APORTE SEGÚN ESTIMACIONES DEL BANGUAT LLEGARÍA A US$9 MIL MILLONES

Por Grecia Ortíz
gortiz@lahora.com.gt

Desde 2010 las remesas familiares se han constituido en un aporte importante que sostiene los hogares y economía de miles de personas en Guatemala y desde entonces el incremento en estos envíos se ha mantenido, creciendo cada año.

Hasta octubre de 2018, esas estadísticas no han cambiado, porque con US$7 mil 687 millones 355 mil 300, estos ingresos siguen en aumento, pero de la misma manera las deportaciones de guatemaltecos se han incrementado.

Para este año, el Banguat prevé que la cifra global alcance unos US$9 mil millones por remesas. Aunque existe una tendencia a la moderación, los ingresos seguirán en aumento.

De momento 2017 es el año que mayor crecimiento ha mostrado.

Pese a la estabilidad en el envío de remesas, 2018 no ha sido nada fácil para los guatemaltecos en Estados Unidos que se han enfrentado a las políticas antiinmigrantes del presidente Donald Trump y a la situación de Guatemala, entre inestabilidad política, falta de oportunidades y de acceso a servicios básicos.

De acuerdo con la Dirección General de Migración en Guatemala, este año han retornado 79 mil 770 personas por la vía aérea y terrestre de Estados Unidos y México, superando así los retornos que en 2017 sumaron 55 mil 184 personas.

Tanto expertos del tema económico y migratorio señalan que hasta que las condiciones del país no cambien, en referencia a la pobreza y a la desigualdad, el éxodo de guatemaltecos continuará. También destacan la importancia de las remesas que en el último año aportaron el 10.8 por ciento del PIB.

De acuerdo a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), las remesas en 2016 llegaron a más de 6 millones 200 mil personas en Guatemala. Este año, la cifra podría variar, ya que los incrementos continúan por ingresos de divisas.

Luz María es uno de las millones de beneficiarias. En su caso recibe remesas tres veces al mes que su suegra le envía desde Nueva Jersey donde tiene varios años viviendo. Los ingresos los utiliza la familia para el consumo del hogar y para cubrir los gastos médicos ya que Luz recibe un tratamiento médico delicado.

Las remesas están presentes en la vida de sus hermanos y de su madre quien también las recibe por parte de hijos y nietos en el extranjero.

En entrevista para La Hora Voz del Migrante, Luz detalló que si no fuera por este dinero, sus ingresos y alimentos serían más limitados, al mes reciben unos 300 dólares. Ella contó que la familia está integrada por cinco personas, entre ellos tres niños, cuyas edades oscilan entre 3 a 14 años y dos adultos.

Las remesas y la migración en su familia han estado presentes siempre, su esposo vivió en  EE. UU. algunos años, pero luego fue deportado e intentó regresar en dos oportunidades más pero fue detenido. Después prefirió esperar a que se le otorgue un perdón y así seguir un proceso de migración de manera regular.

Y a pesar de todo, Luz no duda y afirma que si tuviera la oportunidad migraría, “yo me iría por un mejor futuro para mis hijos, porque se lo merecen, no tengas duda que sí me iría, tengo a muchos familiares allá, yo intenté sacar visa pero no me salió”, dice convencida la guatemalteca.

REMESAS SE PERFILAN A SUPERAR CIFRA HISTÓRICA DE 2017

Durante 2018, octubre ha sido el mes que más ingresos ha reportado con US$863 millones 521 mil 400 dólares, mientras febrero presentó el menor con US$630 millones 201 mil 200.

Aunque el monto de este año se perfila a superar el total del año anterior, a menos de dos meses que termine 2018, el crecimiento ha sido menor comparado al reportado en 2017.

BANGUAT: REMESAS MUESTRAN MODERACIÓN, PERO SIGUEN SIENDO IMPORTANTES

Uno de los últimos informes Macroeconómicos del Banco de Guatemala, disponible en el sitio electrónico de la entidad, señala que a nivel centroamericano se estima que las divisas por remesas familiares en Guatemala hasta el año pasado aportaron un 10.8 por ciento del PIB.

Asimismo destaca que “las remesas familiares muestran una moderación respecto del año previo, aunque en 2018 el ingreso de divisas por ese concepto seguiría siendo importante”.

Para este año, el Banguat espera que el país cierre con un estimado de US$9 mil 052 millones en remesas, equivalente a un 10.5 por ciento de variación y menor al dato de 2017 que cerró con un total de 14.4 por ciento, aunque la cifra podría variar de acuerdo a lo previsto.

