Hoy se celebra el Día Mundial de la Libertad de Prensa. Foto: La Hora/AGN

Hoy se celebra el Día Mundial de la Libertad de Prensa, fecha dispuesta por la Asamblea General de Naciones Unidas con el voto de los países que forman parte de la UNESCO. Y es que mundialmente se valora la importancia de esa libertad que persigue preservar el derecho de los pueblos a estar informados de la realidad, lo cual significa que no se trata de un privilegio o un derecho que asista a los medios de comunicación sino que debe observarse para garantizar que los habitantes de cualquier país del mundo tengan acceso a la verdad, a informaciones serias que les permitan tomar decisiones correctas.

Nosotros creemos en la libertad de expresión tal y como se consagra en la Constitución de la República, en el sentido de que es un derecho de todos los habitantes del país el poder decir lo que piensan y que en el caso de mencionar a algún funcionario público no puede existir delito o falta porque dada sus funciones están sujetos al escrutinio ciudadano. Y es de notar que el articulado constitucional no hace diferencia entre si el funcionario es hombre o mujer, detalle que cobra importancia en un país donde se ha recurrido a leyes de femicidio para censurar a los medios a fin de que no se puedan publicar noticias que disgusten a funcionarias que luego se quejan de violencia sicológica contra la mujer porque se relatan verdades sobre su desempeño en un cargo público.

El caso es que la libertad de expresión es uno de los pilares del conjunto de derechos del ser humano que están consagrados en las cartas constitutivas tanto de las Naciones Unidas como de la OEA y por ello es que en esta fecha se hace especial referencia a que es por medio de la prensa que se da certeza y expresión a la vigencia de esa garantía indispensable para el ejercicio democrático.

Los gobiernos que se arrogan poderes absolutos, como pasa con el régimen impuesto por aquellos que están coaligados para asegurar vía libre a la corrupción y certeza a la impunidad, se dedican sistemáticamente a minar la libre expresión que les afecta porque se divulgan sus desmanes. Las acciones varían desde la burda represión hasta el uso de los famosos “netcenters” que se dedican a hostigar a los periodistas por sus actuaciones a favor de la preservación del Estado de Derecho.

Si el derecho a la libertad de expresión es fundamental en la sociedad, debe entenderse que más lo es el derecho del pueblo a estar informado y que la prensa es únicamente el vehículo para tal fin.

Redacción La Hora

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