A través de un comunicado, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), instó a los Estados de la región, en particular a Estados Unidos, México y Guatemala, a crear y ampliar canales regulares existentes, de modo que sean seguros, accesibles y asequibles para la migración internacional.
Lo anterior, aseguran que es derivado de la implementación de procedimientos acelerados de expulsión de personas en movilidad humana desde EE. UU. hacia las fronteras Norte y Sur de México y, luego, desde este último país hacia diferentes fronteras con Guatemala.
“Mientras no se adopten medidas para superar las causas estructurales que obligan a las personas a desplazarse de manera forzosa, los movimientos migratorios internacionales continuarán realizándose”, afirmaron.
En ese contexto, la Comisión reitera su llamado a implementar mecanismos de cooperación regional y responsabilidad compartida, así como a fortalecer los sistemas nacionales de asilo y protección, de modo que se adecúen a la realidad compleja de las dinámicas migratorias en la región para identificar adecuadamente necesidades de protección y brindar atención oportuna.
Por ello, la CIDH urge a todos los Estados involucrados a garantizar la protección efectiva de los derechos de las personas en movilidad humana; en particular, a fin de asegurar las garantías del debido proceso en todos los procedimientos que puedan tener como consecuencia la imposición de una medida de expulsión.
EL SEGUIMIENTO DE LA COMISIÓN AL FENÓMENO
En el pronunciamiento, la CIDH indicó que da seguimiento a la intensificación de los movimientos migratorios mixtos, principalmente en lo relativo al retorno de personas, y a los cambios en las dinámicas migratorias en Norte y Centroamérica.
“Se observa con preocupación la implementación de procedimientos acelerados de expulsión desde los Estados Unidos hacia las fronteras Norte y Sur de México. A su vez, México estaría expulsando a personas en situación migratoria irregular, incluyendo a quienes fueron expulsadas desde los Estados Unidos, hacia diferentes fronteras con Guatemala”
POLÍTICAS BUSCAN DISUADIR A MIGRANTES
La Comisión señala que, este tipo de políticas tiene como objetivo disuadir los desplazamientos de personas mediante la implementación de medidas que limitan el acceso al territorio de los Estados y a los procedimientos migratorios, de asilo o de protección.
La CIDH ha reiterado su preocupación por que dichas medidas, en conjunto con la falta de alternativas legales para la migración internacional, estarían obligando a que las personas en contexto de la movilidad humana, a buscar rutas más alejadas y menos transitadas para desplazarse por la región.
Y esto, aseguraron que aumenta el riesgo ser víctimas de delitos como la trata de personas y por ende de violaciones a sus derechos humanos.
LA REALIDAD QUE ENFRENTAN A VOLVER A SUS PAÍSES DE ORIGEN
Aseveran que cuando las personas son expulsadas o devueltas a sus países de origen o de residencia habitual, sin una determinación adecuada sobre posibles necesidades de protección internacional, se enfrentarían nuevamente a situaciones similares a las que las obligaron a salir de su país de origen.
En algunas ocasiones, explican que las personas retornadas no tendrían acceso a la protección suficiente que garantice su seguridad y reintegración en las comunidades de origen.
La CIDH advierte que los procedimientos acelerados de expulsión estarían ejecutándose sin evaluar posibles necesidades de protección, asegurar el acceso a procedimientos migratorios, de asilo o protección en el territorio de los Estados y sin aplicación de los protocolos sanitarios correspondientes para prevenir la propagación de contagios por COVID-19.
LOS RETORNOS A GT
De acuerdo con datos del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), entre el 22 de agosto y el 12 de septiembre, 6,360 personas fueron retornadas por el punto fronterizo de El Ceibo, principalmente migrantes de Honduras, Guatemala, El Salvador y Nicaragua.