El presidente de la República, Bernardo Arévalo, reiteró este 1 de septiembre que anteriormente el Ejército de Guatemala «estaba al servicio de los políticos de turno».
Lo anterior lo manifestó el mandatario durante su discurso en el acto protocolario del 151 aniversario de la Escuela Politécnica y el Día del Cadete.
El mandatario resaltó que hicieron un “análisis minucioso” de la institución castrense, en el cual detectaron algunas «flaquezas críticas que era necesario enfrentar para avanzar en la consolidación de una institucionalidad al servicio de un Estado democrático».
“Entre esas debilidades se encuentran las prácticas que ponen a la institución al servicio de políticos de turno y de otros actores poco transparentes e incluso criminales”, expresó.
Agregó que también identificaron que se otorgaban ascensos de grado, especialmente los de general o asignación de puestos de responsabilidad, a partir de compadrazgos y componendas políticas.
“Por esa razón he sido enfático en la necesidad de corregir esas prácticas dentro de la institución. El Ejército no es botín de nadie, ya que le pertenece al pueblo de Guatemala”, manifestó.
ÓRDENES
En ese sentido, el gobernante exigió y ordenó a todo el personal militar que se abstuviera de asociarse a personas o grupos cuyos intereses o comportamientos contravengan u obstaculicen el desarrollo del marco de valores profesionales, principios institucionales meritocráticos y democráticos que profesa la institución castrense.
CAMBIOS
“Hoy a 8 meses de haber tomado posesión como Presidente y comandante general, puedo decirles con toda solvencia, y gracias al trabajo realizado en conjunto con el mando del Ejército, que hemos retomado la apoliticidad como principio rector de la institucionalidad del Ejército”, indicó.
Dijo también que los oficiales en su gobierno, fueron minuciosamente seleccionados, tomando en cuenta indicadores meritocráticos necesarios para ocupar los puestos.
Entre ellos mencionó la trayectoria profesional, valores éticos y morales, perfil académico, el compromiso con los principios democráticos de la Constitución, así como la probidad demostrada a lo largo de su vida particular y profesional.
“Seguiremos en este camino. Guatemala se merece tener a un Ejército digno, transparente, donde sus integrantes estén dispuestos a rendir cuentas de sus actos y acciones, que crean en la meritocracia como único camino para hacerse merecedores de las más altas distinciones militares, donde la dignidad y valores manifiestos deben ser expresados en cada uno de los puestos que desempeñan de acuerdo a la línea jerárquica establecida en leyes y reglamentos militares”, subrayó.
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CELEBRACIÓN
Durante el acto de aniversario que se realizó en la Escuela Politécnica, ubicada en el kilómetro 36.5 en San Juan, Sacatepéquez, el presidente también hizo entrega de un espadín a 65 hombres y 10 mujeres que conforman la promoción 166 de Caballeros y Damas Cadetes.
Ese centro de estudios fue fundado en 1873 y es el encargado de formar a futuros oficiales de carrera del Ejército de Guatemala.
Arévalo dijo que las academias militares están ligadas a la evolución de los países y la sociedad, que empieza con la modernización.
Por otra parte, José Martínez, director de la escuela, dijo que los estudiantes son preparados profesionalmente como líderes al servicio del pueblo de Guatemala.
