José Alejandro De León Molina
Politólogo en formación
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En diciembre de 2023 enfaticé los retos que tenemos nosotros los ciudadanos acerca de la participación política. La transición de un nuevo gobierno estaba a la vuelta de la esquina, un gobierno que prometía ser transparente; abierto al diálogo; con mayor acercamiento juvenil; con mayor partición de pueblos originarios y sociedad civil; con mayor consenso y empatía en la toma de decisiones.
Tomando la línea discursiva del gobierno actual, existía la premisa de que participar activamente podría ser una “oportunidad” que anteriormente no existía, por lo tanto una de mis soluciones concretas para involucrarse y accionar positivamente en cuestiones políticas era la auditoria social, propuesta que aún continúa siendo una opción legítima al alcance de toda la ciudadanía. Sin embargo, en esta ocasión quiero brindar un enfoque distintivo que permita a la población adentrarse y vivir el poder público-político, el municipalismo. Esta corriente permite establecer un modelo de descentralización de poder que se convierte directamente en lo que es la autonomía de los gobiernos locales. Un gobierno local se traduce en un modelo de gobernabilidad y organización social de forma delimitada territorialmente (municipios), cada uno cuenta con una administración propia que goza de elecciones democráticas para designar a las autoridades, especialmente al concejo municipal que es el que toma decisiones y rige el poder del municipio.
La procedencia del municipalismo surge como una medida para involucrar a la ciudadanía en las problemáticas que les afecta día a día, problemas que el gobierno central no podría enfocarse debido a la magnitud y tamaño del Estado. Por lo tanto, las relaciones entre gobernantes y gobernados se vuelven más orgánicas y directas, existiendo mayor posibilidad de ser escuchado y atendido según las demandas de la comunidad. Al fomentar el municipalismo se busca aumentar el interés de la población en adentrarse a la política, teniendo un mayor acercamiento con la democracia delegativa y participativa, viéndola como un derecho cívico que todos cuentan al tener voz y voto.
Mi objetivo es demostrar que a través del municipalismo se puede participar políticamente utilizando la herramienta de la auditoría social como el primer paso para fiscalizar y conocer los movimientos del gobierno local. Las decisiones tomadas por el municipio pueden afectar negativa o positivamente según lo que permite cada comunidad, estas decisiones se pueden controlar gracias a la posibilidad de recurrir a la información pública que por ley debe ser rendida a la población, y es que una municipalidad puede demostrar e implementar altos porcentajes de transparencia y accountability al momento de tener que rendir ante las demandas de la población.
Actualmente la tendencia de algunas municipalidades es implementar medidas de gobierno abierto fomentando una cultura de gobernanza que permita a la población tener mayor acercamiento con las autoridades y consigo la oportunidad de depositar mayor confianza (aspecto que continuamente ha sido negativo en materia de institucionalización de las entidades), esto les permite mantener una relación más “amigable” estableciendo canales de comunicación viables para el diálogo y consenso comunitario.
Otro aspecto del municipalismo es que las orientaciones y espectros ideológicos no suelen ser los principales obstáculos para el funcionamiento del gobierno local ya que el objetivo principal de dicha corriente es el protagonismo ciudadano, facilitando las herramientas para que ese afamado “poder de muchos” o lo que actualmente es el ideal de la democracia suela ser puro y accesible para aquellos que ejerzan su poder como ciudadanos.
Para mí, fomentar la importancia de los gobiernos locales radica en crear conciencia de que realmente existe una oportunidad de participar (omitiendo los modelos tradicionales de adherirse a un partido político y tratar de expresar las inquietudes como ciudadanos). Palpar el poder político es posible, únicamente debemos buscarlo para poder utilizarlo según nuestros objetivos y beneficios.
