POR VIRGINIA CONTRERAS
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En la conmemoración del Día Mundial de la Lucha contra el Sida, Zulma Calderón, jefa de la Unidad de Supervisión Hospitalaria de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) indicó que según el Centro Nacional de Epidemiología (CNE) del Ministerio de Salud Pública, de enero a septiembre de 2015 se registran 1,108 casos de contagio del virus de la inmunodeficiencia humana.
De esos registros, 467 son casos de VIH avanzado, que representan el 42 por ciento del total.
La funcionaria señaló que de los casos registrados por el CNE, 349 corresponden al género femenino (31.50%) y 759 al masculino (68.50%) y añadió que aunque el país ha avanzado considerablemente en brindar servicios de prevención y tratamiento relacionados con el tema, persisten aun grandes desafíos para llegar al control de la epidemia.
Tal como la situación suscitada en semanas anteriores, en donde la coalición de organizaciones que apoyan a personas con VIH en el país, denunciaron el desabastecimiento de antirretrovirales en el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), lo que perjudicaba el tratamiento de al menos 3 mil 554 personas.
En esa ocasión se evidenció que se encontraban 158 denuncias en la PDH, dado que por 33 días los portadores no habían podido continuar con su dosis recomendada y la ausencia de ello incidió en el incremento o desarrollo de infecciones, oportunistas y falla virológica en los pacientes.
Un reporte de la PDH basado en las supervisiones y monitoreos realizados por esa entidad, detectó un desfinanciamiento del 95% de las unidades ejecutoras (hospitales y direcciones del área de salud), las que operaban con un presupuesto menor al asignado en 2014, lo que ha generado deficiencia en los tres niveles de atención: puestos de salud, centros de salud y hospitales.
En tanto Ricardo García, del Sistema de Naciones Unidas en Guatemala (ONUSIDA) dijo el número de infecciones nuevas ha disminuido en un 35% en comparación de las cifras del comienzo de la época de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM).
Sin embargo, resaltó que si se redoblan e incrementan los esfuerzos en materia de intervenciones orientadas a que la mayoría de las personas que viven con VIH a nivel mundial conozcan su diagnóstico y tengan acceso a tratamiento y además se logra que al 2020 los esfuerzos financieros y el incremento de recursos, se podrá controlar completamente la epidemia para el año 2030.
Indicó que a nivel mundial se ha estabilizado el crecimiento de la epidemia y añadió que el número de muertes se ha reducido en un 40%.
“Se puede ser optimista, pero no ser exageradamente optimista, ya que el hecho de la situación y la crisis fiscal que vive el sector salud en Guatemala es realmente preocupante y lo que se espera para el 2016 es la incertidumbre del presupuesto que se asigne a la respuesta nacional al VIH”, acotó.
