POR MARIELA CASTAÑÓN
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Investigaciones de la Policía Nacional Civil (PNC) indican que pandilleros de la Mara Salvatrucha (MS), habrían pagado unos Q3 mil a miembros del Sistema Penitenciario (SP) por el ingreso de un dron a la cárcel de Fraijanes II. El objeto fue encontrado en una requisa, el pasado 5 de octubre.

Las pesquisas detallan que a través del dron se captaban imágenes de lo que ocurría en la cárcel. Los integrantes de la MS mantenían control de esa prisión e incluso de las mismas autoridades del penal.

No se tiene certeza desde cuándo estaba ese objeto dentro del centro carcelario, pero se sabe que pudo tener un costo de Q3 mil, ya que no era muy grande.

El ingreso de cualquier objeto no permitido en la cárcel inicia con un reo, que puede negociar con los representantes de los sectores y estos a su vez con el guardia, el alcaide, el director del centro carcelario o altos funcionarios.

REQUISA Y FICHAJE

El pasado 5 de octubre, las autoridades realizaron una requisa en Fraijanes II y en la cárcel El Boquerón, con el fin de fichar a unos 625 privados de libertad de ambas prisiones.

En esa diligencia también se realizó una requisa; en Fraijanes II, las autoridades encontraron varios objetos no permitidos, entre estos, el dron del que se presume, los pandilleros pudieron pagar Q3 mil.

INVESTIGACIONES SON REALIZADAS POR MP

Por otro lado, La Hora intentó obtener una declaración del director del SP, Nicolás García Fuentes, para conocer si establecieron la forma cómo ingresó el dron a la cárcel, sin embargo, no fue posible obtener su respuesta.

En tanto, se consultó a Rudy Esquivel, portavoz de Presidios, quien se limitó a responder que las investigaciones del caso las realiza el Ministerio Público (MP).

EN LA CÁRCEL TODO TIENE PRECIO

Relatos de privados de libertad y de guardias del SP, detallan que en las cárceles todos los objetos no permitidos tienen un precio que se comercializa de diferentes formas y con distintas autoridades.

Según las personas entrevistadas, en prisión es posible comercializar los minutos para hablar por teléfono, el internet, los teléfonos, los negocios, refrigeradoras, microondas, alcohol, drogas y hasta personas.

Los presidiarios que poseen mayor capacidad financiera pueden gozar de privilegios, pues todo es posible por una cuota impuesta por representantes del SP.

Regularmente, los privados de libertad que no delinquen y que cumplen con algunas de las normas internas, son quienes menos beneficios tienen.

El sistema de corrupción es diferente entre una cárcel de condena y una preventiva, según indican reclusos y sus familiares.

En tanto, el impacto de esa corrupción se refleja en las calles del país, donde persisten las muertes por extorsión.

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