A pesar de las restricciones, miles de guatemaltecos buscaron dejar el país y encontrar mejores oportunidades. Foto La Hora/AFP

El caso del ya confirmado guatemalteco, que voló desde Guatemala a Estados Unidos en el tren de aterrizaje de un avión, ha activado un debate en la comunidad guatemalteca, en el cual algunas personas cuestionan cuán difíciles son las condiciones en el país para emprender el viaje tan arriesgado.

Poco se conoce del connacional, supuestamente de 26 años y aunque su situación y sus motivaciones para emprender la peligrosa travesía deberán ser analizadas, a criterio de expertos en migración este caso refleja la necesidad eminente de muchos habitantes por buscar en otro lugar las condiciones que Guatemala no logra proveer a sus habitantes.

MORIR EN SU PAÍS O PROBAR SU SUERTE

Mauro Verzeletti, director de la Casa del Migrante, identificó, con base en su experiencia, que la mayoría de migrantes son motivados a emprender el viaje para buscar oportunidades laborales y de desarrollo. Verzeletti describió a Guatemala como un país donde aún prevalece la pobreza y desnutrición entre los problemas que aquejan a la población.

“La situación desde antes, durante y luego de la pandemia realmente es gravísima para la vida de las personas. Vemos la extrema pobreza y desnutrición, por eso vemos a personas que realizan esta aventura para salir de este contexto. Creo que allí tenemos bien claro que es o morir de hambre en su propio país o arriesgar la vida en el camino e intentar su suerte”, dictó.

En el caso particular del guatemalteco que llegó a Miami el 27 de noviembre, el líder de la Casa del Migrante describió que el hecho que se arriesgara en el tren de un avión “nos da la demostración que la situación es gravísima en nuestros países y que urgen acciones de corto, mediano y largo plazo”.

El análisis de Verzeletti cobra aún más sentido al conocer las situaciones bajo las cuales fue sometido el hombre: al menos 30 mil pies de altura, con temperaturas que descienden los -55°C y niveles de oxígeno entre el 1% y 5% (cuando el nivel regular en tierra es de casi el 80%); además de un aterrizaje de aproximadamente 240 kilómetros por hora.

 

EL ROSTRO DE LA MIGRACIÓN ES JOVEN

Los medios estadounidenses que han cubierto la noticia sostienen que el guatemalteco tiene 26 años. Verzeletti compartió que este año más de 4 mil personas han sido atendidas en la Casa del Migrante, la mayoría con edades entre los 18 y 30 años.

A este criterio se sumó Carlos Woltke, defensor de las personas migrantes en la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH), quien señaló que la tendencia de migración es mayor en el sexo masculino y la juventud. “Cuando se revisan las estadísticas, sobre todo las que realiza el Estado de Guatemala, vemos que el mayor grupo poblacional es de hombre jóvenes”, refirió.

Miles de guatemaltecos emprenden el riesgo de viajar hacia Estados Unidos incluso con sus hijos. Foto La Hora/AFP

LAS CIFRAS
Tanto para el defensor, como el Padre Verzeletti, este fenómeno obedece a la carencia de oportunidades laborales en Guatemala. “Justamente la población joven está migrando cada vez más desde nuestra región al Norte porque las oportunidades de trabajo y desarrollo humano son muy cortas para alcanzar una vida integral. Cada vez más estamos perdiendo a la fuerza productiva del país que está migrando hacia otros países”, dijo el director de la Casa del Migrante.
Los datos del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM) reflejan que hasta el 25 de noviembre de 2021 han sido retornados desde Estados Unidos 7,779 hombres mayores de edad y 1,536 menores de edad del sexo masculino.

La Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos (ENEI) más reciente fue publicada en 2020 con datos a mayo del 2019. Los resultados reflejaron que 12,005,359 personas estaban en edad para trabajar, pero solo 7,114,935 de estas personas eran económicamente activas.

Se estimaron 4,890,424 personas económicamente inactivas, pero, además del desempleo los analistas enfatizaron que las condiciones de empleo en Guatemala no siempre son adecuadas y/o satisfactorias para las necesidades de los habitantes; de hecho, la ENEI reflejó que 667,960 personas eran subempleadas visibles o por horas, representando el 9.7%.

 

Desde la variable de estudios completos se encontró que el 52% de la población desempleada eran hombres y el 51% mujeres.

“Sobre todo en pandemia se redujo la bolsa laboral en muchos lugares y empresas; esto originó que haya más gente desempleada aunada a la cantidad de jóvenes que salen cada año del sistema educativo y que ya podrían integrarse al campo laboral. Vemos que no hay posibilidades de hacerlo inmediatamente”, comentó el defensor de la PDH.

OTROS FACTORES QUE CONDICIONAN LA MIGRACIÓN

Además de lo anteriormente expuesto, Mauro Verzeletti opinó que aún con un empleo el salario mínimo en Guatemala es insuficiente para cubrir los gastos de una digna para los habitantes. Para actividades no agrícolas el salario mínimo total es de Q3,075.10; para agrícolas Q2,992.37; y para exportadora y maquila es de Q.2,831.77.

Mauro Verzeletti, director de la Casa del Migrante dio su punto de vista de lo sucedido. Foto La Hora

Por otro lado, el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) estimado al mes de octubre fue de Q3,055.09, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).

“Se necesita salario mínimo digno para que las personas puedan permanecer en su propio país, que los salarios sean suficientes para una canasta básica y que puedan tener estabilidad laboral; además de políticas públicas donde los programas sociales lleguen a las personas más necesitadas”, sugirió Verzeletti.

Carlos Woltke resaltó que el discurso de las autoridades gubernamentales muchas veces destaca a las remesas como un pilar importante en la economía guatemalteca, un factor que, en su opinión, también incentiva a las personas a migrar.

“Está en el discurso de las autoridades el incremento de las remesas (…) y eso es una invitación para muchas personas a ir a Estados Unidos como una opción, ya que aquí no se encuentran las condiciones”, razonó.

Para el funcionario, a pesar que se ha hablado sobre el crecimiento de la economía a nivel nacional, todavía existe un contrastante de pobreza y desigualdad. “Se habla de un aumento en la economía del país, pero eso solo se refleja en las empresas o niveles más altos; en los niveles más bajos sabemos que el nivel de pobreza se sigue ampliando y esto lo que hace ver es este gran abismo que hay entre las diferentes clases sociales”, agregó.

Además, un tercer factor descrito por el defensor es la violencia que existe en Guatemala desde sus distintas manifestaciones, como el crimen organizado, pandillas y la violencia política.

 

UN FUTURO INCIERTO PARA LOS RETORNADOS

“El futuro es el mismo que en el momento en que decidieron salir”, concretó Carlos Woltke. Todavía se desconoce lo que le deparará al connacional que, por ahora, es atendido en Miami, Florida.

Según informó el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex) el hombre llevará un proceso legal migratorio y las autoridades estadounidenses decidirán si otorgarle el asilo o refugio o si unirse al registro de los más de 14,230 guatemaltecos deportados en 2021.

Jeanelly Vásquez
Periodista profesional de la USAC, actualmente cursando la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación. Becaria en International Women’s Media Foundation (IWMF). Elabora piezas de investigación y profundidad, enfocadas en el gasto público, derechos humanos y la política guatemalteca. Tiene experiencia en producción de podcast y contenido en redes sociales; ha cubierto la fuente volante y el Organismo Ejecutivo. Twitter: @jeanellydvg
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