POR VIRGINIA CONTRERAS
vcontreras@lahora.com.gt

El Hospital General San Juan de Dios (HGSJD) es el centro asistencial más importante de Guatemala. Aunque en las últimas décadas la calidad del servicio ha decaído debido a la falta de recursos, actualmente atraviesa una de las peores crisis de desabastecimiento de medicamentos, insumos y alimentos; además faltan recursos para garantizar el pago a los trabajadores. Esta situación es causada por los históricos malos manejos de recursos públicos en el Estado y principalmente por la corrupción, pero la pagan los guatemaltecos con su salud o la vida.

Julia Eugenia Martínez, una mujer de la tercera edad, batalló contra el cáncer durante muchos años y finalmente lo venció. Sin embargo, los doctores no descartan la posibilidad de que la pesadilla regrese a su vida, por lo que cada dos meses visita el hospital para mantener un control sobre su estado de salud.

Hace dos años que Eugenia es paciente de ese nosocomio, y dice ser testigo de cómo la crisis que azota a todo el sistema de Salud pone cada vez más en riesgo la vida de los pacientes, incluyendo la propia.

“Nos afecta demasiado porque a veces no hay radioactivos para los exámenes de laboratorio y hacérnoslos en la calle es carísimo. Cuestan Q1 mil 100, entonces nos cuesta bastante. Además, las compañeras tienen a veces que estar comprando su quimioterapia, que casi cuesta Q400 y viene gente de los departamentos. No hay producto, ni medicina, por lo que nos vemos en un callejón sin salida por ese problema”, expresó.

Eugenia destacó la labor de los profesionales en medicina que sufren junto a los pacientes la falta de recursos en los hospitales. “Los doctores y las enfermeras hacen lo posible en la sala de espera. La comida también escasea, pero pese a ello, el personal del nosocomio hace lo posible por brindarnos un buen servicio; sin importar la crisis”, indicó.

Detrás de la crisis financiera que asola a los hospitales del sistema de Salud Pública hay un drama humano, que golpea a los guatemaltecos más pobres y cuyas vidas se encuentran en riesgo ante la falta de una gestión eficiente de los hospitales y centros de salud.

TRABAJAR SIN INSUMOS

La Hora también recogió los testimonios de los médicos que atienden el área de la consulta externa del San Juan de Dios para entender cómo se puede velar por la salud de los pacientes con las limitantes que existen en ese nosocomio.

Lissette Aguilar, del Departamento de Cirugía, respondió que sin un presupuesto justo, suficiente y digno es casi imposible brindar a los pacientes una atención completa.

La facultativa señaló que su papel y el de sus colegas gira en torno a cuidar la salud de los pacientes y en tal sentido “el Ministro solo debe proporcionar los insumos para trabajar” y así asegurar las condiciones para cumplir con su labor.

En tanto, Jaime Cáceres, portavoz de la Junta Directiva de Médicos del HGSJD, manifestó que los profesionales de la salud hacen todo lo que está en sus manos para cuidar de la vida de los pacientes. Sin embargo, en muchas ocasiones ésta se pone en riesgo por la falta de recursos.

Cáceres detalló que el equipo médico quirúrgico que utilizan diariamente se encuentra en pésimas condiciones, no hay ropa adecuada para los pacientes, los aspiradores no funcionan, el lugar que debe utilizarse para la higiene está en malas condiciones y los elevadores no funcionan bien, lo que perjudica el traslado de los pacientes en las camillas de un piso a otro.

La crisis que se vive en el centro asistencial se viene dando desde hace algunos años, pero se agudizó el presente año y ya cobró la vida de pacientes; entre ellos la de Juana Tut, de 79 años, un caso suscitado en el mes de junio, en donde se indicó que el deceso se debió a una hemorragia cerebral producida por una crisis hipertensiva.

Un día antes del fallecimiento de Tut, la Asamblea Permanente de Médicos de ese nosocomio suspendió los servicios de atención, debido al desabastecimiento de medicinas con la finalidad de ejercer presión para que así, las autoridades de Salud Pública agilizaran los pagos a proveedores.

Por este caso, el entonces ministro de Salud, Luis Monterroso, interpuso una denuncia en el MP en contra del Director, la Junta Directiva y la Asamblea de Médicos del Hospital por homicidio culposo, incumplimiento de deberes y abuso de autoridad. En esa ocasión, Monterroso explicó que el protocolo de atención de la emergencia no se cumplió.

En su defensa, la doctora Aguilar mencionó que la señora Juana Tut necesitaba tratamiento hospitalario con medicamento intravenoso, mismo que en ese momento no se encontraba en existencia y el cual se había solicitado en Guatecompras con cuatro meses de anticipación.

DEUDA MILLONARIA

El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) estima que el Hospital necesita Q228 millones anualmente para funcionar, pero los recursos no han llegado al nosocomio. Aunado a ello, el nosocomio tiene una deuda de Q97.8 millones con sus proveedores.

El director del Hospital General, Julio Figueroa, señaló que la crisis que vive el centro de salud está despojando a la población de un derecho vital. Señaló que cualquier crisis financiera que exista dentro del MSPAS repercutirá en el nivel de abastecimiento que tienen los hospitales y, por lo tanto, en la atención de los pacientes.

“Eso precisamente es lo que ha estado sucediendo, pues parte de los gastos en los que se incurre por la atención, se están trasladando a los pacientes y en un momento determinado puede poner en riesgo la vida de los pacientes al no tener insumos necesarios para la atención”, dijo.

Agregó que la crisis es una situación permanente en el hospital y aunque en cada ocasión se denunció el desabastecimiento, las autoridades no respondieron.

