FOTO ARCHIVO. Una adolescente fue asesinada frente a su bebé, el pasado 1 de diciembre.

POR MARIELA CASTAÑÓN
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De enero a noviembre de este año, han muerto violentamente 399 niñas, niños y adolescentes (NNA) en el país, mientras tanto, no existen mecanismos que protejan integralmente a la niñez, ni acciones para prevenir la violencia homicida, que más afecta a este sector de la población.

ZOILA, JUAN, JEIMY, ROSA Y JOSUÉ

Zoila Lucrecia Xec, de 11 años, fue asesinada con arma de fuego el pasado 13 de diciembre en una venta de refacciones en la zona 21, donde trabajaba, informaron los Bomberos Voluntarios.

El 1 de diciembre fue localizado en una fosa séptica en Retalhuleu, Juan David de León, de 7 años, tras ser reportado como desaparecido el 29 de noviembre en la subestación policial 42-95.

Por este hecho, los vecinos retuvieron y pusieron a disposición de la institución policial, a Randy Esaú Mendoza Castillo, de 25 años, a quien sindicaron de la muerte del niño.

El Instituto Nacional de Ciencias Forenses Inacif, informó que el cuerpo del menor de edad fue entregado a sus familiares y la causa de muerte fue asfixia por estrangulación.

Ese mismo día, fue asesinada Jeimy Julisa Medrano Medina, de 17 años, en Santa Catarina Pinula.

Los Bomberos Voluntarios y la Policía Nacional Civil (PNC) confirmaron que la adolescente fue atacada a disparos frente a su hijo, un bebé de aproximadamente un año y medio, que no fue afectado en el hecho de violencia.

El 27 de junio fue localizada muerta Rosa María Saquic, de 10 años, en Estanzuela, Joyabaj, Quiché. La niña estaba reportada como desaparecida, la última vez que sus familiares supieron de ella, fue cuando se negó a bailar con hombres adultos en una fiesta.

Por el crimen de Saquic, el 18 de julio fueron capturados Pedro Velásquez Xaper y Julián Lares Quino, por su presunta participación en la muerte. Las órdenes de captura fueron giradas por el delito de asesinato.

El 21 de mayo desapareció en Totonicapán Josué Elías Tax Canastuj, de 11 años, y por esa razón fue emitida una alerta Alba-Keneth.

Tres días después los restos de Josué fueron localizados en esa localidad. El pasado 29 de julio, el Instituto Nacional de Ciencias Forenses Inacif, confirmó por medio de un análisis de ADN y de estudios antropológicos, que los restos localizados correspondían al cuerpo del niño.

Por su parte, la Fundación Sobrevivientes, dio a conocer que Josué cursaba quinto primaria.

Estas muertes violentas son algunas de las que han ocurrido este año, ya que de acuerdo con Inacif, suman hasta el 30 de noviembre, 399 por diferentes causas: 259 por arma de fuego, 36 por arma blanca, 16 por asfixia por estrangulación y 88 por asfixia por suspensión que podría relacionarse con suicidios.

De acuerdo con la información oficial, de las 259 necropsias por arma de fuego a NNA, 212 fueron a niños y 47 a niñas. De las 36 con arma blanca, 19 fueron a niños y 17 a niñas. De los 16 casos de asfixia por estrangulación, 9 fueron a niños y 7 a niñas. De las 88 necropsias por asfixia por suspensión, 52 fueron a niños y 36 a niñas.

FOTO ARCHIVO. El Inacif ha cuantificado más de 300 muertes violentas de niñas, niños y adolescentes, en once meses.

ANÁLISIS DE LOS CASOS

Otto Rivera, secretario ejecutivo de la Coordinadora Institucional de Promoción por los Derechos de la Niñez (Ciprodeni) detalló que la mayoría de muertes con arma de fuego ocurren en contra de adolescentes y cuando se trata de niños más pequeños en edad es por balas perdidas.

Por otro lado, Rivera cuestionó la falta de control de las armas; también se refrió a las muertes por arma blanca y los casos que ocurrieron en Totonicapán y en Quiché.

“Lamentablemente esto sigue sin mayor control de parte de las autoridades y en este país es muy fácil –obtener un arma de fuego–. Aunque las muertes por arma blanca son menos, son más cruentas y quisiera referirme a los casos que vivimos este año, tres de ellos en Santa Cruz del Quiché, uno en Totonicapán y otro en Ciudad Quetzal”.

El Secretario Ejecutivo de Ciprodeni recordó el caso de Rosa María Saquic en Quiché y el de José Elías Tax Canastuj en Totonicapán.

El entrevistado reiteró que existen causas estructurales que no permiten que se garantice la seguridad y el derecho a la vida de la niñez y adolescencia, mientras tanto, los crímenes no se reducirán, sino hay una acción políticamente intencionada de parte de los gobiernos.

NO RESPONDEN

La Hora se comunicó con el viceministro de Prevención de la Violencia y el Delito, Axel Romero, así como con el portavoz del Ministerio de Gobernación, Fernando Lucero, para conocer las acciones que implementan para prevenir la violencia homicida y principalmente contra la niñez y adolescencia, pero al cierre de esta nota no se obtuvo respuesta.

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