Jesús Alvizurez

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Jesús Alvizures
chus@tribunadelaverdad.com

Es tiempo que nuestra gente entienda que solo es utilizada cuando necesitan del voto; hasta es jalada o acarreada en camiones y buses para llevarla al centro cívico de votación y le dan una bandejita de comida, ya en el poder el gobierno tentado por la codicia desconoce aquellos que lo llevaron al poder al menos en apariencia porque el ganador llega manipulado por los entes de poder que compran voluntades y los que no se venden son perseguidos.

En las pasadas elecciones hubo mucho que hablar sobre la manipulación informática del Tribunal Electoral el conteo no fue honesto y se prestaron a manipular, los diputados de esa época amenazaron al titular de la PGN para acomodar los finiquitos, Leopoldo Guerra del Registro de Ciudadanos denunció las amenazas a él y su familia y el Tribunal Electoral las ignoró; los funcionarios honestos fueron obligados a delinquir con mordaza para hacer la voluntad de los corruptos; en el mismo hubo descalificación de candidatos con falsos argumentos y así es como se cocinan los fraudes electorales en el país, ahora se preparan para darle otro golpe a la libertad y soberanía de la cual cacarean en diferentes medios de comunicación social.

La pobreza que azota a la ciudadanía guatemalteca está marcada por la corrupción, 119 asesores en el Ministerio de Salud, 306 asesores en el Congreso y cantidad en otras dependencias; si el elegido para el cargo no es capaz hay que descargarlo y no cargarlo de asesores que son vividores pegados a la teta del Estado. Si hubiera una asesoría sustantiva el pueblo no estuviera en condición de pobreza extrema y sufriendo la desnutrición crónica en diferentes áreas del país donde se ha detectado hambruna.

Las torrenciales lluvias han arrasado con lo plantado para alimentar a los diferentes extractos sociales del país, las carreteras y puentes han colapsado porque carecen de una estructura de calidad, los baches son mal reparados y con cobro excesivo, las calles de los pueblos y la ciudad se han convertido en ríos dada la irresponsabilidad ciudadana que tira la basura en las calles y se obstruyen los tragantes, y las críticas son para la autoridad municipal que viéndolo con ojo de justicia nada tiene que ver. Ahora se hace un llamado para que los puercos depositen la basura en los recipientes recolectores colocados en diferentes esquinas de la ciudad y así tendremos una ciudad que vuelva a ser la Tacita de Plata del pasado.

Caminemos con rectitud y no desviemos el camino; este que será el camino de nuestros hijos y nietos del mañana, Guatemala es un paraíso y no hay que dejar que la corrupción tome nuestra economía, nuestras leyes que ahora se acomodan y se extienden en su mando para ultrajar a personas honorables, dignas de ser llamadas bastión de la patria. En la actualidad los esbirros se visten de santulones para engañar al pueblo con falsos argumentos que desdicen de la verdad.

Construyamos para el futuro una Guatemala donde podamos todos vivir con hermandad, con amor y dignidad.

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