. Yo le respondo lo que quiera.
Yo entiendo la desesperación de los Morales. Ni olían ni hedían y ahora pasaron a ser el útil instrumento de los verdaderos poderes pues sus miedos están siendo explotados por los que tienen cultura de poder y han manejado y manejan este país (rasos y cuello blanco).
Cuando el Morales que importa para el futuro del país quiera tener el debate público, allí estaré ahí para dar la cara como nos gusta.