Grecia Aguilera

El viernes 1º de julio de 2016 se elevó el alma del distinguido empresario Jorge Castillo Love hacia la infinitud del Universo, convirtiéndose su energía interna en una refulgente estrella del firmamento, luminar que se ha liberado de todo sufrimiento físico y que desde ahora se vislumbra como si fuese luz de un cocuyo en el oscuro manto sideral, un ángel custodio para la vida de sus familiares, amigos, aliados y de todas aquellas personas que lo conocimos. En la esquela que publicó Cervecería Centro Americana, S.A. de la cual era Presidente del Consejo de Administración, se describe con exactitud la esencia de su personalidad: “Ejemplo de honradez, decencia, dedicación y nobleza; pilar importante del sector productivo del país; luchador incansable por el progreso y desarrollo de Guatemala…” Al día siguiente de su fallecimiento luego de la misa de cuerpo presente en la Capilla de Santa Delfina de Signé, se realizó un solemne recorrido por la avenida principal de la industria, en donde todas las personas que asistimos escuchamos un conmovedor y extenso toque del silbato de vapor, que estuvo sonando hasta que el cortejo llegó al antiguo pórtico de la fábrica, en donde con las puertas abiertas lo despidió camino hacia la eternidad el emblemático reloj, el cual me recordó los siguientes versos de mi poema “Psique” que afirman “El tiempo adelanta/ la aguja del reloj de la torre/ adelanta la aguja/ la empuja/ la empuja sin piedad/ y en contra de la vida/ la aguja se adelanta…” El incansable trabajo que don Jorge realizó para el impulso y avance de Guatemala, es hoy un paradigma, un modelo a seguir, especialmente para las personas que continúan al frente de las empresas que fundó, con el empeño, tesón y voluntad que lo caracterizaron siempre. También se ha convertido en un arquetipo para las nuevas generaciones de jóvenes empresarios que de igual manera desean prosperidad para nuestro país. Don Jorge nació en Guatemala el 1º de octubre de 1939 y creció en un ambiente dedicado a los negocios familiares. Por ello desde muy joven decidió estudiar una carrera relativa a las finanzas. Se graduó con el título de Economista en la Universidad de San Carlos de Guatemala con el trabajo de tesis titulado: “El Presupuesto Estándar Dentro del Campo Industrial” que presentó en noviembre de 1965, comenzando así su prolífica carrera a favor de la producción en Guatemala, sin olvidarse de la Responsabilidad Social Empresarial por medio de la Fundación Castillo Córdova, entidad que posee programas educativos, culturales y para el cuidado del Medio Ambiente; a partir del año 2002 esta fundación es miembro del Órgano Consultivo Económico y Social de la ONU. Desde 1989 hasta su fallecimiento don Jorge fue presidente de la Corporación Castillo Hermanos. Por la estima y admiración que en vida le tuvo a mis señores padres don León Aguilera y María del Mar, así como también por el aprecio que siempre le manifestamos junto a mi esposo Carlos-Rafael Pérez Díaz, le dediqué en el año 2012 mi poema titulado “Alma Azul en Aurora” que figura en la página 29 de mi libro “Exégesis del Alma” y expresa: “Espíritu cincelado/ de horizonte infinito/ victorioso ante la pugna/ triunfal ante el destino/ vencedor ante los días y las horas./ Corazón sublime/ antorcha de la existencia/ dulcifica el absintio/ nube sin abismo./ Voluntad vehemente/ dómine de multitudes/ anhelo afán laborioso/ tangible síntesis de vida./ Alma azul en aurora/ firme forja amanecida/ combate el sino en su umbría/ girando el minuto en diamante./ Sin murallas/ nace un tiempo nuevo/ mitiga el sol dorado/ los pesares/ reto al andar el sendero/ hacer luz y bondad del albur./ Múltiple es la creación/ sea su fuerza/ ánfora de las estrellas.”

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