Han pasado casi dos meses desde que ingresó el segundo cargamento de vacunas Pfizer/BioNTech a Guatemala, la única aprobada en el país para inmunizar a menores entre 12 y 17 años. Con menos de 200,000 dosis disponibles, según el reporte oficial del Ministerio de Salud, pero que no han sido distribuidas a los centros de vacunación, la población continúa a la espera de un nuevo ingreso anunciado desde el 15 de octubre.
#PORTADADEHOY
Quedan solo 200 mil dosis disponibles para menores ?? [https://t.co/VhKNlpklYi] pic.twitter.com/vRyRvl3Lr9— Diario La Hora (@lahoragt) November 4, 2021
Hasta el 2 de noviembre casi el 90% de este grupo etario continúa a la espera de recibir al menos una dosis.
Esta carencia de unidades es considerada por expertos como una consecuencia de la mala planificación del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), sumado a la falta de información y respuesta a la población. Ahora el reto de la cartera será responder las dudas de la población y ofrecer garantías para inmunizar a la juventud.
MENOS DE 200,000 DOSIS RESTANTES
Guatemala ha recibido únicamente dos cargamentos de Pfizer/BioNTech, uno el 5 de agosto de 2021 a través del Fondo de Acceso Global para Vacunas COVID-19 (Covax, por sus siglas en inglés) y otro el 2 de septiembre de este año.
Hasta el 2 de noviembre de 2021 el Tablero COVID-19 reporta que 416,290 personas han sido vacunadas con al menos una dosis de Pfizer/BioNTech:
Tomando como base los datos anteriores, se puede concluir que del total de dosis adquiridas (533,520) solo quedan 117,230 unidades de esta vacuna, aunque ello puede cambiar con las actualizaciones diarias del Ministerio de Salud.
NO HUBO PREVISIÓN EN ESTA FASE DE VACUNACIÓN
Estos datos son congruentes con el reporte de la defensora de la salud, Zulma Calderón, quien informó que el 3 de noviembre -ayer- se disponía de alrededor de 200,000 vacunas en el Centro Nacional de Biológicos (CNB).
Para la funcionaria este desabastecimiento de vacunas es atribuido principalmente a una planificación deficiente al iniciar la fase para menores entre los 12 y 17 años. “El Ministerio de Salud, como ente rector, no previó y no presentó una programación específica y detallada, acompañada de una planificación de niños y adolescentes que se tenían que vacunar”, señaló.
Sumado a lo expuesto por Calderón, en un principio las autoridades del Ministerio de Salud indicaron que solo se vacunaría a menores de edad con comorbilidades; sin embargo, desde el primer día se inmunizó a cualquier adolescente en ese rango de edad.
VACUNAS NO FUERON PRIORIZADAS EN ADOLESCENTES
Por otro lado, la defensora de la salud describió que, a sabiendas que la vacuna Pfizer era la única avalada para este grupo etario, se debió guardar las dosis exclusivamente para los jóvenes; no obstante, antes del 1 de octubre, fecha en que inició la vacunación de menores, ya habían sido aplicadas 176,256 dosis de Pfizer.
Lo anterior contribuyó en que, hasta el 2 de noviembre de este año, 216,650 jóvenes entre los 12 y 17 años hayan recibido la primera dosis de la vacuna Pfizer.
Aunque en las primeras semanas de octubre se vio una afluencia significativa de pacientes, solo el 10.7% de lo previsto a vacunar, un poco más de 2 millones, posee al menos una dosis.
Los datos son aún más desfavorables en cuanto a los esquemas completos. Hasta la última actualización se determinó que 16,598 adolescentes completaron el esquema de inmunización con la vacuna Pfizer, lo cual representa solo un 0.78% del grupo etario.
“Comenzaron a vacunar a adultos con esta vacuna -Pfizer- y ello ha dado hoy esta brecha tan importante que tenemos; sumado a ello seguimos con la escasez de vacunas que, hasta hoy, no existe certeza de que efectivamente el 15 de noviembre van a entrar más vacunas; nadie tiene un documento oficial de los proveedores que garantice este recibimiento”, sostuvo Zulma Calderón.
