POR CLAUDIA PALACIOS
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Blanca Stalling regresó a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) tras dos meses y medio de ausencia. La togada dijo que se inhibirá de conocer los casos de corrupción en los que están involucrados sus familiares, pero aseguró que no renunciará a su nombramiento, como lo han pedido varios sectores de la sociedad civil.

“Renunciar no está en mi agenda”, dijo Stalling a la prensa, tras meses de no brindar declaraciones.

La magistrada volvió al Organismo Judicial con la intención de regresar a la Presidencia de la Cámara Penal, pero dejó en manos de sus homólogos la decisión sobre si retomará sus funciones o deberá continuar separada del cargo, mientras el Ministerio Público (MP) presenta el acto conclusivo contra Otto Fernando Molina Stalling, su hijo.

“Consciente de mi responsabilidad como funcionaria y en aras de la transparencia, en aras de la responsabilidad social que tengo, por la ética profesional que siempre he procurado mantener, decidí retirarme estos aproximadamente tres meses; pero a la presente fecha considero que también yo fui nombrada para ejercer una función y que la carga de trabajo en la Cámara Penal es sumamente fuerte”, dijo la magistrada, quien señaló que su ausencia ha significado una recarga de trabajo sobre los magistrados que han debido suplirla.

Stalling se alejó de su cargo, luego de que sus familiares fueran señalados por dos casos de corrupción.

De acuerdo con las investigaciones del MP y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), el hijo de la magistrada coordinó un fraude por Q116 millones al Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), a través de un contrato anómalo con la droguería Pisa.

La togada indicó que por ley, debe inhibirse de conocer cualquier acción relacionada al proceso contra su hijo.

Así mismo, Stalling dijo que no podrá conocer las acciones vinculadas al caso La Línea, por el que enfrenta antejuicio su cuñada, la jueza octava de instancia penal, Marta Sierra de Stalling, acusada de brindar beneficios a los cabecillas de la red de defraudación aduanera, a cambio de un soborno millonario.

Cuestionada sobre los señalamientos en su contra, luego de que su nombre fuera mencionado por uno de los integrantes del caso “Bufete de la Impunidad”, conexo a La Línea, Stalling reiteró que es inocente y pidió al comisionado Iván Velázquez y a la fiscal general Thelma Aldana, que informen públicamente sobre alguna investigación en su contra.

“Es bueno que ellos se pronuncien al respecto, para evitar la desconfianza”, dijo Stalling.

El pleno de la CSJ deberá determinar el futuro de Stalling el próximo miércoles.

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