Marco Tulio Trejo Paiz

A principios del recién pasado abril dejó de existir en este mundo y pasó a dormir el sueño de la eternidad el coronel Pedro Carrillo Florián, quien fue presidente de la Asociación de Jutiapanecos y Amigos de Jutiapa.

El lamentable suceso se produjo a consecuencia de un paro cardíaco.

Los miembros de la citada entidad, que lucha por el mejoramiento de las condiciones en general, están de luto por el repentino deceso de Carrillo Florián, quien estaba jubilado. Ya fuera de las filas del Ejército Nacional, Pedro se dedicó a trabajar en la ganadería y la agricultura en su finca situada en las orillas de la laguna de Güija, la que pertenece a Guatemala y a la vecina república de El Salvador.

Son dignos de mención los cursos de especialización profesional de tipo castrense que exitosamente recibió hace algún tiempo en la ciudad de México Carrillo Florián, estudios que valieron para prestar con mayor entrega y eficacia sus meritorios servicios en la institución armada de nuestro país.

La ausencia definitiva de Carrillo Florián, como jutiapaneco activo en la Asociación antes mencionada ha producido un gran vacío en dicha entidad, y se piensa que cause efectos desfavorables en las actividades que apuntan a la superación integral del levantino departamento que, dicho sea de paso, era la patria chica del fallecido militar.

Sin embargo, siguen prestando valioso concurso el coronel Donald Sandoval Cámbara, Factor Méndez y su esposa Alba Luz Amaya, su hermana Armida Amaya, German Jo y su esposa Lesbia Trejo de Jo, el brigadier Mauricio Izquierdo (también jubilado), Carlos Caceros, Estelita González de Villanueva y otros jutiapanenses prendados del bravío terruño.

No me resta sino patentizar mi más sentido pésame a los deudos del fallecido y expresar una triste despedida al buen amigo inolvidable con un ¡adiós! o ¡hasta luego!, Pedro Carrillo Florián.

Mi amigo Juan Pueblo se ha puesto un listón negro en el brazo del lado del corazón; dice que Jutiapa llora porque partió hacia el misterioso más allá uno de sus mejores hijos.

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