POSIBLE RETRACCIÓN ANTE LA DESINFORMACIÓN
Zulma Calderón agregó que la carencia de vacunas para menores de edad podría generar incertidumbres entre la población, y, en el peor de los casos, una abstinencia a completar el esquema una vez sean adquiridas las dosis en el país.
“El Ministerio de Salud no ha salido a informar sobre qué está pasando con el desabastecimiento; tampoco da alternativas de solución. Esto genera desconfianza e incertidumbre para completar el esquema; no se le ha dicho a la población que no es que la primera dosis se pierda y se tenga que reiniciar el esquema aunque la vacuna se administre fuera de los 28 días establecidos”, puntualizó.
Un segundo escenario completamente opuesto podría ser la alta demanda de la vacuna ante la poca garantía de recibir más dosis en el futuro, considerando que casi el 90% de jóvenes entre los 12 y 17 años aún carecen de su primera dosis. “Creo que puede haber también una alta demanda de la vacuna cuando ingresen las vacunas y eso todavía dejando a un grupo de la población sin completar su esquema, pero eso nuevamente nos lleva a la falta de planificación”, declaró.
¿QUÉ PASA SI LA SEGUNDA DOSIS SE ADMINISTRA LUEGO DE 28 DÍAS?
Erwin Calgua, epidemiólogo del Hospital General San Juan de Dios, explicó que, si bien extender el intervalo de vacunación con Pfizer es un tema complejo, es una posibilidad que ya se ha contemplado en otros países.
El Reino Unido inició a vacunar con Pfizer el 7 de diciembre de 2021, anunciando un intervalo de 21 días entre las dos dosis, pero luego cambió la medida a 12 semanas después de la primera vacuna. Por otro lado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó completar el esquema en un intervalo de 21 a 28 días, pero “en casos excepcionales podría aumentarse hasta los 42”.
Guatemala estableció un intervalo de 28 días para completar el esquema de Pfizer, pero el doctor Calgua consideró que podría modificarse.
“El problema que ha tenido Guatemala es exactamente el mismo que le ocurrió a Inglaterra: tuvieron un problema de logística para las segundas dosis. Entonces, están tomando decisiones de ampliar o esperar cuando venga la segunda dosis y es una decisión que la OMS establece porque entiende lo difícil que es para algunos países como nosotros porque acuérdese que la tercera dosis ya la están usando en algunos países”, refirió.
Esta mañana se lleva a cabo la aplicación de la 2da dosis de la vacuna Pfizer a menores de 12 a 17 años en la cruz roja zona 1.
?: José Orozco/LH pic.twitter.com/C3qvmZzLUh
— Diario La Hora (@lahoragt) November 4, 2021
En ese sentido, el profesional consideró factible esperar un poco más para obtener la segunda dosis de Pfizer. “Sí se está alargando el tiempo, eso es un hecho”, declaró, pero no cree que ello repercuta en la salud de los jóvenes inmunizados.
Calgua expuso que este año Pfizer ha recomendado una tercera dosis de refuerzo, lo cual compensa el decremento de anticuerpos luego de un tiempo de administrar la segunda dosis.
“Al haber hecho un intervalo tan corto de tiempo, solo 21 días, pasaron seis meses y empezó a bajar la cantidad de anticuerpos. Lo que nos dice la evidencia de otras vacunas es que esperar un mes, más o menos, es factible con Pfizer y como viene para abajo -la cantidad de anticuerpos- usted le da un refuerzo y vuelve a subir y va a lograr un poco más de tiempo”, explicó.
Además, en Guatemala existe otro antecedente donde se aplazó el intervalo de las vacunas. En el caso de Sputnik V la cartera autorizó modificaciones en el tiempo de administración de las dosis, pasando por los 90 días, hasta 60 y en ocasiones contemplando hasta los 120 días.
El epidemiólogo agregó que esta explicación debe brindarse a la población; sin embargo, como refirió Zulma Calderón, la información transmitida por el Gobierno es algunas veces nula. “El Gobierno tiene que trabajar esa percepción, infortunadamente le cuesta tener credibilidad, pero la gente que está a cargo de esto tiene que explicar esto y que no es necesario reiniciar un esquema. Además, tienen que garantizar que vengan las dosis del 15 de noviembre”, concluyó.