Al menos 39 guatemaltecos fallecieron en el trágico accidente registrado hace un mes y un día en el choque de un camión que transportaba más de 160 migrantes en la carretera de Chiapas, México, en el que 56 personas perdieron la vida, según confirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex).
El número de víctimas mortales, sobrevivientes y personas repatriadas confirma que una gran cantidad de migrantes en el contenedor del camión provenían de Guatemala. La Cancillería indicó que hasta la fecha se ha corroborado el fallecimiento de 39 connacionales en el accidente.
Además, 19 personas han sido repatriadas hasta el momento, y el vicecanciller Eduardo Hernández, en declaraciones a Emisoras Unidas, indicó que la próxima semana prevén iniciar el retorno de los otros cuerpos a Guatemala.
En cuanto a personas heridas, se reportan 21 perfiles con estado de salud delicado; 10 en estado grave; y uno en situación muy grave. Las autoridades mexicanas habían informado que 104 guatemaltecos resultado lesionados.
55 FUERON ACOGIDOS EN MÉXICO
El Minex comunicó que 55 personas de nacionalidad guatemalteca obtuvieron una tarjeta de estadía mexicana, las que fueron otorgadas por razones humanitarias y quienes la poseen tienen derecho a realizar una actividad remunerada por un año en el territorio en donde fueron acogidos.
INVESTIGACIONES CONTINÚAN
El trabajo de las autoridades en el esclarecimiento de los hechos continúa. Por un lado, el Ministerio Público (MP) todavía no ha ubicado a las personas responsables, pero la Fiscalía contra el Tráfico Ilícito de Migrantes aseguró que se ha desplegado un equipo de fiscales e investigadores para determinar a los criminales, entre los cuales no se descarta a los “coyotes”.
En tanto, el Ministerio de Relaciones Exteriores describió que cada semana se están desarrollando reuniones de seguimiento con un grupo de acción inmediata.
También el viceministro Hernández comentó que la próxima semana viajarán a México para sostener una reunión con el canciller de ese país, Marcelo Ebrard, para dar continuidad a la propuesta guatemalteca de endurecer las penas contra los traficantes de personas y que Estados Unidos convierta en delito federal la trata de personas.
