Por Javier Estrada Tobar
jestrada@lahora.com.gt

Ese sistema permite que la mayoría de delincuentes y criminales no reciban el castigo que se merecen, y solo en algunas ocasiones –y de forma aislada– se dicten condenas de alto impacto en los tribunales, pero que en realidad no cambian el panorama nacional de inseguridad e injusticia.

Pareciera un producto de la casualidad y de situaciones accidentales, pero la verdad es que el sistema fue bien planificado y ahora resulta perfecto para que poderosos criminales, políticos, empresarios, periodistas y funcionarios evadan la justicia.

Actualmente nos encontramos, una vez más, en una etapa de reconfiguración de ese sistema de impunidad, y por eso es que distintos grupos de poder hacen todo lo posible para influenciar y tomar el control de los procesos que definirán el futuro próximo de las instituciones de justicia.

La reconfiguración del sistema ocurre con el proceso de elección de magistrados de la Corte Suprema de Justicia y de magistrados de la sala de la Corte de Apelación, que actualmente se encuentra en una etapa intermedia, en la que las Comisiones de Postulación analizan a los candidatos para postularlos y dejar en manos del Congreso la elección final.

Si todo sigue igual, esos grupos de poder influenciarán las decisiones y los procesos de las postuladoras para que el sistema se fortalezca, y los delincuentes y criminales se garanticen al menos cinco años más de privilegios e impunidad, asistidos de su influencia en las instituciones de justicia.

A todas luces esta situación necesita un cambio radical, y como no todo está definido aún, es importante que los ciudadanos se informen y fiscalicen lo que pasará durante las próximas semanas en las Comisiones de Postulación y en el Congreso, en el marco del proceso de elección de magistrados.

En el portal lahora.gt los lectores pueden encontrar el listado de los candidatos a ocupar las magistraturas de la Corte y las Salas, y con ese insumo tienen la oportunidad de identificar quienes, a su criterio, no son los idóneos para ocupar cargos públicos.

Si su oposición está fundamentada, los ciudadanos fiscalizadores podrán presentar sus pruebas oportunamente a las organizaciones sociales que observan el proceso o directamente a la Comisión de Postulación respectiva –en el Paraninfo universitario, zona 1–, para que reconsideren al candidato.

Además de observar a los candidatos es importante vigilar la actuación de los comisionados, y vigilar sus decisiones en las actividades públicas que realizan o bien, a través de las transmisiones en vivo que se realizan en internet.

Solo con la participación ciudadana las cosas pueden cambiar y tal vez de esa manera podamos ver con claridad ese sistema que beneficia a unos pocos y a las mayorías nos tiene sometidos a la injusticia y la inseguridad.

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