POR GRECIA ORTIZ
gortiz@lahora.com.gt
Los servicios de salud son inaccesibles para miles de guatemaltecos que no pueden acceder al sistema de salud pública debido a su situación crítica y tampoco a los servicios médicos privados, por su alto costo. Es así como un derecho de los guatemaltecos es realmente un privilegio reservado para quienes pueden pagar.
Con los ingresos que percibe como electricista y albañil, Carlos González no se puede dar el lujo de pagar por los servicios de una clínica privada para tratar sus dolores de cadera y no desea ir al hospital de su natal Chiquimula porque el mismo no está bien equipado; busca como alternativa ir al hospital nacional más grande, el San Juan de Dios, pero tampoco tiene suerte por la falta de insumos y medicinas.
La situación de Carlos podría parecer familiar para miles de guatemaltecos que se encuentran en una especie de limbo en cuanto al acceso a la salud, y que supone un verdadero dilema sobre un derecho vital que se convirtió en un privilegio.
El sistema de salud pública se encuentra desde hace varios años en una profunda crisis, que deriva en una histórica corrupción que se pacta desde las campañas políticas y se da a todo nivel, lo que se traduce en atrasos de los pagos para el personal médico y operativo, pero principalmente en la falta de insumos, medicamentos y atención de calidad para los pacientes.
Pedro Mutz conoce de primera mano esta situación, porque recientemente viajó con su esposa al Hospital de Occidente, en Quetzaltenango, en donde esperaban recibir algún tipo de atención médica, pero se enfrentó al mismo dilema de Carlos en la Ciudad de Guatemala.
La Unidad de Consulta Externa en Xela estaba cerrada desde hacía diez días y Mutz estaba destinado a conformarse con que su esposa no recibiera atención, a pesar de que los cólicos que la aquejaban eran cada vez más intensos.
“Es una situación difícil porque mi esposa puede tener algo serio y si lo dejamos al tiempo se puede complicar”, afirmó.
Julio Ramos, de Quetzaltenango, explicó ante la crisis hospitalaria los médicos piden contribuciones y en su caso se trató de un paquete de guantes de látex, que servirían para prestar servicios en el nosocomio.
“Desde que mi mamá está aquí me pidieron que trajera guantes y pañales; en el caso de los guantes los encontré a un precio de Q45, pero hay más caros. Yo lo traigo no porque tenga mucho dinero, sino porque creo que también hay necesidad aquí”, aseguró.
Ramos comentó, que el hecho que la consulta externa esté cerrada les afecta a muchos pobladores necesitados de los servicios públicos, ya que algunos más afortunados son atendidos en el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) o acuden a centros privados si tienen las posibilidades económicas. “Los que no tenemos, pues nos conformamos”.
¿CUÁNTO SE TIENE PARA 2016?
Para atender la crisis histórica y poner en marcha un sistema de salud olvidado el Ministerio de Salud Pública cuenta solo con Q5 mil 531 millones 691 mil 485, que representa Q115 millones 532 mil 975 menos de lo asignado en 2015.
En ese sentido la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) señala que de no implementar las medidas correspondientes, se esperaría que la crisis hospitalaria se agrave, y los perjudicados sean siempre los pacientes.
63% DE DESABASTECIMIENTO
Según datos del Ministerio de Salud, proporcionados por la Unidad de Comunicación Social de esa cartera, de los 44 hospitales públicos en el sistema nacional de salud, 63 por ciento presentan un desabastecimiento de medicamentos e insumos crítico, es decir 28 en total, mientras que otros nueve se encuentran en riesgo y solo siete presentan un nivel aceptable.
¿CUÁL ES LA INVERSIÓN EN UN PACIENTE Y CUÁNTAS CAMAS HAY?
El Ministerio informó que el costo promedio de hospitalización de un centro asistencial público, depende del tipo de medicina que se requiera en casos como emergencia, medicina general y consulta externa.
El promedio del costo diario para el sistema de salud de un paciente con cuidados básicos oscila entre Q362.80 y Q1,303.99, aunque todo depende del tipo de atención. Mientras el costo diario en la Unidad de Cuidados Intensivos en promedio es de un total de Q11,588.45.
De acuerdo con Salud Pública, en consulta externa de septiembre a diciembre de 2015 se atendieron a 808 mil 800 personas, en la emergencia fueron 638 mil 040; el sistema de salud nacional tiene 7 mil 698 camas en los 44 hospitales.
Los hospitales públicos, prestan atención en servicios de encamamiento, medicina, cirugía, intensivo, ginecología, y obstetricia, consulta externa, emergencias y auxiliares de diagnóstico.
¿CUÁNTOS HOSPITALES HAY?
Por otro lado y de acuerdo al Departamento de Regulación, Acreditación y Control de Establecimientos de Salud (DRACES), existe el registro de 117 hospitales privados, 28 casas de salud, 50 hospitales de día, y 193 sanatorios.
Las clínicas privadas generales son 1 mil 534 y las especializadas son 3 mil 614, para hacer un total de 5 mil 148: el costo de atención para consulta le corresponde a cada uno de los centros, por lo que puede variar.
Otro aspecto importante, es que los hospitales privados deben contar con al menos 20 camas para funcionar, para sanatorios 10, en casas de salud 5 y los hospitales de día llegan a 3.
Los servicios, en contraste a los prestados por el sector público, son medicina interna, cirugía, ginecología y obstetricia; anestesiología, dermatología, neumología, cardiología, oftalmología, neurología, gastroenterología, traumatología y terapia física.