Figueroa señaló que el agravamiento de la crisis se derivó luego de que la administración anterior dejó sin registrar la deuda en la que incurrieron los hospitales el año pasado. “Al no haberse registrado esta deuda a nivel del Sistema Contable de Finanzas, se trasladó hacia el presupuesto de este año; entonces, prácticamente hemos estado funcionando con el presupuesto de este año y pagando la deuda del año pasado, y de años anteriores. Esto ha repercutido enormemente en los niveles de abastecimiento”, acotó.

PACIENTES ATENDIDOS

No obstante, estas dificultades están presentes en los 44 hospitales que se encuentran a nivel nacional, esto no ha impedido que continúen su labor, según lo evidenciado por datos oficiales del Ministerio de Salud.

Estadísticas del MSPAS refieren que de enero a septiembre del presente año, 1 millón 798 mil 464 personas han sido atendidas en el área de la consulta externa y 1 millón 424 mil 763 en Emergencia, en toda la red hospitalaria.

Asimismo, señalan que dentro de las principales causas de morbilidad hospitalaria se encuentran: Infección de vías urinarias, rinofaringitis aguda, resfriado común, diarrea y gastroenteritis de presunto origen infeccioso. Además, diabetes mellitus, gastritis, hipertensión esencial, amigdalitis aguda y fractura de región no especificada del cuerpo.

Lo que es imposible determinar es la calidad del servicio que han recibido esos pacientes.

COSTOS ALTOS

Personas de escasos recursos se ven obligadas a recurrir a los hospitales públicos, debido a que los centros hospitalarios privados son inaccesibles para su bolsillo. En un centro privado, una radiografía está valorada en Q200, un ultrasonido en Q250, una resonancia magnética a un precio de Q2 mil y un electrocardiograma en Q150.

En tal sentido, Erick Villatoro, paciente de oncología, expresó que personas de escasos recursos como él, se ven afectados directamente debido a que al momento de ser atendido, los médicos le han manifestado que carecen de lo necesario para su consulta.

“Me ha pasado que en varias ocasiones que debo conseguir el equipo, ya sea para una cirugía menor, que incluye hasta la bata y entiendo que no es porque no lo quieran dar, sino porque en realidad no hay insumos en el hospital”, explicó.

Además, Villatoro, una persona de la tercera edad, indicó que padece de cáncer en los huesos y por esa condición invierte al menos Q150 diarios en medicinas y que su misma condición no le permite desempeñarse en algún empleo, por lo que se ve obligado a ser atendido en los hospitales públicos.

SITUACIÓN PREOCUPA A LA PDH

El magistrado de conciencia, Jorge de León Duque, mostró su preocupación por el traslado de fondos que las autoridades del Ministerio de Salud están realizando en pagos para beneficio de la red hospitalaria, indicando que pese a que se ha manifestado que no hay recursos en el Estado, la salud debe ser una prioridad.

“La vida y el que los pacientes puedan ser atendidos con dignidad debe ser una prioridad y por eso se debe pedir y exigir al Estado que haga todos los esfuerzos para que los desembolsos, no solo lleguen sino en tiempo, que es lo necesario e indispensable en estos momentos”, explicó.

El Procurador también instó a las autoridades a conseguir los fondos que se necesitan para paliar la crisis y para ello señaló que podrían ser recortados los recursos de otras entidades y así poder encontrar una solución al problema.

De León Duque desestimó la idea de privatizar la salud, en primer lugar porque recalcó que esta es una responsabilidad del Estado. Asimismo, mencionó que si la situación se agravó es porque no ha existido transparencia y falta de prioridades.

Ese mismo día, las autoridades de Salud recibieron una donación de medicamentos valorados en Q1 millón de parte de la Fundación Castillo Córdova, los cuales serán distribuidos en el menor tiempo posible para solventar la crisis en la red hospitalaria nacional.

Por otro lado, los médicos del Hospital General han ideado la implementación de patronatos y fundaciones para obtener recursos y brindar los servicios en ese nosocomio.

PATRONATOS Y FUNDACIONES

En una conferencia de prensa la semana pasada, médicos del Hospital San Juan de Dios, a través de su vocero Jaime Cáceres, expresaron su inquietud sobre la reactivación de patronatos y señalaron que unos días atrás en una reunión con el presidente Maldonado Aguirre, expusieron que de esta manera se podrían recuperar costos para efectuarles los estudios necesarios a los pacientes.

Al respecto, Mariano Rayo, titular de esa cartera, no descartó evaluar y considerar la reactivación de esas entidades para resolver momentáneamente la crisis provocada por la falta de insumos y medicinas en los principales hospitales del país.


De acuerdo al Ministerio de Salud los siguientes son los 10 medicamentos más utilizados en la red hospitalaria.

Acetaminofén (Paracetamol) 500 mg Tableta
Ampicilina 1 g Vial
Ampicilina + Sulbactam Sódica 1 g + 0.5 g Vial
Atropina Sulfato 0.5mg/1mL Ampolla
Ceftriaxona 1 g Vial
Ciprofloxacina 200mg/100mL Vial
Clindamicina Fosfato 150mg/1mL Ampolla
Dexametasona 8mg Ampolla
Dexketoprofeno (trometamol) 50mg/2ml Ampolla
Diclofenaco Sódico 25mg/1mL Ampolla

 Cáceres detalló que el equipo médico quirúrgico que utilizan diariamente se encuentra en pésimas condiciones, no hay ropa adecuada para los pacientes, los aspiradores no funcionan, el lugar que debe utilizarse para la higiene está en malas condiciones y los elevadores no funcionan bien, lo que perjudica el traslado de los pacientes en las camillas de un piso a otro.

Artículo anteriorTurquía derriba avión de combate ruso por invadir espacio aéreo
Artículo siguienteJUSTICIA