Carlos Álvarez de Alba, representante de la empresa mexicana Remed S.A.. Foto La Hora/Captura de pantalla Imagen Radio/Facebook

El Grupo Parlamentario de Oposición (GPO) denunció que supuestamente Carlos Álvarez de Alba, representante de la empresa mexicana Remed S.A., no registró su ingreso o salida de Guatemala para firmar el contrato con la Compañía Desarrolladora Ferrovías, para el proyecto “Ferrocarril Bicentenario”.

Según los legisladores, solicitaron un informe migratorio de Álvarez de Alba entre el 1 de enero y el 1 de marzo, pero Migración respondió que no le aparecen movimientos de entrada y salida “vía aérea, terrestre y marítima en el periodo de fecha indicado”, como consta en hoja adjunta.

En la cuenta de Twitter del GPO publicaron la respuesta del Instituto Guatemalteco de Migración, indicando que esta situación deja entrever otra ilegalidad en la concertación del contrato para el proyecto ferroviario.

“OTRA ILEGALIDAD EN EL NEGOCIO DEL TREN BICENTENARIO. Ahora resulta que al mexicano CARLOS ÁLVAREZ DE ALBA de Remed, no le aparecen movimientos migratorios de entrada y salida del país. Eso quiere decir que entró ilegalmente a Guatemala a firmar el contrato con Ferrovías”, indicaron.

 

¿CUÁNDO SE FIRMÓ?

El contrato se firmó el 14 de enero de 2022, dos días después de la Asamblea General Extraordinaria de Accionistas de Ferrovías, en la cual el Estado de Guatemala con el 81.1% de las acciones de la compañía se aprobó el proyecto.

La firma estuvo a cargo del administrador Único de Ferrovías, José Fernando Ulloa Rosenberg y el representante legal de Remed, Carlos Álvarez de Alba; en presencia del entonces ministro de Economía, Antonio Malouf y el titular de Comunicaciones, Javier Maldonado, así como el Interventor de Ferrocarriles de Guatemala, Augusto Ponce, sin la presencia de medios de comunicación.

La firma del contrato se realizó el 14 de enero de 2022. Foto La Hora

CONTRATO BAJO CUESTIONAMIENTOS

La suscripción se llevó a cabo pese a cuestionamientos de la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) por considerar que, al tratarse de bienes del Estado, debía convocarse a una licitación pública.

También el presidente de la Comisión de Integración Regional del Congreso, diputado Luis Pineda, ha dado seguimiento a las negociaciones con Remed S.A., las cuales señala de opacas por la poca transparencia en los detalles del proceso y el contenido del contrato.

Además, durante una citación en el Congreso, pese a que el Estado de Guatemala tiene el 81.1% de las acciones de Ferrovías, según el diputado Orlando Blanco, integrante del GPO, ésta se negó a proporcionar información sobre el contrato del “Ferrocarril Bicentenario”, firmado con la empresa mexicana argumentando una supuesta cláusula de confidencialidad.

Un mes después de la firma del contrato, Blanco anunció que la Contraloría General de Cuentas iniciaría un proceso de fiscalización del contrato entre Remed S.A. y Ferrovías.

En otra citación con el mismo Grupo de Oposición, el aún ministro Malouf reconoció haber sostenido reuniones con representantes de Ferrovías y la empresa mexicana en el bar Habanos de don Rodrigo.

 

ASPECTOS DEL CONTRATO

El contrato entre Ferrovías y Remed incluye la rehabilitación de casi 250 kilómetros de red ferroviaria en territorio guatemalteco que desembocan en México y la explotación de la línea de transporte.

La empresa deberá invertir varios millones de quetzales para el proyecto. Foto La Hora

La primera fase de la rehabilitación permitirá su operación por 26 años y tendrá una inversión por parte de la compañía mexicana por US$700 millones, según detalló el Gobierno el día que se anunció el contrato.

 

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