Por Redacción La Hora *
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Rudy Villeda fue nombrado como titular de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) el 14 de agosto de 2008, por el presidente Álvaro Colom, en sustitución de Carolina Roca.

Villeda estaba entre los tres aspirantes a ser electos por Colom, así como Carlos Muñoz, quien posteriormente sería titular de la SAT en el gobierno de Otto Pérez Molina y María Ávila.

El exsuperintendente dejó el cargo en la entidad en febrero de 2012, donde estuvo “tres años, seis meses con quince días”.

Al término de su gestión en 2012 Villeda indicó “Entré por la puerta grande y salgo por la puerta grande”.

Este viernes el extitular de la SAT fue capturado junto a otras cinco personas por haber autorizado la exoneración de impuestos a las entidades WISA S.A. de Panamá y Tiendas Libres de Guatemala (TLG) -representantes de la cadena de tiendas La Riviera.

“CAPTURA SALPICA A LA UNE”

Sobre la captura de Rudy Villeda, por su presunta implicación en la exoneración de impuestos a tiendas en el Aeropuerto Internacional La Aurora, Hugo Maúl, del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), considera que este escándalo salpica a toda la estructura de la UNE y su gobierno, porque son estructuras que ciertamente se instalaron dentro de la SAT en gobiernos anteriores pero no se encararon lo suficiente como para establecer nexos claros e influencia en el nombramiento de Villeda, sobre todo por tratarse de un allegado del expresidente Colom.

“Esto levanta incluso serias dudas sobre la implicación del expresidente Colom en este esquema de corrupción. Desde Abadío ha venido dándose el debilitamiento de la SAT y se ha querido combatir con leyes anticorrupción pero no funcionan porque el problema es de carácter sistémico porque con las reformas a la ley orgánica, se le ha dado más poder de discrecionalidad a la SAT con la excusa de alcanzar mayores niveles de recaudación”, agregó el entrevistado.

Por su parte, sobre el nombramiento de Villeda al frente de la SAT en el gobierno de la UNE, el analista económico independiente Carlos Martínez opinó que tanto en el esquema de depuración de candidatos como la designación final de los Superintendentes de Administración Tributaria, predomina el carácter político de tal manera que cuando ocupan el cargo, se ven influenciados en sus decisiones al igual que el Directorio, por intereses políticos y sectoriales.

Asimismo, mencionó que aunque quienes se postulan para ocupar ese puesto reúnan en su momento algunas características técnicas, los demás criterios de selección como la independencia y la idoneidad “brillan por su ausencia”, escenario que ha permitido que la SAT se convierta en un “ente perverso” en donde los superintendentes y otros funcionarios se involucran en actividades ilegales.

“Esto empezó a profundizarse en el gobierno de Alfonso Portillo y ahora vemos las consecuencias. No hay gobierno que no esté manchado en este tema y todas las fuerzas políticas tarde o temprano, van a pagar la factura. Así fue como se dio la relación de Villeda con la UNE y ahora no solo desprestigia a su candidata presidencial, sino que abre la puerta para más denuncias sobre otros funcionarios de ese gobierno”, exclamó Martínez.

A Maúl le preocupa que la credibilidad de la SAT cada vez está más “por los suelos” y hace énfasis en la necesidad de que en el próximo gobierno se promueva un proceso serio de reforma a la ley orgánica de la entidad “porque sin una SAT reformada no se puede hablar de una reforma tributaria para mejorar la recaudación”.

*Con información de Manuel Rodríguez

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