Otro de los reportes del Banguat, titulado “Informe de Política Monetaria”, correspondiente a septiembre, indica que los ingresos comparados con el año previo, presentaron una desaceleración, misma que ya se había anticipado.

“Refleja la reducción gradual de los envíos extraordinarios (constituidos principalmente por ahorros); no obstante, el flujo de remesas familiares, en términos nominales (en dólares estadounidenses), continúa siendo importante, dado que el desempleo hispano en Estados Unidos de América se mantiene en niveles históricamente bajos”, anotó la entidad financiera.

MIGRACIÓN AUMENTA EN UN AMBIENTE COMPLICADO EN EE. UU. Y GUATEMALA

Todo este escenario  ocurre a pesar del ambiente que los connacionales han enfrentado este año, como la crisis  con la política de Tolerancia Cero y los constantes ataques del presidente Donald Trump hacia la comunidad migrante.

Solo en la Frontera Sur, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) reportó un total de 72 mil 728 migrantes guatemaltecos detenidos entre adultos y niños.

En Guatemala la situación económica y la falta de acceso a servicios básicos, entre otros factores, de acuerdo a entrevistados, siguen motivando a migrar.

MATTA: APORTE MIGRANTE ES UN PILAR IMPORTANTE PARA LA ECONOMÍA NACIONAL

En entrevista para La Hora Voz del Migrante el analista Emilio Matta Saravia, explicó que el crecimiento en remesas familiares registrado entre 2016 y 2017 se puede atribuir a la incertidumbre que causó la elección de Donald Trump como Presidente de Estados Unidos.

“Trump tiene unas políticas bastante más duras de lo tenía el presidente Obama, entonces yo creo que eso hizo que muchas personas migrantes tuvieran un poco más de miedo y enviaran más remesas hacia Guatemala, previendo algún tipo de acción de deportaciones, mayores de las que efectivamente se dieron”, anotó.

Comparado con otros años, el crecimiento por estos ingresos, a decir de Matta, ha sido menor al registrado en 2017, tema que se le atribuye a las políticas antiinmigrantes.

El analista cree que la tendencia de crecimiento sí se mantendrá este y el próximo año. Al mismo tiempo destacó que el flujo migratorio se mantiene en aumento, aunque sin saber con exactitud a cuánto asciende.

“Lo que nadie puede contabilizar ni hacerlo es el flujo migratorio que hay de Guatemala hacia Estados Unidos, uno no puede estimar con certeza cuántas personas más se están yendo en todos los años, ese flujo migratorio que va hacia Estados Unidos al llegar empiezan a trabajar y mandar remesas de vuelta a Guatemala y eso no se toma en cuenta en las estadísticas”, destacó.

La “Caravana invisible”, a decir de Matta, sostiene los ingresos de las familias del país, aunque es un número imposible de contabilizar hasta ahora.

CONDICIONES QUE GENERAN MIGRACIÓN SE MANTIENEN

Para el analista, las condiciones para que siga la migración se mantienen, porque las autoridades no han impulsado políticas públicas enfocadas en la educación y salud, además de la crisis económica que atraviesa el país, que al final provoca la falta de oportunidades.

Las remesas son las que sostienen al país de acuerdo con Matta. Si no existiera este ingreso no solo las familias se verían afectadas, sino también las empresas habrían quebrado. Estas transferencias monetarias son el principal motor de crecimiento  del PIB.

“Si las remesas crecen un 10 por ciento o más anualmente, eso quiere decir que el crecimiento de la economía se ve impactado de forma positiva por ese crecimiento de remesas, más que por la actividad económica”, apuntó.

No obstante, indicó que depender de las remesas a largo plazo no resulta sostenible.

Matta afirmó que al migrante, tanto el Gobierno como el Estado no le reconocen el esfuerzo que realiza, “es un pilar muy importante ese aporte del migrante a la economía nacional”.

Agregó que además de todo lo que hacen las remesas por el país, también aportan a estabilizar el tipo de cambio, “inclusive el Banguat ha tenido que entrar a comprar dólares para estabilizar la moneda de acuerdo a las reglas de participación que tiene”.

Refirió que en un país como Guatemala, con una balanza cambiaria deficitaria,  en donde las importaciones superan a las exportaciones con creces, una devaluación muy probablemente acarrea inflación que al final golpea a un grupo de personas más necesitado.

SIN OPCIONES, MIGRACIÓN IRREGULAR CONTINUARÁ

Sobre los altos índices del éxodo de guatemaltecos, el investigador de la Asociación en Estudios Sociales (Asies), Jahir Dabroy, expresó que la situación tiene relación con la política impulsada en Estados Unidos al respecto de la migración.

