Los cuatro integrantes fueron condenados. Foto: La Hora/Oscar Canel

Cuatro integrantes de una banda que robaba animales de corral decidieron quitar la vida a una de sus víctimas para evitar que los denunciara, pero en el ataque armado también dieron muerte a una bebé, de apenas 11 meses de edad. Confirmados los hechos, ocurridos hace dos años, hoy los culpables, dos hombres y dos mujeres fueron condenados este lunes a 60 años de prisión.

“Este Tribunal por unanimidad declara que Marco Tulio Gil Salvador, María Soledad Hernández Taque, Yolanda de Jesús Hernández Taque y Erwin Misael Valdés Ascón son autores responsables del delito de asesinato cometido contra una niña de 11 meses y su progenitora Tomasa de Jesús Taque Hernández”, por tal motivo se les impuso una pena de 60 años de prisión inconmutable, reza la sentencia del Tribunal Octavo de Sentencia.

AGRAVANTES

El Tribunal explicó que el Ministerio Público (MP) al emitir sus conclusiones indicó que se habían dado dos agravantes en este caso.

La primera: “Se da la cuadrilla cuando concurren en la comisión del delito más de tres personas armadas y en el presente caso, según lo narrado por una testigo, había tres personas reunidas pero solo dos armas de fuego”, se indica en la resolución

El segundo agravante es el menosprecio al ofendido, que se refiere a ejecutar el hecho con desprecio de la edad avanzada o de la niñez, del sexo, de la enfermedad o la condición de incapacidad física o penuria económica del ofendido, según la naturaleza y accidentes del hecho. En criterio del Tribunal sí se cumplió este aspecto porque la menor al momento en que sucedieron los hechos tenía apenas 11 meses de edad y porque la segunda víctima era de sexo femenino.

UNA VÍCTIMA COLATERAL

Cabe señalar que durante la investigación, la Fiscalía estableció que se trataba de un ataque directo contra Tomasa de Jesús Taque Hernández; sin embargo, el día del ataque armado llevaba a su hija en brazos, dando lugar a que la menor falleciera como víctima colateral.

¿QUÉ MOTIVÓ EL ATAQUE?

Según la investigación del MP los sindicados “se dedicaban al robo de animales de corral en Palencia y la madre de la menor era víctima de estas personas por lo que pretendía denunciarlos por los constantes robos”.

El ataque armado ocurrió el 30 de marzo de 2020 en la aldea Sansur, Palencia. En el hecho, la bebé recibió disparos, pero debido a la gravedad de las heridas, perdió la vida en el lugar. La madre, en estado crítico, fue trasladada a un centro asistencial, en donde falleció un mes después.

El pasado 30 de marzo, exactamente dos años después del crimen, el MP solicitó una pena de 70 años de prisión contra los sindicados, no obstante, los jueces impusieron una sentencia de 10 años menos.

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