Danilo Santos
desantos.salazar@gmail.com
“¿Usted se ha quemado los pies con arena volcánica?” es una pregunta totalmente desafortunada. Denota falta de empatía con quienes han sufrido recientemente la tragedia del Volcán de Fuego, y desnuda la falta de asesoría en temas de comunicación del ciudadano Presidente. Es lamentable y vergonzoso que alguien así dirija el país, quizá es por eso que ya hasta inauguró un monumento conmemorativo, pero no ha dicho con propiedad y con esas ínfulas de perfecto estadista: Cuál es el plan integral para reintegrar social, económica y emocionalmente, a los sobrevivientes de eso que fue más que “arena volcánica” quemándoles los pies a sus familiares fallecidos; fue gas, cenizas y rocas a temperaturas de más de 500 grados centígrados. No solo fueron los pies, sino el cuerpo entero. Respiraron la ardiente estupidez de quienes desde el Estado y los gobiernos se han “quemado” los pies en las playas mientras en las faldas del volcán se incubaba un santuario.
Ya no se trata aquí de estar en contra del Presidente, él se ha dedicado a estar en su propia contra, con cada acción, decisión, y lo peor, cada discurso. Cada vez que habla lo hace dentro de la burbuja que le han creado y que fácilmente a creído. Ha recibido señales de todos lados de que las cosas en el país no van bien, de que en la región centroamericana la situación es volátil, que nuestro territorio es estratégico y que la lucha contra la impunidad y la corrupción es la llave para que Guatemala sea viable. Pero no, con la información que le han dado sus “libretistas” y, altos funcionarios de Naciones Unidas y el propio Vicepresidente de los Estados Unidos, lo que ha hecho es ponerse en modo “tropa loca” y tomar decisiones completamente impolíticas, descabelladas, y lo peor, irresponsables.
No le gusta la gestión Iván Velásquez, pues utilice los mecanismos que para eso existen, y pida el cambio de la persona, pero no desgaste la institución: no es un buen mensaje para la comunidad internacional, ni siquiera para los Republicanos (guatemaltecos y gringos) que usted cree lo apoyan. Ya se deshizo de Thelma Aldana, pero el listón quedó muy alto, que la actual Fiscal no vaya a la velocidad de Aldana no significa que no actuará en algún momento, tendrá que hacerlo, porque no querrá hundirse junto con usted. No le gusta que la prensa lo cuestione tanto, pues use sus “dotes” y vuelva cada escándalo en una oportunidad para comunicar lo que está haciendo para sacar adelante al país.
Ciudadano Presidente, deje ya la arrogancia y la soberbia, deje de dedicarse de forma tan alelada a sus intereses; usted no es el centro del país, la gente lo es. Deje de aparentar, porque después de casi tres años viendo su “reality”, a nadie convence. Su manera egoísta de ver a Guatemala y su poco compromiso con el país, nos tienen al borde de algo grave.
Sea prudente porque sus palabras están lastimando a mucha gente que lo que menos necesita son falacias sino acciones claras, decididas, que les ayuden a no quemarse nunca más con arena volcánica o las sandeces de un tipo que hace de todo, menos gobernar.