Juan Francisco Reyes López
jfrlguate@yahoo.com

De conformidad con la Constitución Política de la República, Artículo 171 inciso b) “Corresponde también al Congreso: aprobar, modificar o improbar a más tardar 30 días antes de entrar en vigencia el Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado”.

Según mi experiencia, la Comisión de Finanzas del Congreso, a la que le corresponde emitir dictamen para que lo conozca el pleno, debe estar integrada por lo menos por un diputado de cada bancada que conforma el Organismo Legislativo, lográndose así una plena y multi-política representación en la discusión, aprobación o improbación de dicho proyecto.

La Comisión de Finanzas actual está integrada solo por dos bancadas: Lider y Partido Patriota y no se desea que la misma sea modificada, contraviniendo la representatividad. También se ha hecho público que existe la intención de modificar el proyecto de presupuesto de Q72 mil millones aproximadamente a Q52 mil, argumentándose que el presupuesto no debe contener déficit y si los ingresos solo ascienden a Q52 mil millones, los egresos deben ser iguales como máximo.

Reducir el déficit es bueno; sin embargo, reducirlo al punto en que el Presupuesto de Ingresos y Egresos solo alcance para sueldos, mínimos de funcionamiento y pago de deuda interna y externa, es un “harakiri”.

No escapa a la población que habiendo perdido la elección el binomio presidencial del Partido Lider, hoy los diputados de esa bancada que integrarán en un buen número el nuevo Congreso desean limitar en su disponibilidad presupuestaria al próximo gobierno.

Abogar por un presupuesto inflacionario sería totalmente inadecuado y una reducción presupuestaria, más allá de lo razonable, es olvidarse que las 337 municipalidades y los Consejos de Desarrollo reciben un 10% los primeros y un significativo número de obras los segundos, derivadas del presupuesto ordinario.

Es justificable reducir el número de polideportivos que se han planteado y no urgen, lo que se debe prever es el gasto en compra de medicamentos, en material educativo y en seguridad.

Para bien o para mal, el Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado, constitucionalmente asigna porcentajes a favor de la Corte Suprema de Justicia, del Ministerio Público, del deporte, de la Universidad de San Carlos, de la Corte de Constitucionalidad, del Tribunal Supremo Electoral y otros más. Al ser por porcentajes, a todo el mundo se le reducirían las aportaciones constitucionales.

Un gobierno está en la obligación de ser austero, mesurado y eficiente en el gasto público; sin embargo, así como se debe aumentar la carga tributaria, tiene que utilizarse un porcentaje de endeudamiento público que es parecido a construir un nuevo inmueble con financiamiento, lo que hace adecuado y anticipa el desarrollo.

En la Comisión de Finanzas debe tener participación activa, de forma proporcional, todas las bancadas. El Presupuesto de Ingresos y Egresos del Estado debe ser adecuado y suficiente para garantizar los servicios públicos y el funcionamiento razonable del Estado.
“Por ello, ni tanto que queme al santo ni tampoco que no le alumbre”. La madurez política debe evidenciarse en la aprobación y en cualquier modificación al Presupuesto de Ingresos y Egresos para el año 2016.
¡Guatemala es primero!

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