La Conferencia Episcopal de Guatemala (CEG), se pronunció a través de un comunicado para expresar su crítica a varios puntos reunidos en la destitución de Juan Francisco Sandoval al frente de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI), agregaron que esta acción representa un retroceso en la lucha por un eficiente combate a la corrupción e impunidad.
La CEG indicó que no hay nada más peligroso para la institucionalidad de Guatemala que haya mafias enquistadas en los órganos de Estado, “justicia pronta e imparcial y la investigación del crimen son garantes de la libertad y la democracia. Solo si la ley se acata y obedece con sentido moral, se puede interpretar y aplicar al servicio del bien común”, señalaron.
Además, la Conferencia señaló que el MP en los últimos años logró investigar hechos que anteriormente gozaban de total impunidad, para lo cual la FECI ha desempeñado un papel fundamental.
La Conferencia Episcopal de Guatemala también se pronuncia ante la destitución de Juan Francisco Sandoval. pic.twitter.com/mcBtOkT1ju
— Diario La Hora (@lahoragt) July 26, 2021
En el comunicado, la CEG indica que la destitución de Sandoval fue fulminante “según connotados hombres y mujeres de derecho, ha sido ilegal y arbitraria. Recogemos el clamor ciudadano al percibir que este hecho significa un evidente retroceso en la lucha por un eficiente combate a la corrupción e impunidad que tanto daño han hecho para el desarrollo integral del país”.
“Quienes se han alegrado ante la destitución es porque se sienten seguros y cómodos cuando el régimen de impunidad se consolida”, agregó la Conferencia Episcopal.
La CEG señaló que la destitución del ex fiscal Sandoval le ha hecho un daño irreparable al país. “Se ralentizan los importantes casos que llevaba, es enorme la pérdida de credibilidad del Ministerio Público, crecerá la indignación ciudadana, aumentarán las protestas sociales y el nivel de conflictividad, se complicara más el ya deficiente manejo de la pandemia y el tortuoso proceso de vacunación”.
El comunicado fue firmado por el presidente de la CEG y actual Arzobispo Metropolitano, Gonzalo de Villa y el secretario general, obispo de Jutiapa, Antonio Calderón Cruz.