David Napoleón Barrientos Girón
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Guatemala realiza el Censo Nacional de Población y Vivienda, un interesante y necesario proceso, por medio del cual se hace un conteo, diagnóstico y producción de datos estadísticos de todas las personas y viviendas, su distribución en el territorio nacional, uso de servicios básicos, con objetivos de producir bases de datos y proveer al país en forma oportuna, de un sistema de información confiable que permitan la gestión moderna de su desarrollo, la erradicación de la pobreza y la participación ciudadana. Y por supuesto para apoyar procesos de planificación y programación a nivel nacional y local que sin duda servirán para el diseño e implementación de políticas públicas y proyectos de desarrollo a nivel nacional. Por tal razón debemos suponer que las agrupaciones políticas deberían estar muy interesadas en los resultados de este censo y así corregir asimetrías en sus planes de gobierno, si es que los tienen. Los resultados deberían determinar la política pública en general, porque determinará el tamaño de la demanda de servicios, identificará zonas geográficas con mayores niveles de pobreza, proporcionará información sobre la población escolar que demanda servicios educativos, definirá la calidad, déficit y necesidades futuras de vivienda en el país, analizará poblaciones según su origen o pertenencia a pueblos y comunidad lingüística, entre otros, o sea será de gran utilidad política.
El proceso lamentablemente fue retardado, pero dio lugar a corregir aspectos como: si se hubiera realizado hace cinco o seis años, el número de diputados en el Congreso de la Republica se habría incrementado, por el hecho que la regulación nacional anterior establecía, que por cada ciento cincuenta mil habitantes debía haber un diputado, como si nuestros congresistas tuvieran muy contenta a la población en general, afortunadamente se corrigió y desvinculo el resultado en relación a la cantidad de habitantes. Un aspecto de gran importancia es que el proceso está siendo, además, acompañado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), aspecto que le da solides al ejercicio, donde sin duda están siendo utilizados instrumentos de investigación científica validados para tan importante actividad nacional, en este caso la entrevista. Este fin de semana pude observar a un encuestador en una aldea lejana en el interior del país, quien efectuaba las entrevistas en el mismo idioma de la comunidad, bien por eso.
Desafortunadamente hay hechos que lamentar, en este caso una organización política partidista o un integrante de la misma, en San Pedro Carchá, Alta Verapaz, paralelamente al censo nacional se dio a la tarea de hacer un ejercicio similar, creando confusión y desconfianza en la población referida. Afortunadamente ya se ha presentado la denuncia correspondiente, ojalá el Tribunal Supremo Electoral y demás autoridades tomen las acciones que la ley contempla y este proceso no sea ensombrecido por este tipo de irresponsabilidades, pues es una interferencia grave que no debe quedar en la impunidad.
Estamos en un proceso de importancia nacional, por consiguiente, los guatemaltecos debemos contribuir de manera positiva y esperar que los usuarios de ese banco de datos que se generara, lo utilicen para el desarrollo del país.