Claudia Virginia Samayoa
Cartas de una Lechuza
@tucurclaux
¿Se define usted de izquierda, centro o derecha? ¿Sabe siquiera qué significan esos términos?
No faltará quien me diga que se identifica como ‘nada’. Otros me dirán que esas definiciones quedaron en el siglo XX. Sin embargo, todas y todos tenemos una ideología, saberlo nombrar es parte necesaria de una ciudadanía activa. Para algunos, es mejor llamarse conservador o liberal; pero seguro, usted, tiene una ideología. Yo, por ejemplo, me considero una mujer de izquierda, liberal, socialista y feminista.
Soy de izquierda porque en el espectro social guatemalteco así llaman a quienes consideramos que el bien común se construye con un gobierno que busque la distribución de la riqueza; que desarrolle políticas públicas que garantice, el goce de los derechos humanos, incluido el acceso al agua, la electricidad y el internet; proteja a las personas más vulnerables y el ambiente de los efectos nocivos del mercado.
Así es que cuando Otra Guatemala Ya y La Casa Roja convocan a un foro que versará sobre la oleada de gobiernos de izquierda en el continente y la pregunta: ¿Y Guatemala Qué? Veo que hacen la misma pregunta que mis columnas han reiterado, ¿qué vamos a hacer? Solo que mi pregunta no solo es para quienes se definen de izquierda, es para todos que creen en una Guatemala Distinta.
Pero déjenme hacer una pregunta a la izquierda partidaria guatemalteca representada en el listado de dirigentes nacionales de los partidos políticos que participarán. ¿Dónde están las mujeres? El panel es de hombres y aunque reconozco que hay participación indígena en el mismo; sigue siendo una triste representación del patriarcado.
No faltará quien diga ahorita: ¿Y usted porqué no participa? Es la forma genial de evadir una respuesta seria. Conozco muchas mujeres que con aspiraciones y participación política -en y fuera- de las expresiones partidarias se encuentran con el muro de una izquierda que le cuesta revolucionar su propia raíz autoritaria y patriarcal.
Las mujeres que participan en política han estado planteando la necesidad de una unidad entre todas las expresiones democráticas, incluyendo movimientos sociales que están planteando el cambio. Sin embargo; ni la llamada izquierda logra esa unidad. Las mujeres de izquierda feministas proponemos un ejercicio del poder distinto: no queremos figuras mesiánicas ni populistas, queremos candidaturas que reflejen consensos sociales y, si no se puede, decisiones participativas en las alianzas como las primarias que hicieron en Colombia.
No soy una mujer que se desempeña en la política partidaria. Soy una mujer que defiende derechos y libertades; por lo que mi campo es la acción pública tanto en la promoción como en la defensa de derechos. Soy una ciudadana que entiende que el estado está capturado y que no hay acción institucional viable para transformarlo en el futuro cercano. Entiendo que la transformación de Guatemala tiene que partir de una revolución de la forma en que nos relacionamos con lo público y con lo político partidario. En ese entorno, los partidos políticos de izquierda están siendo llamados a realizar la transformación de prácticas y de modalidades del ejercicio del poder desde YA.
Hoy, viernes 8 de julio, estaremos atentas a escuchar si trabajarán por una unidad amplia con participación de todas las diversidades rompiendo con el mesianismo, el patriarcado y la visión autoritaria para la construcción de alianzas.
