Pedro Pablo Marroquín

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Esposo, papá, abogado y periodista. ¡Si usted siempre ha querido un mejor país, este es su momento de actuar!

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“Tengo 33 años y debo trabajar en mi carrera” dijo Miguel Martínez, quien preside el tribunal de honor del partido VAMOS y saltó a la arena política como Jefe del Centro de Gobierno que operó durante un año en el gobierno de Alejandro Giammattei.

Dada la relación con el Presidente, Martínez ha jugado un rol fundamental en muchas de las decisiones que el gobierno tomó con el afán de asegurar control de todas las instituciones. Conforme han ido pasando los meses, han ido perdiendo las formas en muchos de los casos.

Tener un Ministerio Público (MP) que se ha hecho el loco de la corrupción del Gobierno les ha dado un enorme Consuelo pero el hecho de que aquí en Guatemala hasta se les haga Porras por lo que hacen, no quiere decir que en otras latitudes no se estén fijando lo que han hecho a lo largo de tantos meses.

Y ahí es donde surge la enorme duda de por qué Martínez no buscará una diputación que le pueda dar inmunidad cuando se sabe que necesitarán de escudos porque los “negocios” que han fraguado son diversos y de los cuales, insisto, han terminado de perder las formas.

Hay quienes han asegurado que ellos harán lo posible para negociar con quien resulte Presidente y que por eso ha sido el deseo de intentar maniobrar por medio de la inscripción de candidatos, usando eso como un recurso de negociación para lograr tranquilidad.

La estrategia de los alcaldes que publicamos en La Hora y que ayer confirmaron en VAMOS es algo que además mencionan como una herramienta de apoyo para esa persona con la que pacten y todo eso es viable en la arena política, pero hay algo que no cuadra.

Y es que pueden pactar lo político pero a la fiscal general del MP no la puede remover el presidente que gane y debemos recordar que Porras no era la elegida por Giammattei y Martínez para ser Fiscal General y por eso es que ella y Silvia Patricia Valdés tuvieron que maniobrar porque sentían que la traición se podía consumar.

¿Qué pasa si Porras quiere lavar cara ante el mundo y para eso, utiliza toda la información y los casos a los que ha tenido acceso y que hasta ahora ha guardado en la bóveda?

Estados Unidos ha visto con lupa lo que ha pasado y prueba de eso son los pedidos de extradición de diciembre que incluyen a un diputado al Congreso de la República. Ahora se debe seguir el proceso porque José Ubico tiene inmunidad, pero si no, su situación para irse a Estados Unidos sería otra y pudiera darse más rápido.

Y con todos estos factores/posibilidades, la pregunta entonces es por qué Martínez no está buscando protección que le pueda dar inmunidad = impunidad, a menos que ese “prepararme” implique irse a estudiar al exterior unos cuantos años y hacer como han hecho Donald Trump y Jair Bolsonaro que no entregan el poder el día que toca.

Aquí el poder formal lo entregaría Alejandro Giammattei pero el poder real le tocaría trasladarlo a Martínez. Solo el tiempo dirá cuáles fueron los motivos y cuáles serán los planes de Giammattei y Martínez ahora que están en los últimos meses de su Presidencia.

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