Por Walter Juárez
En los procesos de elección de nuestros gobernantes, debe prevalecer la supremacía electoral, pero por la mala costumbre y por mala fe, los sujetos que participarán en los procesos electorales, violan constantemente la ley y recurren a los tribunales de justicia para corregir las resoluciones que no les son favorables que fueron dictadas por el Tribunal Supremo Electoral. Desafortunadamente las autoridades electorales por complacencia con aquellos sectores que los eligieron para ocupar los cargos que ocupan por años han aceptado que las resoluciones que les son adversas a los que participan en un proceso comicial, utilicen la vía judicial para favorecer sus intereses. Recurrir a la vía jurisdiccional para impugnar las resoluciones electorales, pone en duda la credibilidad y la certeza de los magistrados y el propio proceso electoral. Creemos que es un error que los políticos que participan en los eventos comiciales en primera instancia, a los tribunales de justicia. Si la resolución les es adversa, apelan a la sala jurisdiccional y si el fallo del tribunal de segundo grado no les es favorece promueven apelaciones a la Corte Suprema de justicia, llegando al extremo de irse al amparo a la Corte de Constitucionalidad y así complicar el propio proceso en el que participan. Existen antecedentes de esa forma de actuar, por lo que se debe evitar que un proceso electoral se judicialice, y es que los magistrados del máximo órgano, consideramos que deben reformar primero el reglamento electoral y luego ante el congreso reformas para hacer una ley clara y contundente que no deje lugar a dudas de cómo se procede en estos casos. Debe de evitarse que los procesos electorales se judicialicen, que prevalezca la supremacía electoral, que fue el espíritu de los legisladores al elaborar la actual ley Electoral y de Partidos Políticos. Existe una fiscalía Especial en el Ministerio Público que conoce a petición del ente rector electoral todas las acciones que son objeto de investigación. Si el ente investigador considera que se ha cometido un delito, traslada la denuncia a los tribunales para que dentro de un debido proceso se resuelva un supuesto fraude u otro delito encuadrado en los procesos electorales.
Es un hecho que la población desconfía en los Magistrados Electorales hasta los propios políticos recelan de su actuar, y que consideramos que fueron electos en un proceso viciado y que en su actual gestión no actúan con la independencia de su alta investidura, aceptando como válido cualquier comentario que provenga del ejecutivo.
Y como corolario cada vez es más fuerte el rumor refrendando en las redes sociales en donde “SE ASEGURA” que Giannetti, seguirá en el “CARGO” después del l4 de enero de 2024 a las l4 hora. Verdad o mentira de lo que aseguran las redes sociales, será en su momento que todo se descubra y que el pueblo, no puede cruzarse de brazos, pero conociendo quién es el actual gobernante, todo es posible.