“Hay nueve medidas que impulsó el presidente Donald Trump prácticamente desde su llegada y que tuvieron mayor realce a partir del mes de enero. Una medida es que todos los indocumentados son vistos como una amenaza y sobre todo con el enfoque de seguridad nacional y el segundo punto es que las deportaciones ahora son expeditas”, expresó.

Ahora las deportaciones toman en promedio, unas tres semanas, según Dabroy, incluyendo juicios para las personas que ingresan de manera irregular.

Solicitar un estatus de asilo, a decir de Dabroy ahora resulta mucho más complicado que antes y los casos aprobados son muy pocos.

Sin opciones de superación en el Triángulo Norte, el analista afirmó que la migración irregular continuará, porque existe mucha limitación en cuanto a acceso a educación, trabajos con empleos dignos, todo en detrimento de la calidad de vida.

INGRESOS SEGUIRÁN EN AUMENTO, PERO A UN RITMO MÁS DESACELERADO

El economista e investigador también de Asies, Andrés Navas, agregó que ese crecimiento que se percibe en las remesas se mantendrá por la situación económica de EE. UU., porque se ha potenciado la economía.

“El desempleo es mínimo, hay bastante trabajo; por lo tanto es un destino atractivo para el migrante, pero esta es una parte de la historia y la otra parte es que hay un factor de especulación… la complejidad de política migratoria del presidente Donald Trump…”, comentó.

Uniéndose a la proyección estimada por el Banguat, Navas refirió que existe una inclinación a la baja del crecimiento, “habrá una reducción anual que se dice será del 7 por ciento, son estimaciones del Banguat, como ellos ponen como un rango en referencia a 2018, o sea, si van a entrar remesas pero a un ritmo más desacelerado”.

REMESAS AUMENTAN PERO MÁS PERSONAS DECIDEN EMPRENDER EL VIAJE

En ese sentido el migrante guatemalteco Marco Antonio Lorenzana, residente en Kansas, refirió que las remesas han logrado superar todos los obstáculos que se les han presentado, en parte porque existen muchas oportunidades de trabajo y formas de superación que están siendo aprovechadas al máximo.

“Si bien es cierto las deportaciones han alcanzado cifras alarmantes, pero cabe resaltar que así como estas van en aumento, día a día nuevas personas están arribando a éste país. La migración no se podrá detener, hasta que Guatemala se dé a la tarea de crear lo que los migrantes buscan aquí: “oportunidades”, dijo.

Si en un momento, las remesas dejaran de llegar a las familias, Lorenzana indicó que se puede visualizar un ambiente difícil, también para el Estado.

El guatemalteco duda en que el Gobierno hasta ahora haya impulsado acciones positivas, pues los índices de país, en cuanto a pobreza y desigualdad se mantienen y esto resulta preocupante.

“Con fundamento en lo anterior, puedo decir que el Gobierno de Guatemala, a sabiendas de la problemática social, y a sabiendas que “solo con políticas efectivas de desarrollo económico-social” puede detenerse la migración de las personas más vulnerables, NO HA TENIDO LA VOLUNTAD POLÍTICA para actuar”, agregó.

GUATEMALA NO HACE NADA POR DETENER LA MIGRACIÓN

Desde la ciudad de California, Fernan Gonzvel, considera que la situación política para los migrantes este año no ha variado, porque tanto demócratas como republicanos no han impulsado acciones a favor de este grupo.

Gonzvel cree que una de las razones a las que se puede atribuir el aumento de remesas es a la inseguridad de lo que ocurrirá a futuro, porque consideran que en algún momento las personas pueden ser deportadas.
Al igual que Lorenzana, el connacional cree que el Gobierno guatemalteco no hace nada por detener la inmigración y que la vida que los guatemaltecos encuentran en EE. UU., es incluso más sostenible.

EL TEMOR A SER DEPORTADOS MOTIVA A MIGRANTES A ENVIAR REMESAS

Al igual que el resto de entrevistados, Walter Quintanilla en Nueva York, cree que es el temor a ser deportado lo que motiva que las personas envíen más dinero a sus familias, como preparándose para ese momento.

“El dinero que gana la gente prácticamente lo está mandando y se quedará con el poco dinero para la venta y la comida, eso es lo que creo que está ocurriendo ahora”, dijo.

Quintanilla coincide y asegura que el Gobierno ha hecho muy poco por las personas en Guatemala. Además, la violencia, justicia y economía cada vez está peor, “hay trabajos que no les dan a la gente y por eso se desesperan, vea el caso de Honduras…”.

GUATEMALA NO ESTÁ PREPARADA PARA RECIBIR A DEPORTADOS

Marlon González, desde Florida, indicó que este año para los migrantes ha sido de incertidumbre y temor, porque no hay nada establecido que dé esperanza a quienes están de manera irregular en EE. UU.