En tanto, el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), tiene 23 hospitales, dos clínicas periféricas, una policlínica, un centro siquiátrico, tres Camip, 2 consultas externas, 35 consultorios y 36 unidades integrales de adscripción, con un total de 2,339 camas.
LA DIFICULTAD ECONÓMICA
De acuerdo con el ministro de Salud, Alfonso Cabrera, es una prioridad brindar atención en todos los hospitales públicos para garantizar un tratamiento médico adecuado a la población.
En cuanto al nivel de desabastecimiento, el funcionario indicó que existe una mejoría en referencia a un estudio realizado, y que con los donativos obtenidos recientemente y con la programación de ese ministerio se tendría cubierto el primer trimestre de este año.
“Eso de las consultas externas cerradas es un problemita que viene desde hace unos días. Nosotros, de verdad lo digo, estamos tratando por todos los medios de solventar los problemas que hemos tenido. Yo espero que en estos días regresen los médicos a atender la consulta”, aseguró.
Respecto al costo de los servicios privados opinó que no se puede decir que funcionan con fines de lucro, pues dependiendo del tratamiento es que establecen las tarifas que cobran.
Para el ministro el problema más serio es la dificultad económica, dados los índices de pobreza en Guatemala. “Yo creo que definitivamente eso es lo que afecta y lo que no permite que una gran cantidad de guatemaltecos puedan asistir a un centro privado”, dijo Cabrera.
SISTEMA OBSOLETO
Ronalth Ochaeta, especialista en políticas públicas, considera que el sistema de salud es obsoleto, porque los sistemas se crean en función de las necesidades epidemiológicas de la población, reconociendo que la salud es un derecho y toda la población debería tener acceso, independientemente de la situación económica.
Apuntó que es evidente un déficit de atención, porque cada municipio debería contar por lo menos con servicios de salud preventiva, y esa actualmente es una falencia de los sistemas.
“Nuestra estructura básica de salud está colapsada. El Estado no es capaz de dar el servicio. Entonces lo que debemos hacer es un tema de inversión, de financiamiento, de garantías en el sector de salud así como en el sistema básico de atención primaria”, enfatizó.
Para solucionar esta situación, el entrevistado considera que el Estado debe invertir y preguntarse si el sistema es funcional para las necesidades que se tienen.
El experto agregó que el tema de las donaciones es cuestionable, pues los donadores han recibido recursos del Estado a través de donaciones o de contratos.
En el caso del IGSS, opinó que también está relacionado al tema del empleo, pues hay muchas personas que no tienen acceso a seguridad social, debido a que integran en su mayoría el sector economía informal, por lo que se buscaría incluirlos dentro de los ingresos fiscales y de esta manera disminuir la economía informal.
UN PANORAMA SOMBRÍO
Zulma Calderón, jefa de Supervisión Hospitalaria de la Procuraduría de los Derechos Humanos de la (PDH), dijo que el tema económico es una limitante para que los pacientes puedan acceder a los servicios de salud privados.
“Lamentablemente en este país, y según todos los estudios que hay, el Ministerio de Salud a través de sus servicios llega alrededor de un 60 por ciento de la población de todo el país con los servicios de salud, recordando que de los servicios de salud –públicos–, solo hay 44 hospitales”, apuntó.
La delegada de la PDH, comentó que aunque se mantiene la gratuidad en el sistema de salud, se siguen manteniendo problemas serios, lo que violenta el derecho a la salud y vida.
Agregó que si bien 2015 fue un año complicado para la salud, 2016 se vislumbra aún más complicado: “Se ve el panorama mucho más sombrío”.
A criterio de Adrián Chávez, analista en salud del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos de Guatemala, cuando se habla de acceso a la salud también se refiere al aspecto geográfico, cultural y socioeconómico.
Chávez considera que el desgaste del sistema público también ha promovido que la población busque respuesta en el sistema privado.
“La demanda de servicios en el sector privado ha promovido un aumento en la oferta de servicios, lo que explica por qué en el 2012 se registraban 6,963 servicios privados de salud, mientras que la red de servicios públicos de salud se limitaba a 1,942 servicios”, agregó.
*Nombre modificado
En Cifras
Q5 mil 531 millones 691 mil 485 es el presupuesto designado para este año en el Ministerio de Salud.
63 por ciento de los hospitales presentan desabastecimiento de medicamentos.
7 mil 698 camas poseen los 44 hospitales del país.
117 hospitales privados están registrados.
23 hospitales con 2 mil 339 camas posee el IGSS.
“Es una situación difícil porque mi esposa puede tener algo serio y si lo dejamos al tiempo se puede complicar”.
PEDRO MUTZ“Eso de las consultas externas cerradas es un problemita que viene desde hace unos días. Nosotros, de verdad lo digo, estamos tratando por todos los medios de solventar los problemas que hemos tenido. Yo espero que en estos días regresen los médicos a atender la consulta”.
ALFONSO CABRERA“Nuestra estructura básica de salud está colapsada. El Estado no es capaz de dar el servicio. Entonces lo que debemos hacer es un tema de inversión, de financiamiento, de garantías en el sector de salud, así como en el sistema básico de atención primaria”.
RONALTH OCHAETA“Lamentablemente en este país, y según todos los estudios que hay, el Ministerio de Salud a través de sus servicios llega alrededor de un 60 por ciento de la población de todo el país con los servicios de salud, recordando que de los servicios de salud –públicos-, solo hay 44 hospitales”.
ZULMA CALDERÓN PDH