González no duda en que el aumento por remesas sea a causa de las políticas migratorias impulsadas por Trump, situación que preocupa en caso que ocurriera una deportación masiva porque Guatemala no está preparada para recibir a tantas personas.

“El Gobierno de Guatemala no tiene ningún tipo de programa que les dé la posibilidad de regresar y quedarse a trabajar para mantener a sus familias”, anotó.

AL GOBIERNO NO LE IMPORTA QUE MÁS PERSONAS MIGREN

La guatemalteca Anamaria Tejada, residente en California, aseguró que así como existe un incremento de dinero desde EE. UU., también se observa el mismo comportamiento en los índices de migración.

Además señaló que dicho incremento también se puede explicar, porque así como hay más personas que migran, necesitan pagar las deudas adquiridas para llegar a EE. UU.

“Al Gobierno no le importa que la gente siga migrando, por eso los países del Triángulo Norte son países que no se han dedicado a ayudar a la gente más necesitada, por ejemplo de áreas rurales, el migrante ha salido de estos sitios y no encuentra cómo sobrevivir”, añadió.

La salud, educación, desnutrición y demás temas siguen en las mismas condiciones, asegura Tejada, sin que las autoridades y el Congreso hagan algo por cambiar este panorama, “la prioridad parecen ser los militares” y la corrupción, anotó.

Guillermo Castillo, en Kentucky, dijo que este año ha sido complicado pero los próximos dos lo serán aún más para la comunidad migrante, pues cada vez el Gobierno de EE. UU. impone más obstáculos.

Al igual que el resto de entrevistados, Castillo cree que es el temor el que está provocando que las remesas sigan en aumento, además que las condiciones de Guatemala siguen siendo complicadas para la población.

“-No hay- ninguna voluntad política. El Gobierno de Guatemala se ha centrado en lobby anti-CICIG en vez de lobby para defender los más de 2 millones de guatemaltecos”, dijo.

La connacional Celeste Quiñónez, cuenta a que con frecuencia envía remesas hacia Guatemala para apoyar a su familia e imaginar un futuro sin este aporte es difícil.

La situación en el país es compleja afirmó, al igual que ocurre en lugares como Honduras y El Salvador, “a la gente no le importa todo lo que hacen, es por un futuro mejor por sus hijos, uno se viene arriesgando, aguantando hambre y sed”.

Quiñonez recordó que en su caso, llegó a EE. UU., en 2005 en una época fría junto a sus pequeñas niñas arriesgándose a peligros.

EN CIFRAS

US$863 millones 521 mil 400
Recibió Guatemala en octubre de este año por concepto de remesas.

US$9 mil millones 052 mil
Estima el Banguat recibir en remesas en 2018.

24 mil
Personas más fueron deportadas en comparación a 2017 según la Dirección General de Migración.

OIM: MIGRANTES ESTÁN REPATRIANDO CAPITALES Y ENVIANDO MÁS DINERO

Jorge Peraza, jefe de la Misión de la OIM para Guatemala, El Salvador y Honduras, mencionó que durante el próximo año el PIB de Guatemala seguirá dependiendo en un alto porcentaje de las remesas; si en los últimos estudios se hablaba de un 11 o incluso un 12 por ciento, es probable que para 2019 este porcentaje crezca aún más.

“Yo pronosticaría que Guatemala mantendrá una tendencia en cuanto al incremento en las remesas; sin embargo, por las circunstancias y la coyuntura respecto a las políticas migratorias, estas cifras también reflejarán que los migrantes están repatriando capitales y enviando más dinero para apoyar a sus familiares dentro de un margen de seguridad económica ante la situación que podrían experimentar en Estados Unidos”, anotó.

“Trump tiene unas políticas bastante más duras de lo tenía el presidente Obama, entonces yo creo que eso hizo que muchas personas migrantes tuvieran un poco más de miedo y enviaran más remesas hacia Guatemala, previendo algún tipo de acción de deportaciones, mayores de las que efectivamente se dieron”.
Emilio Matta Saravia

“Hay nueve medidas que impulsó el presidente Donald Trump prácticamente desde su llegada y que tuvieron mayor realce a partir del mes de enero. Una medida es que todos los indocumentados son vistos como una amenaza y sobre todo con el enfoque de seguridad nacional y el segundo punto es que las deportaciones ahora son expeditas”.
Jahir Dabroy, Asies

“La migración no se podrá detener, hasta que Guatemala se dé a la tarea de crear lo que los migrantes buscan aquí: “oportunidades”.
Marco Antonio Lorenzana, migrante

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